Amor Por Coincidencia

105- No lo disfrutaste?

Gaby: No Manuel -dije con miedo- no es justo, sabes que me da miedo
Manuel: Amor, por favor -dijo por enésima vez- te va a gustar
Gaby: Se que no, será horrible
Manuel: Acaso crees que no te voy a cuidar? No va a pasar nada
Gaby: Eso dijiste hace 20 minutos, ya lo hicimos, porque otra vez?
Manuel: Porque se siente bien, o dime, acaso no lo disfrutaste?
Gaby: Nooo, casi me da un infarto, es demasiado para mi
Pau: Gabriela no seas collona, vamos -dijo jalándome del otro brazo ya que en uno estaba Manuel queriendo arrastrarme hacia otro juego de la feria-
Gaby: Vayan ustedes, por favor, tu Paulina sabes que me da mucho miedo, accedí al otro porque insistieron demasiado pero ya no me hagan esto -hice un puchero-
Brandon: Si no quiere no la obliguen, si tiene miedo pues no se va a divertir
Gaby: Gracias! Al fin alguien me comprende
Manuel: No te vamos a dejar aquí sola, se trata de divertirnos todos
Gaby: Exacto, pero no me divierto en eso, me da pánico
Manuel: ok, entonces si no vas tu yo tampoco
Gaby: Ve -le tome su mano- no tienes que hacer esto por mi, a ti te gusta, subete, aquí los espero -le sonreí-
Manuel: No quiero dejarte aquí, si nos vamos a subir los 3 con quien te quedaras?
Gaby: Manuel no me va a pasar nada, ve... no quiero que ustedes no disfruten por mi, súbanse, los veo a la bajada -luego de convencerlo por un buen rato, le guiñe un ojo y me acerque a darle un pequeño beso- te amo -le susurre en sus labios-
Manuel: Yo también -me dio otro pequeño beso y se fueron al juego...-
-Estaba esperando a que terminara el juego y poder reunirme con ellos, pasaron los minutos y vi que ya venían, algo exaltados por la adrenalina, Manuel se acerco y me abrazo de un costado mientras caminábamos hacia las pantallas donde se muestran las fotos que toma la cámara del juego, pasaron varias, hasta que salía la del vagón de Manuel, me reí por su cara pero al ver a su lado la alegría se fue, una chica estaba abrazada a él, su cara escondida en su pecho y el brazo de él solo estaba recargado en los hombros de ella justo como ahora está en los míos, inmediatamente unos celos recorrieron todo mi cuerpo, quite su brazo de mí, sabía que no podía reclamar porque su respuesta iba a ser la que justamente dio...