Naruto permanecía callado, desde que Sakura se había llevado a Hinata a realizarle estudios neurológicos.
En su mente resonaba la voz de la ojiperla repitiendole ”¿Quién eres tú?” Ella no lo recordaba, tenía que ser una maldita broma, quizá era su castigo por haberse portado como un imbécil con ella.—Naruto— lo llama Sakura.
El rubio se dirige hacia ella.
—¿Por qué no me recuerda?— pregunta.
—Le realizamos un electroencefalograma. Debido al golpe recibido por el impacto era de esperarse que le diera amnesia.— responde.
—¿Va a recuperar la memoria?—
—Es un proceso tardado, va a requerir de mucha paciencia y cuidados especiales—
Naruto continúo hablando con Sakura sobre el estado de salud de Hinata, los cuidados que se requerirían y algunas otras cosas que ayudarían a su recuperación.
Al salir del consultorio se dirigía hacia la habitación de la ojiperla, pero no contaba con ver a cierta persona hablando con Neji.—¿Qué haces tú aquí?— pregunta con desagrado.
—Vine a ver cómo seguía Hinata— responde de la misma manera.
—Tú no tienes nada que preguntar por mí mujer— responde tajante.
—¿Ahora sí es tu mujer? Eso no parecía mientras te revolcabas con tu amante— ataca.
Neji mira a Naruto con el ceño fruncido, no entendía de qué demonios estaba hablando Toneri. El rubio estaba por irsele encima al peligris, de no ser por el castaño.
—Basta— se interpone. —No es el momento ni el lugar para hacer este tipo de escándalo— mira a ambos.
Naruto mira fijamente a Toneri, aún no olvidaba la vez que lo vió besar a su mujer; de solo recordar esa escena sentía cólera.
—Toneri, será mejor que te vayas— habla Neji.
—Está bien, me iré— mira a Naruto. —Solo por qué a mí sí me importa el bienestar de Hinata— dicho esto, gira sobre sus talones y se marcha.
—tsk—
El pelicastaño mira a Naruto, lo mira con ojos inquisitivos.
—Antes no protegí a Hinata, pero ahora será muy diferente. No voy a dejar que la sigas lastimando. Si es verdad lo que dijo Toneri, juro que en cuanto mi hermana salga de ese hospital me la llevo conmigo y no sabrás más de ella— el ojiperla se retira de ahí.
Naruto sentía un gran pesar en sus hombros, culpaba internamente su debilidad de no enfrentar las cosas.
Prefirió tomarse su tiempo antes de entrar a la habitación de Hinata, tocó la puerta y entró.Apesar que su estado había mejorado desde el día del accidente, se le podían notar algunas magulladuras, raspones y el vendaje notable de la cabeza y algunos otras cosas sobre el brazo y pierna que habían sufrido fractura.
—Hola— saluda antes de entrar por completo.
—Hola— responde Hinata, en una voz apenas audible.
—¿Cómo te sientes?— Naruto se sitúa en el pequeño sillón que quedaba a lado de la cama.
—Me duele mucho el cuerpo— lo mira con extrañeza.
—¿Qué sucede?— pregunta Naruto con inquietud. —¿Te sientes mal? ¿Llamo a un médico?— pregunta.
—No, no es eso... Es solo qué... No sé quién eres, no sé quién soy... La médico que me atendió me dijo que mi nombre es Hinata y algunas otras cosas— una lágrima se resbala por su rostro. —Estoy muy confundida, no sé qué me pasó, no sé por qué terminé aquí.—
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∞ALWAYS∞
FanfictionHinata sufre por el amor no correspondido de su esposo Naruto Uzumaki, durante 4 años de matrimonio todo ha sido un desastre, a pesar de sus intentos por acercarse a él, todo es en vano. Naruto quien acostumbra a tener todo bajo control, no puede m...