42.escollo

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No necesito permiso
Tomé mi decision para probar mis límites
Porque es mi negocio, Dios es mi testigo
Comienzo lo que termine
No necesito retenerme
Tomo el control en este tipo de situaciones
Estoy segura y cargada
Completamente enfocada, mi mente está abierta

Todo lo que tienes, piel a piel, oh, mi Dios
No pares...

Dangerous Woman - Ariana Grande

David había liberado el artículo.

Sin avisar, sin pedir permiso siquiera.

La bomba había caído mientras dormía plácidamente en los brazos de mi amante.

Me preguntaba en medio de la oscuridad si Chanyeol me perdonaría. Por supuesto que hablar públicamente sobre su familia no era algo muy sano para nuestra relación, pero la investigación que David y yo habíamos tenido por muchísimo tiempo, debía salir a la luz.

¿Una de las familias más poderosas del país, parte de una secta?

Park Jusil, la viuda que sigue una tradición familiar, donando millonarias cantidades a una secta.

¿Familia Park promueve la homofobia?

Misma secta que realiza actos radicales en contra de la comunidad LGBT.

Misma que tuvo mucho ruido hace algunos años porque sus miembros jóvenes acosaron hasta la muerte a un estudiante de preparatoria.

“... Es un grave error, un acto en contra de las leyes de la naturaleza y Dios…” palabras que la presidenta Park, dijo a uno de nuestros editores en una entrevista.

¿Son aquellas palabras de odio las mismas que son predicadas por esta secta?

Las luces del computador despertaron a Chanyeol y mi corazón comenzó a latir un poco fuerte.

Sus ojos se posaron en mí y con voz somnolienta me ordenó apagar el aparato.

Sin protestar lo hice, me acosté nuevamente a su lado y sus ojos una vez más me miraron, sus labios se acercaron a los míos y sin darme cuenta, estábamos teniendo sexo de nuevo.

Chanyeol me había convertido en un animal insaciable, tal vez era un modo de quitarnos el estrés, uno muy bueno.

Sentía sus uñas aferrándose a mi carne y nuestro sudor frío en el vientre acumulándose mientras mis caderas subían y bajaban rápidamente, cada estocada era deliciosa, incluso con todo el cansancio que tenía de nuestra ronda anterior, me sentía más pleno y excitado que antes. Tal vez era el peligro de ser descubierto, tal vez sólo estaba moviéndose mejor que antes.

Al despertar de manera definitiva mi cuerpo dolía una vez más, pero era un dolor placentero, incluso al verlo dormir de nuevo venían a mí las ganas de hacerlo más intenso que la vez anterior.

Y eso hicimos, hasta que se nos hizo demasiado tarde y tuvimos que salir corriendo de la ducha y sin desayunar.

Lee me esperaba a la entrada del edificio y se burló de mí, porque el hombre parecía detectar cada que tenía una sesión pasional o tal vez todas las noches se habían convertido en ello y era demasiado evidente en mi forma de actuar.

—Mi homosexual amigo, estamos fritos, la vieja llamó a la jefa.

—¿Y?

—Nos quieren demandar por difamación, aunque…

—Es imposible, las fotos hablan. —interrumpí.

—Están acorralados. —se rió.

—¿Por qué demonios no contestabas? ¿De nuevo te fuiste con ese mojigato? —entró gritando a la oficina.

—Deja de gritar, me duele la cabeza de sólo verte. —dije exhausto antes de sentarme en la silla.

La puerta se azotó.

—Claro, sólo mírate —señaló su cuello y al tocarme sentí la marca.

Tonto —pensé al recordar que Kyungsoo me había mordido demasiado fuerte en la mañana.

Había descubierto que tenía nuevos fetiches, entre ellos mordidas y ligeros ahorcamientos, no me había dado cuenta cuando comencé a rogarle que me mordiera más y más fuerte hasta venirme.

—Ajá ¿Y luego?

—La abuela, ¿Sabes lo que publicaron sobre ella? ¡Están soltando estupideces y chismes en su contra!

—Mujer, no me interesa en absoluto, créeme, estoy harto de esta familia de mierda, por mí que se jodan. Vine porque es mi último día aquí.

—¿Estás loco? ¡No puedes renunciar simplemente!

—Claro que puedo, a fin de cuentas soy un empleado más, no un esclavo… aunque pareciera que sí. Ahora, hazme el bendito favor y sal de aquí. ¿Sí?

Al verla marcharse y azotar la puerta una vez más, encendí el computador y leí el famoso artículo que hablaba sobre la abuela, estaba bien fundamentado, tenía bastantes fuentes y sin embargo lo que más me sorprendió, no fue los nexos obvios de mi abuela, sino el nombre de la editorial de la que había surgido.

Había sido Kyungsoo, lo sabía.

Incluso cuando había hablado de mí familia ¿Por qué no me sentía molesto en absoluto?

Eso era lo que más me sorprendía.

Que no me sentía indignado en absoluto.

—¿Fuiste tú, verdad?

—En realidad la mayor parte fue mi compañero, pero sí, estuve involucrado.

—Ah, está bien.

—¿Estás molesto?

—En absoluto, amor. Renuncié.

—¿A qué?

—A la empresa, fue oportuno, ¿Viste que las acciones tuvieron una caída horrenda?

—Lo siento… —dije lleno de culpabilidad, sabía que le había afectado, pero no sabía de qué forma.

—Tranquilo, te veré para la cena.

—Te amo.

—Yo también. —colgó.

Me sentía terriblemente intranquilo, los teléfonos sonaban a lo lejos y sólo quería paz.

David y yo terminamos fumando en la azotea, lo había dejado, pero ahí estaba de nuevo, cayendo en el vicio debido al estrés.

—Viejo, esto es grande. —dije dejando caer cenizas por el borde del barandal.

—¿Ya te dio miedo?

—¿A ti no?

Le observé negar con la cabeza, le dio una calada a su cigarrillo y sonrió después de exhalar el humo.

—En absoluto.

Fue extraño que a la primera persona que buscara luego del trabajo no se tratara de Kyungsoo. Baekhyun estaba tirado en el sofá de su apartamento bebiendo una botella de agua con sorpresa al verme entrar.

—No creí que fueras a venir realmente… —dijo él, incorporándose y tomando asiento correctamente en el sofá.

—Debo contarte algo. —cerré la puerta tras de mí y le miré hacer una mueca de desconfianza —Eres al único al que puedo confiarle esto…

Friends of TherapyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora