Amor a Primera Vista (Jos Canela)

CAPITULO 13

"José Canela, nuestro gerente de obra"

La sorpresa es mutua entre él y yo, su rostro es un poema completo, no quiero ver mi propia expresión, el hombre trajeado parece no notar aquello.

-La Señorita Villalpando esta a cargo de publicidad del nuevo proyecto/ habla aquel hombre/ así que vamos a vernos muy seguido/ Jos esboza una sonrisa al igual que yo.

-Un placer señorita Villalpando / dice haciendo énfasis en esa palabra, toma una de mis manos entre las suyas y deposita un beso sobre mi dorso cerca de mis nudillos, todo sin romper el contacto visual.

Siento mis mejillas arder, con todas las emociones contenidas, tomó asiento y ambos caballeros imitan mi acción. La reunión comienza y conforme continuo hablando los nervios van desapareciendo, hasta olvidó por un momento que el "gerente de obra" está demasiado cerca de mí.

-Me gusta su trabajo/ el hombre de traje impecable une sus manos sobre el escritorio/ estoy seguro que al Sr. Jesús va estar de acuerdo/ su mirada viaja hasta Jos y le hace una señal de aprobación, él a su vez le corresponde de igual manera.

Después de unas palabras más sobre algunas modificaciones y peticiones en especial, me despido de ambos, me pongo de pie y a paso firme camino hacia afuera cerrando la puerta a mis espaldas, ahora sí suelto el aire contenido, estos días, cada vez pienso que la vida no puede sorprenderme más, pero sucede una cosa más y lo mejor... Jos aparece últimamente en todos lados.

Apenas se cierran las puertas de metal, mi móvil suena en el bolsillo de mi pantalón anunciando un mensaje de texto.

Tengo algunos puntos que tratar con usted.
¿Podríamos agendar una reunión de trabajo
lo antes posible?
Atte: Jos Canela, Gerente de Obra, Sector
Constructora.
Jos BB 1:08 p.m

Me parece perfecto Sr. Canela, me quedé
con algunas dudas respecto a sus requerimientos,
quedó en la espera de que usted me proporcione
día y hora de la reunión. Saludos.
1:10 p.m

Mi yo interior estalla en carcajadas, camino hacia mi oficina guardando la compostura, una vez adentro, dejó caer mi peso en la silla giratoria al mismo momento cuando mi teléfono suena una vez más, rápidamente deslizó el dedo índice sobre la pantalla para leer el mensaje, pero esta vez no es él, es Freddy avisando que estará fuera el día de hoy resolviendo algunos asuntos personales. El teléfono suena una vez más.

Estimada Señorita Villalpando, queda
agendada la reunión para hoy a las
3:30 p.m en la oficina de su servidor, es
de carácter urgente, por lo que le solicito
no falte.
Jos BB 1:22 p.m

Dejó el móvil sobre el escritorio con una enorme sonrisa en mi rostro, después me concentro perdiendo la noción del tiempo.

La hora en la pantalla de mi celular anuncia que es tiempo de ir con el Gerente de Obra de la empresa, será mejor que me apresuré si no quiero perder mi trabajo.

A toda prisa camino por los pasillos, por fortuna me encuentro a Jesús, quién amablemente me indica cómo llegar. Después de toda una odisea, estoy justo frente a la puerta de la oficina del Sr. Canela, es increíble que en todo este tiempo no hayamos coincidido antes.

La puerta de madera de abre justo cuando estaba por tocar, un caballero con las mangas de la camisa dobladas perfectamente 3/4, sostiene la perilla entre sus manos.