capítulo; tres

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-¡Jungkook es increíble!- el castaño abrió sus ojitos con asombró, había pasado solo un mes y Jungkook hablaba lenguaje de señas con fluidez.

-"Ya no necesitó escribir todo para ti"

-Eso es bueno, tú letra es muy fea- el pequeño castaño rio ante la mueca de disgusto de Jungkook.

-"Vamos a jugar Taehyung, mamá me regaló un nuevo carrito de bomberos y quiero que lo veas"- sin esperar una respuesta, Jungkook tomó la mano de Taehyung y lo arrastró escalera arriba hasta su habitación.

-Nunca había visto a Taehyung tan felíz- Eun Bi entró cargando la mochila del castaño, pasaría la noche en casa de Jungkook, algo totalmente nuevo para Tae, como para su madre.

-Puedo decir lo mismo de Jungkook, él en verdad quiere a Taehyung- ambas mujeres sonrieron al pensar en sus pequeños, Taehyung y Jungkook se habían vuelto los mejores amigos en tan poco tiempo.

Ambos niños se encontraban jugando en la habitación del pelinegro, juntos habían construído una pequeña ciudad con los juguetes de Jungkook.

-Jungkook- Taehyung detuvo sus acciones para ver al pelinegro que se encontraba del otro lado de la mini ciudad -¿Por qué quieres ser mi amigo? El resto de los niños siempre te evitan y cuando voy a mis citas medicas tienes que jugar solo- el castaño jugaba inconsciente con sus manitas.

Jungkook sonrió para levantarse y sentarse junto al castaño -"Eres diferente a los otros niños, siempre estas sonriendo, aun cuando estas triste"- el pelinegro se detuvo para observar a Taehyung antes de continuar -"Ademas eres muy tierno conmigo, por eso me gustas".

Taehyung abrazó al pelinegro, tratando de contener sus lágrimas, desde el dia en que se conocieron Jungkook se había convertido en su soporte, siempre estába con él, apoyándolo y animandolo a seguir avanzando. Las palabras de Jungkook fueron dichas con total inocencia, para él decir que gustaba de Taehyung, era solo una muestra de su cariño por su mejor amigo, una forma de demostrarle que siempre estaría a su lado, sujetándolo para evitar que cayera.

「 ♡ 」

-¿En verdad Taehyung podrá escuchar?- Jiyoon habló con asombró al escuchar las palabras de la castaña.

-Si, el Doctor Hwang dijo que a pesar de que Taehyung es algo jóven lo mejor sería que recibiera el dispositivo, asi su cuerpo se acostumbraría y podría disfrutar su niñez como un niño normal- Eun Bi sonrió con alivió, desde que descubrió el problema de Taehyung, siempre deseó que su hijo pudiese tener una infancia normal.

-Pero esos aparatos son muy costosos, ¿no es asi?

-He pensado en trabajar horas extras y vender algunas cosas que encontre en el ático.

-Eun Bi- Jiyoon sujetó sus manos -Sabés que cuentas conmigo, Jungkook y yo los apoyaremos en lo que podamos- la pelinegra sonrió recibiendo el mismo gestó como respuesta.

-Gracias, Jungkook y tú realmente han traido alegría a nuestras vidas.

Eun Bi limpiaba las lágrimas que comenzaban a agloparse en sus ojos, desde el nacimiento de Taehyung siempre estuvo sola; con solo veinte años de edad quedo embarazada del padre de su hijo, el cual al recibir la noticia se marchó, dejando a Eun Bi sola, con quien seria su hijo. A pesar de no recibir el apoyó de su familia, la castaña decidió criar a su hijo por si misma, desde entonces trabajó por darle un futuro a su pequeño, pero sus problemas aumentaron al recibir aquel terrible diagnóstico, ella siempre supo que Taehyung no era normal, actuaba diferente al resto de los niños, siempre sumido en su mundo. Pero después de años de esfuerzo y arduo trabajo, su hijo, su pequeño Taehyung, tendría la oportunidad de escuchar el mundo por primera vez, de escuchar la voz de ese chico pelinegro que ansiaba ser su amigo y ahora, era parte importante en su vida.

-Señora Kim- una infantil voz inundó el comedor, Jungkook se encontraba parado justo frente a ella, el pequeño ocultaba sus manos detras de su cuerpo.

-Yo quiero que Taehyung pueda escuchar... En verdad me gustaría que él escuchará y sonría al hacerlo- Jungkook mostró una pequeña alcancía con forma de cerdito -Estuve guardando dinero para compar un jueguete, pero prefiero dárselo a usted, Taehyung estará muy feliz cuando pueda escuchar- el pelinegro sonrió antes de entregarle el pequeño cerdito a la mujer.

Las lágrimas que se formaban en sus ojos habían comenzado una carrera por sus mejillas, Jungkook tenía solo apenas unos cuantos wons, los cuales le entregó para comprar el aparato auditivo de Tae, incluso ante su propio deseo de comprar un jueguete.

No resistió mas y rodeo al pequeño en sus brazos -Gracias Jungkookie, Taehyung se pondrá relamente feliz, el podra escuchar, podra escharte- el pequeño se separó limpiando las lágrimas de Eun Bi antes de regalarle una sonrisa.

-No, TaeTae al fin podrá escucharnos- el pequeño sonrió, haciendo a Eun Bi sintir una calidez en su corazón, Jungkook era lo que Taehyung necesitaba, el siempre estaría para su pequeño, sin importar los sacrificios que debería de hacer, estaba segura de que Jungkook permanecería a su lado.

「 ✧ 」
Hoy no tengo nada que decir, solo amen a Jungkook nené y al pequeño TaeTae cosita tierna 💕

Su amor es tan inocente, besos ( ˘ ³˘)💕

⌗Different慰⨾ kooktae Donde viven las historias. Descúbrelo ahora