Amor Por Coincidencia

48-Como si nos fuéramos a casar

Manuel: Digamos que es como la compra-venta de diversas cosas, más que nada cosas de aparatos como de tecnología, computadoras, etc… -sí, claro- pero ya pienso dejar muy pronto ese negocio, es más que nada como para ayudar, quiero dedicarme más a mi carrera…

PG: Me parece muy bien, mira de seguro mi hija te tuvo que haber dicho que si tú no venias ya no la dejaría verte, espero entiendas mis razones, no te conocemos pero he de ser sincero que te ves un buen muchacho, cuantos años dijiste que tenías?

Manuel: No le dije, tengo –voltee a ver a Gabriela- 23 años

MG: Vaya, eres más grande que Gaby

Manuel: Espero no haya problema con eso –ella volteo a ver a Gaby y su padre y yo hicimos lo mismo, ella solo negó tímida con la cabeza y yo sonreí-

PG: No me agrada mucho la idea pero Gabriela sabrá, si para ella está bien para nosotros también –vaya contradicción, primero le prohíben y ahora la dejan decidir pero me alegra que en eso no se metieran-

MG: Bueno pero creo que ya todo está claro, podemos pasar al comedor? Prepare algo que espero les guste, bueno yo  y las chicas que me ayudan…
-Ella se levantó y camino hacia lo que supongo es la cocina y él la siguió-

Gaby: Puedes quedarte? –escuche que Gaby decía bajito y voltee a verla-

Manuel: No sabía que la comida venia incluida –bromee-

Gaby: Si tienes cosas que hacer yo puedo hablar con ellos, creo que ya pasaste suficiente con las preguntas de mi padre como si nos fuéramos a casar –dijo algo tímida-

Manuel: -tome sus manos- no tienes por qué sentirte incomoda, entiendo perfectamente porque tu padre lo hace y sobre la comida, aunque tenga cosas que hacer, siempre que se presenten cosas que tengan que ver con tigo yo voy a tener todo el tiempo de mi vida para ti –bese sus manos y ella sonrió-

Gaby: Gracias por esto…

Manuel: No tienes nada que gradecer

Gaby: Ven, vamos –se levantó y tomo mi mano, yo sonreí y me levante siguiéndola hacia el comedor donde aún no había nadie, se abrió una puerta frente a este y de ahí salieron sus… padres, ella con una bandeja la cual puso en el centro y el solo siguiéndola, detrás de ellos salieron otras dos chicas que traían el resto de la comida-

MG: Siéntense, no se queden ahí parados –Él se sentó en la silla principal, a su derecha su esposa y Gabriela se dirigió a su izquierda, nunca soltó mi mano así que supuse que quería que me sentara a su lado y así lo hice no sin antes alejar su silla para que ella lo hiciera primero-