Punto Cero

La Carta

Sebastián ni siquiera le pidió el auto a sus padres, fue a toda velocidad a la central de la PDI en la comuna de Vitacura. Estaba tan ansioso como cuando los fanáticos de un equipo de fútbol esperan que su selección debute en el Mundial. Apenas entró a la sede de investigaciones se encontró con Salinas que estaba con los ojos muy abiertos.

Dócil como una manguera de jardín, Sebastián le pidió la carta escrita por su amigo fallecido y se estremeció al leerla.

"Hace ya 12 días que llegué a una tierra prohibida donde mi vida dio un giro inesperado, todo el tiempo que paso acá es como si se reflejara en mi día a día cotidiano. Mi objetivo es simple, necesito resucitar a una doncella que la sacrificaron por tener un destino maldito, en esta tierra no hay nadie, solo yo y mi fiel caballo Agro. Este lugar, me di cuenta que nació de la resonancia de varios puntos de intersección, son memorias sustituidas por entes en un vacío y grabadas en piedra, sangre, brotes, oro y alguien con la habilidad de crear seres controlados por luz. En ese mundo si alguien lo desea puede recuperar las almas de los muertos. 20/4/2108 "

-Lo leí fácilmente unas 10 veces, pero no puedo entender absolutamente nada, creí que tú al ser su mejor amigo entenderías - dijo Salinas

- No puedo descifrar nada en este momento, tengo que pensar, pero fue escrito una semana antes de que Joaquín muriera, tengo que meditar que significa cada palabra - repuso Sebastián

- ¿Podrás? Déjame decirte que es bastante difícil, esa carta tiene un contenido totalmente fuera de cualquier realidad - comentó Salinas, aún sin comprender nada. Durante todos los años que había sido detective y en los cuales había visto cientos de cartas suicidas ninguna se asemejaba a la de Joaquín.

-Tendría que intentarlo, Joaco tenía una mentalidad tan especial que da para pensar, siempre le gustó estar solo, como si las demás personas fueran tóxicas. Vivía prácticamente en otro mundo... él era de otro mundo - Sebastián por segundos vislumbró todos los momentos vividos con su amigo.

- Esta bien, te deseo suerte y mucho ánimo muchacho, avísame si descubres algo - finalizó el detective.

-Gracias, adiós - se despidió Sebastián.

Aún intrigado y un poco desconcertado por la carta que acababa de leer, el chico casi provoca un accidente de tránsito en un cruce. Estaba muy pensativo, creía que la carta tendría una mejor pista de cómo murió su colega, pero no lograba descifrarla.

Llegó a su casa y lo primero que hizo, luego de recibir el reto de sus padres por llevarse el auto sin permiso, fue releer la carta. La leyó más de una docena de veces cada vez más detenida que la anterior. Finalmente, cuando estuvo a punto de darse por vencido, empezó a recordar qué Joaquín siempre actuaba como si viviera en fuera de este planeta, porque prácticamente el mismo decía que no pertenecía a la realidad y que prefería estar solo.

Sebastián llamó a la madre de Joaquín, necesitaba preguntarle qué era lo que él hacía en sus últimos días antes de morir.

-Aló - se escuchó la voz de Verónica

-Hola, tía Vero, soy Sebastián, disculpe por molestarla, pero creo que me podría ayudar bastante. Todavía estoy afectado por todo lo que ha ocurrido - dijo Sebastián, sabiendo que la mujer estaba igual o peor que él.

- Créeme corazón, yo estoy también muy afectada y agradezco que compartas tu preocupación conmigo - contestó la madre de su amigo.

- ¿Podría preguntarle que hacía Joaquín hace unas semanas? ¿No lo notó quizás escribiendo textos o dibujando algo? - preguntó Sebastián

- No, estoy realmente segura que no, Joaquín nunca fue bueno para escribir, siempre cuando le veía en casa estaba escuchando música, decía que lo ayudaba a imaginarse a estar en otra época. Es divertido, él siempre escuchaba música de los 80, tipo U2 o algo más Psicodélico como Pink Floyd, cosas mucho más de mi época que las de ustedes - repuso Verónica, recordando con nostalgia el estéreo sonando a todo volumen en la pieza de su hijo.

- ¿Solamente música? - comentó Sebastián

-Efectivamente, solo música...... bueno a decir verdad hace como 3 semanas antes de que falleciera siempre que subía a ver como estaba lo veía jugando un videojuego, ya casi ni se acercaba a la radio - añadió la madre de Joaquín

¿Un videojuego? - preguntó sorprendido Sebastián

-Así es, nunca lo había visto tan metido en algo, es más, él casi no jugaba videojuegos - concluyó Verónica.

- ¿Podría ir a su casa por última vez? prometo no estorbar más - pidió Sebastián

-Nunca serás una molestia, eres una gran persona, ven si quieres ahora mismo - dijo Verónica

-Voy para allá - terminó Sebastián.

Algo no calzaba,sentía que cada vez al rompe cabezas le faltaban más piezas. Pero lo que nosabía Sebastián es que esas piezas estaban mucho más cerca de lo que él creía.