Smell (Omegaverse) YM /HV/ NJ

006

Despertar para Min YoonGi era lo peor que le podría pasar, y era por eso que no disfrutaba en lo absoluto las mañanas. Aún peor sabiendo que restaban tres días para regresar a su preciado fin de semana.

Sin embargo, aquel nublado martes de marzo le fue extraño despertar con ganas de salir.

Y sabía el por qué de tanto interés.

Las ganas de volver a vivir la calidez con la que aquel dichoso olor a cerezas y caramelo lo envolvió, incrementaba segundo a segundo.

¿Quién eres?

Ya empezaban las clases y esa molestia no lo dejaba tranquilo. Por más que quisiera, por más que creyera haberse olvidado de ello mientras hablaba con otros, a penas callaba y sentía cierta soledad, el recuerdo volvía a golpearlo.

Aquel aroma lo había hipnotizado de una manera inexplicable, lo necesitaba una vez...dos... tres veces quizás.

No quiso admitirlo pero dentro suyo ya se sentía consumido.

Necesito encontrarte...

🎀

- Alumnos, el día de hoy sólo tendremos dos horas por cada bloque, así que, felicidades, se irán más temprano - era evidente el falso entusiasmo - Nos hemos enterado de lo ocurrido ayer por la noche y no queremos lidiar con ningún conflicto que pueda generarse - se comenzaron a escuchar susurros en el salón - Decidimos que era mejor si los alfas tomaban un descanso para poder mantenerlos tranquilos a todos. Gracias por su atención, pueden continuar hasta medio día - la voz de la directora dejó de escucharse a través de los parlantes y lo que en su momento eran susurros se convirtió en bullicio.

Jin, el precioso Omega de último año había estado escuchando palabra por palabra, y efectivamente no pudo retener la molestia.

- Ah, pero cuando a los Omegas nos da el celo no dan ni los buenos días - bufó - No vengan con estupide-

- Te ves precioso molesto - fue interrumpido.

Bendita suerte.

No tenía ganas de pelear con nadie, y aún menos con un alfa ¡Peor aún! Con aquel alfa en específico. Así que, procedió a ignorarlo.

- Hey... - rió al ver la evidente evación - Vamos hyung, ya es la enésima vez que te invito a una cita, al menos acepta por lástima - el alfa se recostó sobre la mesa sin importar el rechazo mientras apreciaba al lindo omega delante suyo.

Mierda, cada vez me gusta más...

Pensó.

- Ya cánsate, Kim - volteó al lado contrario queriendo evitar otra insinuación.

¿Es que no entiende?

- Me encanta cuando dices mi apellido - rió - ¿Si te has dado cuenta que-

- Si, si... ugh - gruñó detestando las coincidencias.

- ¿En serio tanto me odias? - preguntó aún con la sonrisa sobre el rostro - ¿O sólo niegas que te gusto y te haces el difícil?

Si. Suficiente.

- Se acabó - Jin se paró completamente harto, detestaba a los alfas que, como él, creían ser capaces de tener todo a su paso.

¿En verdad creía que por que todas y todos los omegas caían ante él, él también lo haría?

Nunca.

- Profesor, ¿Me dejaría ir al baño?

- Adelante joven Kim.

Mierda, ese apellido.