Matías; Sergio Carvajal

017; |Narrado|

Bárbara POV.

Me encontraba afuera de la agencia esperando a Matías. Realmente tengo unas ganas enormes de tener sexo con el.

En los últimos días me a estado provocando muchísimo, y lo necesito.

La bocina del auto de Matías me saco de mis pensamientos, caminé hasta el auto y me subí.

Este sin pensar arrancó el auto, minutos después aparco lejos de la ciudad.

Sin esperar a más atacó mis labios de una manera posesiva, no aguante más y me moví hasta sentarme en sus piernas.

Sus manos bajaron a mis piernas y las comenzó a acariciar de arriba a abajo.

Bajo sus besos a mi cuello, e hizo a un lado la manga de mi vestido para besar ahí.

Mis jadeos se escuchaban por todo el auto, mi sexo ya estaba húmedo. El me calentaba con tan solo un beso.

--No..no puedo aquí.--dijo al separarse. Lo mire confundida.
--Es mejor atrás.--dijo mientras dejaba un corto beso.

Me quité de sus piernas y en momento que me iba a pasar por en medio de los dos asientos, Matías me dió una nalgada.

--Oye.--dije indignada.

-- Lo siento.-- dijo mientras bajaba del auto y se subía al asiento trasero.

Una vez ahí no perdió tiempo y me saco el vestido. Dejándome solo en una tanga color roja.

Me recostó en el asiento y sus labios mordisquearon, mordieron y besaron mis pechos hasta dejarlos rojos.

Mi manos viajaron a su trasero, lo metí por su pantalón y lo comencé a acariciar por encima de su boxer.

-- Aah. --gemi. Había colado un dedo a mi rebaladiza intimidad.

--Estas bien húmeda.--dijo mientras me penetraba con los dedos.

--Asi me pones.--dije mientras con mis manos tomaba su cara y lo besaba.

Yo solo quería que su pene entrara y saliera de mi.

El celular de Matías hizo acto de presencia.

Este me siguio besando sin importar quién es.

--Contesta, nene.--dije jadeante.

Se separó de mí y tomo su celular, al instante me miró y tapo mis labios.

--Hola mamá.--me puse nerviosa

...

--No, estoy llendo por mi tía.

..

--Ok, voy para allá.

...

Colgó, dejo el celular en el asiento y se sentó y yo me senté en sus piernas.

--¿Qué pasó? --dije mientras acariciaba su cuello.

--Mamá, quiere que vaya a ayudar en algo.

Lo bese profundamente, otro día con más calma me follaria.

--Ok, nene. Baja y conduce ese auto.
--dije mientras le daba un último beso.
--Mientras me cambio.

Me hizo caso y bajo del auto para subirse al asiento delantero para conducir a casa, mientras que yo me cambiaba.

Otro día que me había dejado con estas malditas ganas.