Hay veces que no miramos la contundencia que tienen nuestras palabras sobre las personas y el mínimo hecho de decir: "ya no eres, el que eras", "has cambiado" o "es más fácil pensar que el problema lo tienen los demás, cuando lo tienes tú", hace que nos replanteemos las cosas. La primera y más esencial es: ¿soy el problema? Bueno, yo, aquí, necesité la ayuda de mi novio que siempre, siempre ha estado para atenderme y cuidarme. "Eres más fuerte que eso, cielo", "cambiar no es malo, pero tú no lo has hecho. Sigues igual desde que te conocí." No sabéis la paz que me trajeron esas palabras.
Creo que es la persona con la que más me he abierto nunca; le cuento absolutamente todo y él parece no cansarse. Siempre tiene la palabra perfecta que hace que me sienta bien o me tranquilice. Me hace reír después de llorar, me dice que me quiere mil veces al día, hace que la sonrisa tonta sea uno de mis complementos favoritos y, sobre todo, hace que me sienta como en casa.
Me he enamorado de una de las mejores personas que hay en el mundo. Puedo considerarle el amor de mi vida y no me estaría equivocando porque, con él, he descubierto lo bonito que es el amor cuando alguien te quiere bien.
Una de mis cosas favoritas de él, es el hecho que ha renunciado a su discurso de "Yo no me he enamorado nunca de nadie. Yo no tengo sentimientos." solo para tratarme con amor y cariño. Le ha costado, saber manejar sus "nuevos" sentimientos, porque no estaba seguro de lo que significaban pero lo ha conseguido y, ahora, ya sabe ponerle un nombre a lo que siente por mí.
Estoy muy orgullosa de él, ¿lo sabíais? No he conocido a nadie que se esfuerce más de lo él lo hace, que se trabaje tanto su vida y que no se decaiga si no le sale bien.
También me gusta cuando sonríe o se ríe a carcajada limpia. Es un placer que he descubierto recientemente y que me alegro de haberlo hallado.
Me podría alargar dos mil y una paginas (como mínimo) hablando de él y, os aseguro que no me cansaría.
Para finalizar, me gustaría dirigirme a él para darle las gracias por todo lo que hace diariamente por mí y por lo "bonico" que me quiere.
"Te quiero mucho, vida mía. Siempre te cuidaré desde dónde esté, aunque tenga que ser por internet."
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Dedicado a mi hilo rojo. Al que complementa y forma la otra parte de mí.
Te quiero, ya lo sabes.