CAPÍTULO 9.

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Narración de Scarlett.

Acomode los mechones rebeldes de mí cabello en mí oreja, estaba en los últimos días de mayo, él verano estaba cerca y también las vacaciones. Observé él examen frente a mí, había estudiado lo suficiente para sacarme una nota buena.

Observe a mis alrededores, Cameron y Hailey tambien estaban concentrados.
Contesté la última pregunta y me pare segura de mi pupitre hacia él escritorio del profesor, este me sonrió complacido y me dejo salir. Tome mí mochila y mí celular para salir después de darle una mirada de despedida a Hailey y Cameron.
Steven ya debería de estar paradado afuera, ahora él sería mí chofer ya que él otro se quedaría al mando de mis abuelos, pero este aun no llegaba.

Me atragante con la gaseosa que tomaba, conocería ese Camaro negro hasta con los ojos cerrados, Justin estaba aquí y venia ¿Por mí?
Volviendo a lo del Camaro negro lo conoceria porque Justin sube un montón de fotos a su red social con todos sus autos, así que por eso conocería cualquier auto de él.
Él auto se aparcó en frente debo decir que estoy más que nerviosa no tengo la menor idea del porque esta aquí él después de casí 1 mes.

Después de 15 segundos se bajo del antes mencionado tan jodidamente perfecto, una clase de chico malo, pero con toques refinados él tiene él mejor estilo del mundo. Vestía unos pantalones de Jeen negros con pequeños rotos en sus rodillas una chaqueta de mezclilla y su pelo un poco desordenado, a excepción de la última ves que lo vi lo traía mas largó.

Sonrió mientras caminaba hacia mí, yo seguía en shock por su inesperada visita.

-Hola Scarlett- Habló sonriente, mis ojos restaban a lo que se hace llamar grandes.

-Señor, Señor Bieber ¿Hola?- Guarde la botella ya vacía del líquido.

-¿Como estas? Y en que quedamos, me deberías de hablar de tú- Se sentó a mí lado muy cerca para mí gran gusto.

-Lo siento, estoy demasiado bien y tú cómo te encuentras- Hable despacio un poco avergonzada. La plática con Hailey había pasado hace 2 semanas y debo decir que todas las palabras se quedaron gravadas en mí cabeza, había pensado muy bien las cosas y llegué a la conclusión de que él me atrae físicamente, pero adivinen que eso se acaba de esfumar hace aproximadamente 5 minutos. Estoy segura que me e enamorado.

-Estoy bien, me alegró que estés bien- Sonrió complacido mirándome directamente a los ojos.
-Eh venido por ti, espero y estés lista.

-¿Lista? ¿Para que Justin?- Reí un poco cuando él mostró su sonrisa.

-Él trató que hicimos, esperó y si hayas conseguido mí mansión- Hizo un gesto con sus labios para después tocar mí nariz. -Tienes una hermosa nariz- La acarició y se desvío hasta mí mejilla. ¡Oh! Vaya estoy muerta, maldita sea él me esta tocando. Todo cayo a mis pies, por dios Scarlett ¿Creías que venía a verte a ti? Sólo viene por la estúpida mansión.

-S-í, yo estoy lista. E-stoy segura que le encantará- Sonreí nerviosa, y maldita sea le hable de usted.

-Muy bien, entonces vamos a conocerla- Se levantó y me tendió su manó.

-A-ahora, ¿ya?- Lo mire muy nerviosa.
-Necesitó que llegue mí chofer y decirle a mis padres.

-Eso no hace falta, por esa razón tú chofer no llega y tus padres ya saben. Así que muestrame él lugar dónde pasaré excelentes vacaciones- Tomé su mano un poco nerviosa y nos dirigimos a su coche, gracias a dios que había apartado la mansión hace mucho tiempo. Saque mí celular para mandarle un texto a los vendedores y avisarles que estaría ahí en 20 minutos ellos respondieron amablemente que ahí me esperarían.

Deseó sin control. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora