No sé que me pasa últimamente.
No puedo dejar de mirarte, de admirarte, de pensar en ti.
Me siento bien cuando estoy contigo, me gusta que te preocupes por mi y me hagas sentir protegido.
Quisiera poder decirte lo que siento.
No sé lo que puedas llegar a pensar de mi, pero mientras tanto prefiero no arriesgarme y tenerte como amigo.
No soportaría un rechazo, no soportaría que no aceptaras mis sentimientos.
En verdad, estoy bien siendo tu amigo.
Puedo estar contigo todo el tiempo, disfrutar de tu compañía, de tus abrazos y tus demostraciones de cariño.
Aunque admito que hay veces que me gustaría que fueras así sólo conmigo.
Trato de no pensar en eso, porque todos somos amigos, lo entiendo.
Pero a veces me siento triste, porque muy en el fondo desearía ser yo la única persona que recibiera tu amor.
Seungcheol, sé que nunca leerás esta carta y aunque la leyeras dudo mucho que llegaras a entenderla.
Sé que tu fuerte no es el inglés, pero sólo así puedo confesar mi amor por ti.
Todas mis alegrías, todas mis tristezas, todas mis angustias son por ti.
Y la verdad no me importa sufrir, no si se trata de ti.
Puedo parecer un poco masoquista pero es la verdad, eres tú.
Nunca lo quise aceptar.
Siempre lo supe, pero mi sentido común, mi sentido de lo que está bien y lo que está mal bloqueó mi mente y mis pensamientos.
Ya no me siento culpable de quererte.
Antes me aterraba este sentimiento, no lo entendía, en realidad no supe en que momento dejé de sentir amistad.
Ahora que tenemos un poco de tiempo libre, iré a Estados Unidos, por eso te dejo esta carta.
Para serte sincero, no sé si volveré.
Sé que parecerá malo y hasta egoísta de mi parte dejar el grupo a estas alturas, pero no sé si pueda seguir soportando estar a tu lado y no poder decirte lo que siento.
Soy un cobarde, no lo puedo cambiar.
No te diré adiós, si no hasta pronto.
Tal vez un día nos volvamos a ver.
Con cariño, Jisoo.
Después de escribir esa carta de despedida, dobló la hoja y la metió a un pequeño sobre blanco.
Se la entregaría a Seungcheol el día siguiente al despedirse para marcharse a su hogar en EU.