Amor Por Coincidencia

155- Hormonal

Gaby: No quiero que duerma en otro cuarto –dije viendo a mi bebé dormir en mis brazos mientras yo estaba acostada en nuestra cama-

Manuel: Va a dormir donde tu quieras amor, puedo ir por su cuna y traerla aquí si quieres

Gaby: -suspire- ¿Cuándo nos vamos?

Manuel: En 4 días

Gaby: ¿Tan pronto? –quise sonar lo más normal posible pero lo melancólico de mi voz no se pude ocultar-

Manuel: Haber… -se sentó con cuidado frente a mi y tomo una de mis manos- ¿No te quieres ir?

Gaby: Es que, si quiero, porque allá están mis amigos, mi mamá, todo con lo que crecí pero irnos de aquí también es dejar de lado el lugar donde nació él –mire a Ian- sé que es una tontería pero todo mi embarazo la pasamos en esta ciudad y aprendí a apreciarla, ok si, si es tonto, creo que a pesar de ya no estar embarazada aún sigo hormonal –dije y Manuel rio-

Manuel: No es tonto mi amor, te entiendo, pero hay que aprender a soltar las cosas, ¿tu crees que yo no voy a extrañar estar aquí? –dijo viendo toda la recamara- ¿Los momentos que pasamos juntos? ¿La sala en donde me diste la noticia más hermosa de mi vida? –veia ahora a bebé- Pero son solo cosas amor, una casa, si, fue un hogar pero podemos construir otro, uno donde Ian va a crecer, donde vamos a crear nuevos recuerdos, el hogar se hace mientras estemos juntos y felices, no en una casa, porque estas hay en donde sea.

Gaby: Te amo –sin sentirlo ya estaba llorando-

Manuel: Gabriela! –rió- no llores amor –me abrazo- Yo también Te amo y creo que tienes razón, el embarazo si te deja hormonal aun cuando ya tienes a bebé en tus brazos.