CAPÍTULO 22.

61 3 0
                                    

Narración de Justin.

Recuerdos, es lo único que queda de mí pasado y supongo que así nos pasa a todos.

-Que pensativo, ¿Porque será? No me digas que es por tú cerd... Tú mujer.

La miré de reojo fastidiado, está mujer logra sacarme de quicio cómo nadie en este mundo.

-Vete de aquí. -Dije moviendo algunos archivos para ver las gráficas de mí empresa.

-Vamos príncipe, no me trates así.

En sus ojos podía ver la lujuria que existía hacia mí.

-Bárbara ¿Como quieres que te traté? Éstas sacandome de quicio y tengo que trabajar. -Dije formando una línea recta en mis labios.

-Hay algo entre tú y esa niña.
-Preguntó mirándome fijamente.

-¿Cual niña? -Le dije rápidamente.

-Con eso me lo confirmas todo. -Salió dando un portazo.

Esa mujer es verdaderamente irritante. Hoy conoció a Scarlett, porque vino junto a su familia para observar mí empresa. Las miradas creó que fueron muy explícitas entre ella y yo, para que Bárbara se diera cuenta.

-Hola, ¿Puedo pasar, señor? -La melodiosa voz preguntó, haciendo que mí irritación bajará de 100 a 1.

-Pasa, por favor. -Me pare de mí silla y camine hacia ella.

-Oye, creó que a tú secretaria no le agrade mucho. -Me abrazó lento.

La miré un tanto preocupado, Bárbara puede ser muy mala cuándo se lo propone.

-¿Porque? -La bese, mirando hacia la puerta.

-Le dije que quería pasar a verte, que por favor me anunciará. Después ella me inspeccionó de arriba a bajo, y murmuró "Cómo sí sólo pudiera decirte que no"

-Oh, Bárbara es así de malhumorada. No le prestes mucha atención.
-Suspire mirando sus hermosos ojos.

-Así que Bárbara. -Murmuró tomando mis brazos.

-Sí, eh porqué no te sientas, amor.

Dije mirandola de cabeza para abajo, vestía tan atractiva que cualquier hombre podría querer estar a su lado. A veces me preguntó sí ella puede ser así de perfecta, así de sonriente e inteligente siempre.

-¿Que estás haciendo? -Pregunta con una tono de voz curiosa, e inevitablemente sonrío de manera tierna cuándo observó sus ojos llenos de emoción. Sí iris es tan azúl, tan perfecto.

-Sólo trabajó, observó varias cosas de la empresa. Cómo marcha las estadísticas, y ya sabes cosas empresariales.

-Interesante. -Sonrie de costado.

-Pense que se habían ido todos. -La mire desabrochado mí sacó.

-Y éstas en lo correcto, todos se han ido. Pero quise quedarme aquí.

Miles de emociones explícitas se hicieron presentes en mí pecho. Es una sección bastante extraña que hace mucho tiempo no sentía.

-Oh, me agrada la idea. ¿Tú familia estuvo de acuerdo?

-Lo estuvo, sólo le dije a papá que iría con tigo a preguntarte algunas cosas de la empresa para mis estudios.

-Muy sabía cariño. -Dije con un sonrisa mediana desabrochado mí corbata.

-El prometió mandarte un mensaje pata saber sí estabas de acuerdo.

Recorde por primera vez la vibración en mí pierna. No había visto él mensaje de Connor brillar en la pantalla.

"Scarlett quiere ir a preguntarte algunas cosas. ¿Puede? Asegurate que todo se le quede grabado, y que llegue sana y salva al condominio"

Sonrió de lado, tendría la tarde con ella, de eso estoy seguro.

"Ella está a salvo, gracias por dejarla venir. Y creó que todo lo retenera fácilmente, ella estará bien en casa"

"Gracias amigo"

Deje él teléfono de lado y la vista se me nubló, el contestó tan rápido y de buen gesto que quede atónito. Él me llamo "Amigo" una palabra bastante grande y comprometedora. Amigo, él me considera un amigo.

-Hey amor. ¿Justin éstas bien? -La mirada fugaz de mí acompañante me tomó por sorpresa.

-Oh, s-í lo estoy. -Carraspie la garganta.

-Parecia que habías recibido una mala noticia. -Dijo dirigiéndose a mi lado para sentarse en mis piernas.

-Hum nada de eso cariño. ¿Porque no vamos a comer antes de que me preguntes todo lo que quieras saber?

-Me parece perfecto. -Me beso los labios tiernamente y no pude evitar tomar su pierna descubierta.

Ella se paro dejando ver su increíble cuerpo, debo de admitir que cambio un poco la estructura. Digo antes lo tenía hermoso, pero desde la vez que la hice mía sus caderas lograron ensanchar más. Y eso me encanta.

-Bárbara vengo en una hora. Arreglé todas las citas con los asiáticos después de la 1:30. No me pase llamadas a menos que sean mis hermanos, mí madre, o mis hijos.
-Bárbara nos miró un tanto mal y asintió con la cabeza.

-Esta bien señor. -Dijo entre dientes tecleando en su computadora. Seguí de nuevo a Scarlett y no pude evitar mirar sus hermosas curvas.

-Interesante secretaria cariño. -Cruzó sus brazos a la par con su busto y rodó los ojos.

-Es bastante, ¿Como decirlo? Irritante en todos los aspectos. -La abracé por la cintura estando en él elevador.

-Sí me di cuenta. -Dijo para tomar mis manos.

.........

Más de 4 horas había estado con Scarlett. Nunca me había gustado que alguien estuviera con migo haciendo trabajo, hasta que llego ella.

Es una sensación increíble la que trasmite, la forma en la que habla y sus dulces besos traspasar mis labios.

-Cariño iré a la sala de juntas, tengo asuntos pendientes que arreglar. -Tome mí portafolio.

-No te preocupes, ahora mismo llamo a Cameron para que venga por mí.

-No, espera yo te llevaré, la junta dura muy poco tú quedate aquí. -Señale mí asiento y ella sonrió afectuosa.

-Que todo salga bien, te quiero. -Me dio un casto beso y me acomodó la corbata.

-Me va a ir mejor por esta gran suerte. -Apreté su cintura y le di un beso más candente.

Ella se quedó en mí despacho y yo sólo salí dándole una mirada rápida a Bárbara que permanecía sentada con una expresión en su rostro muy familiar. Enojo.

-¿Y los papeles? -Pregunte mirándola profundamente a los ojos.

-Aquí, son los del auto. -Aclaró.

-No, no necesitó esos papeles requiero los de los asiáticos. -La mire de nuevo.

-Ah tú hermano se los llevó. -Dijo indiferente.

-Gracias. -Puedes salir, ya no tienes más trabajo. No dijo nada pues se puso a recoger sus cosas. Yo por mí cuenta emprendí a la sala de juntas donde salude a cada miembro empresario.

Deseó sin control. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora