El 30-S será un día que nunca los ecuatorianos ni el Presidente van a olvidar. Familiares heridos y muertos, pérdidas económicas, desastres y mucho más quedarán en la memoria de todos. Después de dos días regresamos a casa donde todo es igual que en la capital. Yo sólo quiero abrazar a mi mamá y revolver el cabello de Ignacio.
El 4 de octubre, Vicente Delgado anuncia un incremento de sueldos para miembros de 4 rangos medios de la policía y las Fuerzas Armadas, es decir, 25% más, alrededor de 540 dólares extra. El día siguiente firma el Estado de excepción durante 5 días, luego se extiende a 3 días más. En Quito durará más tiempo, según mi sueño.
Las actividades tratan de normalizarse. Algunas instituciones regresan a dar clases. Yo voy a la universidad, y aunque para todos sigo siendo la rara, para mis amigos soy su Generalita del siglo XXI que los salvó.
El señor George está satisfecho y orgulloso por haber sido el miembro de su familia que junto a la reencarnación de Marieta de Veintimilla pudo ayudarla a cumplir la profecía. Ha pasado un mes y ahora él está en Argentina impartiendo clases en una universidad, en ocasiones me escribe y a veces le respondo. No me gusta ese señor, aún sigo pensando que es un acosador.
Evelyn fue castigada por su mentira al igual que Denisse, pero a la última le va algo mejor. Rodrigo y ella empezaron a salir. Van al cine, juegan play zone, conversan sobre animes, en fin, se divierten. Me alegra que ella tenga su amor en tiempos de estafa.
Por mi parte le conté a Joseph mi hipótesis sobre como el soldado tomó su lugar. Él estaba sorprendido y a la vez agradecido. Me dijo que quizás fue el destino quien quiso que todo esto pasara; le pregunté si se sentía culpable y me contestó que no, está agradecido con el cabo que murió.
—Ahora es un héroe de la patria y gracias a él sigo con vida y tengo una segunda oportunidad. Supongo que debo vivir la vida que a él le corresponde —me mencionó.
Entiendo las palabras de Joseph. No sé si me las dijo con la intención de consolarme o de verdad es todo lo que siente. Hoy lo veré después de clases, supuestamente es una visita médica.
—¿Todo va bien? —pregunta cuando nos encontramos.
—Supongo que sí. Mamá está mejor, con eso de que casi pierde a su hija, está muy protectora.
—Así son las madres, la mía está igual. ¿Dónde está Denisse?, ¿cómo así tan sola?
—Se fue directo a su casa, ahora no puede salir mucho por haber mentido; además, debe portarse bien si quiere presentar a Rodrigo a su familia.
—¿Rodrigo es...? —dice curioso.
—Su enamorado, bueno no lo es aún, se están conociendo dice ella. Sin embargo, yo creo que de aquí a mañana ya concretan. Al principio no le prestaba atención por la situación de crisis y esas cosas, pero ahora sí, son muy parecidos, por ejemplo...
—Isabel —interrumpe Joseph—. ¿Sabes que me gustas, verdad? —continúa.
No respondo ante tal pregunta. Me tomó por sorpresa y no sé qué decir.
—Antes te lo había dicho, pero no quise molestarte porque sabía cómo ibas a reaccionar —argumenta su confesión.
—Yo... yo... —tartamudeo.
—No te voy a pedir que me digas lo que sientes por mí. Tómate tu tiempo para que pongas en orden tus sentimientos. Yo esperaré por ti.
"Yo esperaré por ti", esas palabras me mataron, pero no puedo decirle lo que pienso de él, tantas veces lo insulté en mi cabeza por no hacerme caso. Incluso no nos conocemos tan bien para definir mis sentimientos por él, la mayor parte del tiempo que habíamos pasado juntos era por mis sueños e intentos de salvar el país.
—Pero podemos ser amigos por ahora —le digo.
—Claro que sí.
Marieta tuvo tan mala suerte en el amor y buena en las batallas. Conmigo al parecer es al revés, o al menos eso parece al principio. Espero y mejore.
Seguro te preguntarás qué pasaron con mis sueños. Pues aún los sigo teniendo, pero ya los puedo controlar con ayuda de mi psicólogo, ya no son sueños solo de política sino también de cosas que comúnmente suceden en la vida de una chica universitaria de 20 años y no son tan frecuentes.
A veces trato de evitar que sucedan y en ocasiones funcionan, pero en otras no y el rumbo del destino sigue. En esos momentos me decepciono de mí mismo y me reprendo diciéndome que pude hacerlo mejor.
Es difícil intentar persuadir a las personas de lo que puede pasar, ellas solo te ignoran o te tachan como loca y es ahí cuando me siento inútil. A pesar de ello están mis amigos que me apoyan y consuelan, me animan a seguir intentándolo.
Ahora, si me preguntas quién soy. Solo te puedo responder que soy Isabel Ferreti de 20 años, estudio periodismo, me levanto a las 5 de la mañana, salgo de casa a las 6 y llego a clases a las 7, peleo con Nathaly, rio con mis amigos, me enojan los profesores por sus tareas, me ponen nerviosa los exámenes, el Presidente me envía regalos y me doy el lujo de rechazarlos, mi psicólogo es un estudiante universitario, un señor desde otro país me acosa, sueño cosas del futuro y a veces del pasado y aunque no tenga una vida tan normal espero que en el futuro este don, como lo llama Denisse, me ayude en mi profesión y sea una periodista que puede evitar que el país siga sufriendo.
FIN
GRACIAS A TODOS POR LEER ESTA HISTORIA Y ACOMPAÑAR A ISABEL Y SUS AMIGOS EN LA AVENTURA DE SALVAR EL PAÍS. ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO PORQUE LE PUSE DEDICACIÓN Y EMPEÑO 😄💖
EL PRÓXIMO MARTES SUBIRÉ UN EPÍLOGO PARA QUE SEPAN UN POCO DE LA VIDA DE NUESTROS PERSONAJES LUEGO DE SU HAZAÑA 💪
POSDATA: YA TENGO PLANES PARA OTRA HISTORIA, ENTONCES LES PIDO PACIENCIA Y HASTA MIENTRAS PASEN A ENTRETENERSE EN "MI PEQUEÑO Y TRAVIESO FANTASMA"
TAMBIÉN NO OLVIDEN DE SEGUIRLE EN LAS REDES. BYE.
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MÁS ALLÁ DE MIS SUEÑOS «TERMINADA»
Random¿Qué harías si de la noche a la mañana empiezas a tener sueños que parecen tan reales que incluso te afectan tanto física como mentalmente? Isabel es una chica "común". Va a la universidad, tiene amigos, vive con su mamá y hermano menor, va al psicó...