CAPÍTULO 7.

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Narración de Scarlett.

Los días habían pasado volando, tanto creó que Dios y la suerte estaba de mí lado, a lo mejor él destino me depera estar al lado de Justin.

¡Va! Tonterías.

Hoy él chófer de mí casa, por algún motivó no vino y no me recogió, o aún no venía. Tanto Hailey y Cameron se habían ido hace más de 15 minutos y yo seguía afuera del instituto.
Pensé en marcarle a Steven, pero mí mente divagó hacia donde se encontraba él, con mí padre en la empresa. ¡Genial!
Sin más preámbulos emprendí camino al hogar. Tendría que caminar  por más de media hora, tal vez mí chófer tuvo un imprevisto, no lo echaría de cabeza se muy bien en él fondo que mí padre no se tocaría él corazón dos veces para poder despedirlo por dejar a su única hija varada en él instituto y aparté tuvo que mover sus piernas frágiles hasta su casa.  Así que no lo haré.

Caminé por más de 10 minutos todavía me faltaba mucho, él sonido de un automóvil parándose a mí lado me detuvo abruptamente, luego él sonido de un clacson me hizo parar.

Tenía en mente dos opciones.

La primera era, mí chófer estaba aquí.

Y la segunda, un secuestrador me tenía entre sus redes. No quise pensar más y me gire quedándome un tanto tranquila pero también alborotada.

-Señorita Scarlett, suba- Dijo.

-No, descuide yo caminaré- Lo miré de arriba a bajó.

-Por favor, no puede andar tan sola- Sonrió desde su coche feliz.

No lo pensé dos veces, bueno para que miento no lo pensé ni una ves y me subí pues se trataba del señor Bieber. Sí de Justin Bieber.

-¿Que estas haciendo sola?- Dijo sonriendo de lado para luego mirarme fugazmente sin arrancar aún. -Sí puedo hablarte de tú ¿Cierto?.

-Claro señor sí puede- Hablé nerviosa mente- ¿Quien no se pone nerviosa con tan semejante Dios griego?

-Mí chófer no llegó, creó que tuvo un imprevisto- Volví a mirarlo sin un poco de vergüenza, bueno no tenía vergüenza ya que él no me estaba mirando.

-Que buena suerte al encontrarte, hubieras caminado mucho, además no está bien qué una señorita tan linda siendo hija de un gran empresario ande sola por ahí- Quitó su chaqueta para luego dejar a la vista sus increíbles y muy trabajados brazos llenos de TATUAJES, o esperen tiene tatuajes. Joder aún más atractivo.

-S-í, s-í. Esperó no ser una molestia para usted y su familia, ¿su esposa no se molestará?- Acomodé mí gran mochila en mis pies, él se había fijado en mí soy linda a sus ojos.

-No, no tranquila es un honor llevarte. Y tampoco Chantel se enojará- Prendió él motor de su coche y clavo sus ojos en mí.

-¡Ah me parecé mucho mejor!- Alce las mangas de mí chaqueta.

-¿Te gusta la idea del nuevo coche?- Formo una línea recta con sus labios al observar que él semáforo se había puesto en rojo.

-Me encanta, los Audi son de algún modo mí coche favorito- Sonreí al verlo sonreír, dios este hombre es perfecto. Gracias a Jafet que no me recogió.

-En eso coincidimos, amo los coches deportivos y los Audi son mis favoritos- Se removió en su asiento hasta lograr mantener una postura rígida y varonil.

-Son los mejores- Hable un poco bajo mirando su perfil.

-¿Porque tú novio no está con tigo hoy?... Digo sí se puede saber- Aclaró su garganta y arrancó su auto cuándo él semáforo estuvo por fin en verde.

Deseó sin control. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora