◌✰್ 𝐌𝐀𝐗𝐈𝐍𝐄.
❝Una ventaja de ser un perdedor, es que no tienes nada que perder❞
Maxine Baudelaire es una guerrera Lyoko desde el principio.
Así que, a pesar de que Max pasó una vida dura no tarda en ayudar al rarito de su clase, Jeremy Belpois...
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—¿DE VERDAD HAY QUE HACER ESTO? —reprochó Maxine, bostezando—. Me muero de sueño.
—Deja de quejarte, Jim te oirá —le susurró Odd.
—¿Sabes la hora qué es? La gente tiene que dormir entre siete y nueve horas para ir a clase.
—¡Shhhh! Kiwi ya sale.
Odd y Max usaban de cebo a Kiwi, el perro del primero, para que Jim, el profesor de gimnasia, lo siguiera hacia Jeremy, ya que él y Ulrich estaban haciendo un graffiti burlón de Jim -Ulrich se escondería para que solo pillara al de gafas-. Hacían eso porque empezaban las vacaciones de otoño y Jeremy tenía que quedarse para trabajar con la desvirtualización de Aelita, y como los padres de Jeremy le obligaban a ir a casa, Max le propuso la idea de montar una gorda para que le castiguen estos días y así poder quedarse aquí.
Claramente la idea del graffiti en una de las paredes de la Academia no fue idea suya, y pensaba que tampoco era la mejor idea. Ahora Max se quedaría esas vacaciones junto a Jeremy trabajando con lo de Aelita, ya que Ulrich, Odd y Yumi sí se tenían que ir, así que lo bueno es que no se quedaba sola -aunque podría irse con su tía Fleur, pero prefería que no-.
Max y Odd vieron a Kiwi salir corriendo y a Jim medio dormido persiguiéndolo.
—¡Ese es mi perro! —victoreó Odd.
—¿Ya está? Iré a dormir —dijo Max levantándose del suelo.
—No, ahora tenemos que recoger a Kiwi para que no lo atrape.
Max suspiró cansada.
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Resulta que todo había salido según el plan; Jim pilló a Jeremy presuntamente haciendo el graffiti solo y lo castigó todas las vacaciones. Ahora, Jeremy recién salía del despacho del director para contarles a sus amigos.
—¿Y qué te ha dicho? —le preguntó Yumi.
—Pues... castigado aquí todas las vacaciones —sonreía Jeremy.
