∞ALWAYS∞

Capítulo VI

Hinata se dirigía hacia la cita que tenía con Toneri. Al llegar al restaurante rápidamente lo ubicó, él de manera cortés se levanta para recibirla.

-Es bueno verte nuevamente- le da un abrazo.

-Espero no haber llegado muy tarde, tuve un contratiempo- suena avergonzada, como no sentirse así cuando olvidó que no había llevado su coche y como último recurso tuvo que pedirle a Hannah el suyo.

-No te preocupes- sonríe. -Toma asiento y pidamos algo.- se sitúa tras ella para acomodarle la silla.

-Gracias-

Ambos hablan animadamente, ordenan sus platillos y comienzan con el acuerdo que Hinata le habría propuesto el día anterior a Toneri.
Al final de la comida, la peliazul quedó fascinada, pues había logrado convencerlo en publicar sus próximas obras.
Al llegar a la oficina, le explica a Hannah lo que tiene que hacer durante su ausencia, futuras citas, revisión de borradores entre otras cosas.
Al finalizar la jornada, Hinata se encontraba muy entusiasmada, había deseado que las horas se fueran como agua para poder estar con Naruto, sale de sus pensamientos cuando tocan a su puerta.

-Adelante-

-Señora, estoy por irme... ¿Gusta que la lleve a su casa?- hace un gesto con la mano hacia afuera.

-Descuida Hannah, mi esposo vendrá por mí. Ve con cuidado- sonríe.

-Entonces nos vemos mañana señora- se despide y se va.

El reloj marcaban las 7:15, Hinata aún se encontraba en su oficina; hace más de 40 minutos que había terminado su jornada. Naruto no había llamado, así que decidió hacerlo ella y mandaba directamente a buzón.
Comenzaba a preocuparse, quizá tuvo un contratiempo o está en una junta importante y por ello se está demorando. Decidió salir del edificio pues ya estaban por cerrarlo, la noche ya había caído; Hinata mira a los lados tratando de visualizar el auto del rubio.
Habían pasado 30 minutos, faltaban solo 15 minutos para las 8, trató de llamar nuevamente a su celular en vano, pues botaba la contestadora en automático. De los nervios la ojiperla comenzó a morderse los labios, se sienta en las escaleras de la entrada principal tratando de pensar en algo...
¡Sasuke! Eso es, podría llamar a Sasuke, si Naruto está en una junta, el tendría que estar con él ya que son socios, no lo duda ni un segundo más y busca el contacto del peliazabache, al tercer tono contesta.

-Hola Hina- saluda el moreno.

-Hola Sasuke, perdona que moleste... Quizá estés en una junta importante y yo interfiriendo.-

-No pasa nada, estoy cenando con Sakura. ¿Pasa algo?- se puede percibir una voz de preocupación.

-No, lo que pasa es que Naruto quedó de pasar por mí e ir a cenar. Aún no ha llegado y pensé que estaría contigo. No contesta el celular-

-No, la última vez que lo ví fue en la oficina, estaba con unos socios de Francia- responde.

-Está bien, perdona por las molestias.-

-No es ninguna molestia. Sí gustas, Sakura y yo podemos ir por ti y...-

-No es necesario, en un momento tomo un taxi. Pero gracias de todas formas.-

-Seguro tuvo un contratiempo, trataré de localizarlo-

-Gracias Sasuke, buenas noches- cuelga.

Hinata se incorpora para poder irse a casa, trata de pedir un taxi; pero para su mala suerte van ocupados o ya no están en servicio. Maldecia en sus adentros haber dejado su auto, de nuevo sentía esa sensación de malestar en su pecho, así que prefirió caminar para despejar su mente, iba tan ida que trató de cruzar la calle y casi la atropellan, de no ser porque alguien la tomó del brazo.