Deseó sin control. ©

CAPÍTULO 24.

Narración de Scarlett.

Exactamente pasó una semana desde la última vez que lo observe y tuve un encuentro cercano con él.

Quedaba otra semana de vacaciones acá en Canadá, y sinceramente quería irme de una sola vez. Justin no a llamado más ni mandado mensajes, sí lo había visto, a causa de las constantes visitas de mí padre a su mansión. Y también a su empresa, no había podido evitar a la señorita reina de belleza y para hacerme sentir peor ella pasaba al despacho de Justin por mucho tiempo.
De hecho hoy estoy en este gran corporativo y no me siento del todo bien, pero cuando los observó finjo estar de lo mejor, y por ver sus expresiones de frustración se que lo hago perfectamente, sí hago algo bien es finjir y esconder mis sentimientos.

-¡Hey tú! -La familiar voz en mis oidos me saco de mí transe.

-Hola. -Conteste mirando sus ojos mieles.

-¿Porque no fuiste a saludar?

Sonreí rendida a él, me había hecho un poco amiga de Jaxon. Descubrí que es igual de inteligente que Justin, pero algo tiene que es realmente agradable.

Él es, más abierto, más gracioso. Él es más fácil de hablar.

-¿Como éstas? -Dijo.

-Perfecta, aunque un poco aburrida y hambrienta. -Me levanté a su altura, o bueno un poco más abajo.

-Te invitó a comer, ¿Vamos? -Propuso.

-Vamos. -Dije decidida recogiendo mí bolso de lado.

Él sin pedir permiso puso mí brazo entrelazado con él de él y caminamos.

Al instante observe a Bárbara, con su usual mirada de victoriosa.

-Señor Jaxon, Justin lo estaba buscando. -Dijo parándose dejando ver su inigualable cuerpo.

-Oh, muy bien. Vamos entonces. -Me arrastró hacia la puerta de Justin y me retracte.

-Aquí te esperó. -El observó mí cobardía y aún que no sabía el porqué me dejo ir. Entonces mí mente se agilizó en un instante y corrí tras él, sí él estúpido de Justin me daba celos con esa mujer, yo le daría celos con su guapo y agradable hermano.

-¿Te gustan mayores, eh? -La voz de Bárbara me sobresalto a pasar por un lado de ella.

-¡Jaxon! Yo voy con tigo. -Él se giró y esperó en la puerta mientras yo llegaba a su lado. Él sin previo avisó se adentró a la oficina de Justin. Y sus ojos mieles se abrieron con sorpresa cuando nos observó.

-Me dijo tú secretaría que me querías ver. -Habló él chico con una sonrisa.

Justin se quedo boca abierta al verme y no respondía nada. Lo que hizo que yo mirará a otro lado y él reaccionará.

-Oh, sí. Claro, vaya éstas aquí. Mhm,
y-o quería ir a comer con tigo, para platicar. -Dijo frunciendo su seño, bastante enojado.

-Hay hermano, tengo una cita ya. Es ella no la ves, voy a comer con Scarlett.

Él abrió más sus ojos y se puso en un tono rojizo. Eso es Justin muérete de celos.

-Yo, esta bien. Ya vete que tengo mucho trabajo. -Dijo sentándose de golpe en su silla y mirándome muy mal.

-Vámonos Scar, nos vemos señor gruñón. -Dijo este para guiarme con su mano y salimos.

-Deberías de ir a comer con él, se observó un tanto enojado.

-No te preocupes así de raro es él.

-Sí lo se. -Dije murmurando.

-¿Mande?