C A P Í T U L O 10.

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Aviso: smut.

– Bebé, vamos a otro sitio ¿sí? –jadeó Zayn.

Niall asintió. Entrelazaron sus manos, cogieron sus mochilas y echaron a correr fuera del recinto escolar hacia la moto del moreno. Montaron y el más alto le entregó el casco a Niall. Ante todo la protección para su bebé. Zayn arrancó y comenzó a conducir hacia la casa de Niall.

– Mi hermano está en casa –gritó Niall y apretó más sus brazos alrededor de la cintura del moreno para llamar su atención.

Zayn asintió sin desviar la vista de la carretera y cambió de sentido para dirigirse a su casa. No tardaron mucho en llegar. Ambos bajaron rápidamente con sus cosas y de adentraron en la casa de Zayn, dejando sus cosas tiradas en cualquier lado. El moreno empujó a Niall contra la pared del hall y atacó sus labios con fiereza, necesitaba sentirle cerca. Pasó sus manos por sus muslos y, al instante y por inercia, el rubio enrolló sus piernas alrededor de las caderas del oji-miel. Los besos para ese entonces no podían ser, siquiera, catalogados de salvajes; esos eran mucho más. dientes chocando con violencia, lenguas entrelazadas y labios moviéndose al compás.

A tientas, Zayn se dirigió a su habitación, con Niall aún sobre su cuerpo. Cuando entraron le soltó sobre el colchón y comenzó a besar su cuello, dejando pequeñas mordidas que durarían varios días sobre su piel. El moreno metió sus manos bajo la camiseta de Niall y empezó a empujarla hacia arriba, dejando al descubierto la lechosa y pálida piel del chico. La sacó con delicadeza de su cabeza y besó sus labios de nuevo. Joder que le gustaban los labios de Niall.

De un momento a otro, Niall cogió impulso y giró, quedando él encima del moreno. Tiró de su camiseta y, con ayuda del otro chico, se la quitó. El pecho del moreno estaba adornado con tatuajes de diferentes tamaños y formas. Niall besó, lamió y mordió cada parte de la piel dibujada del chico bajo suyo. Subió de nuevo hacia los labios de Zayn y los besó sin cuidado. Bajó sus manos, mientras tanto, hacia los jeans del chico. Desabrochándolos y tirando de ellos un poco hacia abajo. Se separó y tiró de los jeans hasta quitárselos por completo. Sus manos viajaron al elástico del bóxer de Zayn y comenzó a juguetear con el.

– Niall –gruñó Zayn, estaba perdiendo el control.

Niall no contestó, se limitó a bajar su bóxer lentamente, relamiéndose los labios cuando la erección del moreno quedó al descubierto.

– Tienes un pequeño problemilla aquí –comentó con inocencia fingida señalando el pene del moreno.

Era sorprendente como, en cuestión de minutos, Niall podía pasar de ser tierno e inocente a ser salvaje y pervertido.

– ¿Me ayudas a solucionarlo? –preguntó, de manera pervertida, el moreno.

Niall se mordió el labio inferior y asintió antes de inclinarse hacia abajo y pasar la legua por el glande del pene de Zayn. Sus movimientos se hicieron constantes y rápidos, arañando levemente con los dientes, lo que le proporcionaba el doble de placer al moreno.

– N-niall.

El rubio seguía su ritmo constante. Los gemidos del moreno llenaban la habitación.

– M-mierda, me c-corro –gimió entrecortadamente.

Niall hizo caso omiso de las palabras del chico y continuó succionando su miembro hasta que, finalmente, se corrió. Zayn, aún bajo los efectos del orgasmo hormigueando por su cuerpo, tiró de Niall hacia él y le besó mientras giraban en la cama, nuevamente quedando él sobre el rubio. Le quitó el jean y el bóxer de un tirón y admiró su cuerpo desde arriba. Malditamente perfecto se quedaba corto para definirle.

Zayn se inclinó sobre el para alcanzar la mesilla de noche y sacó de un cajón un bote de lubricante. Se dio cuenta, entonces, de que no tenía condones pero no le importó, él estaba limpio y Niall seguramente que también.

– ¿Estás seguro de que quieres seguir con esto? –preguntó Zayn.

Niall solo asintió y cerró los ojos al sentir como uno de los dedos del moreno se deslizaba en su interior. Zayn los movía a un ritmo constante pero tranquilo. Pronto, otro dedo se unió y el ritmo aumentó. Niall gemía obscenidades y palabras que el otro chico no era capaz de comprender, mientras que se retorcía bajo el incesante toque del moreno. El tercer dedo hizo que Niall soltara tal gruñido de satisfacción que provocó, incluso, un gemido por parte de Zayn. Cuando ya estuvo lo suficientemente dilatado, el moreno sacó los dedos de su interior y abrió más sus piernas, colocándose entre estas. Alineó su miembro en la entrada de chico y empujó un poco, pero sin penetrarlo apenas.

– ¿Listo, pequeño?

– Sí, mierda, Zayn, hazlo.

Zayn fue penetrando con cuidado a Niall y cuando todo su miembro estaba en el interior del chico, se quedó quieto para que se acostumbrara. Después de un gruñido por parte del rubio para que se moviera, empezó a embestirle despacio. Besó sus labios mientras se empujaba más contra él. Las embestidas se hacían cada vez más rápidas y rudas; la cama chirriaba y golpeaba la pared por la dureza y velocidad que empleaba el moreno para coger impulso y empujarse contra Niall.

– Ahí, ahí –medio gritó Niall clavando sus dedos en la espalda del moreno.

Zayn embistió más rápido contra ese mismo sitio, contra ese punto dulce que estaba llevando a Niall a la locura. Empezó a masajear el pene del rubio al mismo ritmo de sus embestidas.

Ambos estaban al borde del llegar al clímax.

Niall se corrió poco después y Zayn lo hizo un par de embestidas más tarde. El orgasmo invadía sus cuerpos de manera placentera y saciante.

El moreno salió del él y se inclinó para coger una camiseta del suelo, sin pararse a ver a quien pertenecía, y limpió el vientre de Niall y el suyo propio. Volvió a tirar la camiseta al suelo y se tumbó al lado de Niall, abrazándole por la cintura y pegándole a su cuerpo.

– Te quiero, Niall –susurró Zayn.

No recibió respuesta pues el rubio ya estaba plácidamente dormido.




Soy un completo asco con el smut, no me lo tengáis en cuenta.


Enjoy!

Loves you, Blue x.

My nerd »ziallDonde viven las historias. Descúbrelo ahora