4

4.4K 178 36
                                    

Sin rencores.

SCARLETTE

Ahora estoy caminando hacia mi casa, las clases por hoy han terminado, este primer día no ha estado nada mal.

De seguro se preguntarán ¿Por qué camino?

Bueno, la razón es, que quiero caminar, quiero pensar, porque, no sé, solo quiero hacer eso.

Mis pensamientos son interrumpidos por una bocina de auto, haciéndome voltear a donde estaba este. El chico volteó a mirarme, ahí estaban esos ojos azules, ese cabello castaño, trataba de mirarme con inocencia, pero no podía evitar mirarme con interés y gusto. No era nadie más ni nadie menos que Marlon.

-¿Te llevo?-preguntó, totalmente neutral, pero con un poco de nerviosismo al no saber cuál sería mi respuesta.

¿Debería de aprovechar esta oportunidad? O sea, eso me serviría de algo, ¿No?. ¡Pues claro que sí! El objetivo aquí era enamorarlo, y bien sabía que debía de aprovechar cualquier oportunidad, pero tampoco es como que yo fuera arrasando y haciendo cosas a lo loco y sin detenerme a pensar, no estamos para eso. Así que me decidí por aprovechar esta jugosa oportunidad.

-¿No es mucha molestia?-pregunté queriéndome hacer la inocente, a ver si así caía, equisde.

-No, igual ya iba para tu casa-dijo Marlon, tratando de que su tono de voz sonara sin importancia.

-Está bien-dije, le miré y pude percatarme de una chispita de emoción en esas dos fuentes de agua que tenía por ojos. Sonreí para mis adentros en aquel instante, y me dirigí al auto, entré al asiento del copiloto.

El camino a la casa era un poco largo, había un silencio ahí, nada incómodo para mí, pero creo que todo lo contrario para él, era claro que estaba un poco nervioso por mí presencia. Pero, ¿Quién lo mandó a invitarme? JA, que soporte, equisde.

Así que carraspeó para llamar mi atención, lo cual logró. Me miró por un instante y luego siguió fijando la vista en el camino. Y empezó a hablar:

-Scarlette mira, te diré la verdad, yo estoy muy apenado por lo que te hice hace un año, fue muy feo haber jugado contigo de esa manera y la verdad es que lo siento mucho, espero que me perdones, aunque si no lo haces, te entenderé, al final de cuentas el malo aquí soy yo, tú solo fuiste mi víctima y lo siento por eso-dijo, yo me quedé como: mano, deja de pasar pena, por amor a ti mismo, kaiate la boca.

¡Ajá! ¿Y tú crees qué sigo siendo la misma estúpida de hace un año? ¡Pues no mi corazón, desde aquí se ve que solo dijiste eso por cómo me veo ahora, porque estoy cambiada y más linda que nunca! Pero como tengo que aguantarme las ganas y no gritarte todo eso en la cara. Mentalmente me tranquilicé y me preparé para hablar.

-No, emm, está bien, te perdono, sin rencores, ya ni me acordaba de eso-dije, obvio que mintiendo, lo que él me hizo solo se me olvidará cuando ya me haya vengado de él, espero ese día con ansias, con unas tremendas ansias. El sufrimiento tiene que ser como un boom en su vida, ¡SI QUE SI!

-¿Enserio? Pues gracias, haré todo lo posible para que nos llevemos bien-dijo, al parecer con una sonrisa en su cara, dejando ver qué estaba totalmente confiado y que ya no sentiría tanto nerviosismo, oh, no sabes lo que te espera baby.

-De nada-sonreí falsamente, mis sonrisas falsas eran totalmente creíbles y las personas pensaban que eran sinceras, tenía una gran práctica en ello, si, para tener sonrisas falsas hay que entrar a una escuela de sonrisas falsas, ¿no lo sabías? ¡Pues ahora lo sabes! ¿Qué esperas para conseguir tu cupo? ¡let's go!

Luego seguimos en el auto silenciosamente, hasta llegar a mi casa, mi preciada casita. Ahí, solo estaba mi hermano, esperando por Marlon y por mi, cuando llegamos me dijo que había dejado a mis amigas en sus respectivas casas, luego yo subí a mi habitación y me dí un baño, como para relajarme y todo eso. La verdad es que ahora no tengo muy claro que hacer, pero voy a intentar algo. Tengo que provocar, tengo que empezar a enamorarlo, tengo que hacer que me ame hasta ya no poder más. El deseo de hacerlo se vuelve inmenso y tampoco es que él me guste o algo así, solo quiero vengarme y he dejado eso muy en claro ya varias veces, pero se los aclaro, solo para que no piensen en que estoy enamorada de ese chico, antes si, cuando él me había enamorado y usado, pero ahora, ahora no, ahora solo queda un frío sentimiento en mi interior, ese sentimiento es el de la venganza, la dulce, dulce venganza, porque de que será dulce, será.

Salgo de mi habitación dispuesta a atacar, soy como un tigre, el cual está buscando su presa, lo único que yo ya tenía la mía ubicada desde hace tiempo y ya quiero atacar.

Voy a la habitación de mi hermano, a ver si están ahí y lo están, claro que lo están. Así que me preparo y voy hacia ellos.

-Hola chicos ¿Qué hacen?-pregunté, sentándome al lado de Marlon, mi hermano estaba sentado en una silla y Marlon en la cama de Simón, yo me senté junto a Marlon, bastante cerca, jaja, espero que no vaya a pensar mal, eh. Pero él no me miró de mala manera, me miró bien, un poco provocativo, como si quisiera que yo lo besara. Y yo sabía perfectamente que hacer ante esos deseos.

-Humm, voy a la cocina, tengo sed-dije levantándome de la cama, para luego salir de la habitación, con una sonrisa maliciosa, me encantará esto. Creo que este chico ha captado mi señal, es como cuando hacíamos eso mismo cuando éramos "novios" y mi hermano todavía no lo sabía, yo decía que iba a "hacer algo" en la cocina y luego, llegaba Marlon junto a mi y nos besábamos, nos abrazabamos, nos decíamos "te quiero", todo lo que prácticamente se decía una pareja, así es esta situacion ahora. La única diferencia es que yo no le voy a dar a Marlon lo que desea, nel pastel.

Llegué a la cocina e hice como que buscaba un vaso para beber agua y luego, llegó Marlon, emocionado y algo agitado. Niño pero controlate, Yisus adorado haz que calme un poco esos deseos por besarme, ¡Lo necesita, URGENTE!

-Ya estoy aquí-dijo, yo volteé a verlo, haciéndome como la que no sabía nada, la loca.

-¿También tienes sed?-pregunté, frunciendo el ceño, a lo que él hizo una mueca.

-¿Acaso no me enviaste una "señal"?-preguntó muy confundido y nervioso.

-¿¡Qué!? Yo no te envié absolutamente nada-dije, en un modo exagerado y dramático-en verdad tenía sed, mucha sed.

-Ohh, yo, emm, entonces lo siento-dijo, rascándose la nuca, dando a notar su nerviosismo.

-No hay problema-dije-supongo que pensaste que tú y yo nos besaríamos, como en los viejos tiempos.

Él asintió, todavía confundido, pero sus ojos de repente se llenaron de una malicia y un deseo.

-¿No quieres?-preguntó, con una sonrisa muy pícara para mi gusto. Dios mío nunca había visto esa sonrisa por parte de él, tengo miedo, tengo miedo.

-Humm-exclamé y me acerqué a él, puse mi rostro muy cerca del de él y ya cuando lo iba a besar y había visto como él con una gran sonrisa cerraba los ojos... me separé y me fui de ahí, corriendo, hacia mi habitación, para luego echarme a reír a carcajadas. VI LA OPORTUNIDAD Y LA USÉ, JAJAJAJAJAJ, equisde.

-¡Ay Marlon! ¡Qué estúpido eres!-exclamé, ya terminando de reír...

------------------------------

Arriba Simón, recuerden que así me imagino yo a los personajes, ustedes se los pueden imaginar como quieran.

-M

Dulce VenganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora