⌗Different慰⨾ kooktae

capítulo; ocho

Taehyung había permanecia encerrado en su habitación, la puerta cerrada al igual que las cortinas dejando asi la habitación en completa obscuridad, los pequeños sollozos eran imposibles de callar, se lamentaba tanto ser el cobarde que era, por su culpa la vida de su madre no era fácil, incluso arrastró a Jungkook a su miseria.

Los recuerdos lo invadieron al ver el pequeño león de peluche que Jungkook compró especialmente para él, era algo tan típico del pelinegro ser tierno única y exclusivamente con él, su corazón se estrujaba al pensar en ello.

¿Es que acaso no podía ser felíz?, él no deseo nacer asi, tampoco era culpa de su madre, lo sabía perfectamente, no podía tener una vida normal y mucho menos declarar sus sentimientos hacia Jungkook, su vida estaba destinada a la infelicidad, ahora lo comprendía, talvez lo hizo demasiado tardé.

「 ♡ 」

Jungkook corría lo mas rápido que sus piernas podían, su respiración entrecortada se mezclaba con leves gemidos de cansancio, había salido corriendo de su casa apenas corto la llamada con la Sr. Kim, Taehyung no respondía los mensajes ni llamadas, tampoco había bajado a almorzar o hacer alguna de sus típicas actividades.

Apenas tocó el tiembre la puerta fue abierta dejando ver el rostro preocupado de la Sr. Kim, sin decir nada entro quitándose los zapatos con desesperó, corrió escalera arriba hasta quedar frente aquella puerta blanca, podía escuchar los sollozos de Taehyung, las venas de su cuello comenzaron a marcarse ante el enojo, sería capaz de matar a aquel que se atrevió a hacer llorar a su Tae.

Tocó la puerta sin recibir respuesta, toco una segunda vez esperando escuchar el cerrojo de la puerta ser abierto, pero una vez mas el silenció reinó.

-Taehyung soy Jungkook, abre la puerta por favor.

El pelinegro tocaba la puerta con desesperó, hacia el suficiente ruido para ser escuchado incluso por los vecinos, pero Taehyung parecía no percatarse de ello.

-TaeTae abre por favor, estoy preocupado, estas llorando y...- las lágrimas escaparon de sus ojos haciéndolo callar.

Dio la espalda a la puerta, llegando hasta el suelo al deslizarse por la superficie blanca, si Taehyung no tenía la intención de abrir la puerta, el permanecería justo frente a ella, llorando en silenció y lamentándose por no poder hacer nada.

「 ♡ 」

Sintió la puerta ser abierta con mucho cuidado, sus ojos se cruzaron con los de Taehyung quien rápidamente desvío su mirada. Sus ojos se centraron en observar su rostro, eran tan notorios aquellos golpes que se encontraban adornando su delicado rostro, mentalmente maldijo al bastardo que se atrevió a ponerle una mano encima.

-Tae, lo siento- Jungkook se aferró al cuello del castaño, sin embargo este no dijo nada.

-¿Por qué no respondes?, ¿qué es lo que te pasa?

Antes de que pudiera seguir preguntando, Taehyung lo arrastró dentro de su habitación, se sento en la orilla de la cama esperando a que Jungkook imitara su acción.

Las lágrimas comenzaron a brotar de sus ya hinchados ojos, el temor a la reacción de su mejor amigo lo atormentaba, sabía que los golpes en su rostro no eran para nada discretos, pero inclúso ese dolor no se comparaba al de perder una parte de su ser, una parte que Jungkook había protegido por años. Removió el mechón de cabello que le brindaba refugio a una de sus orejas, dejando ver el rastro de sangre que dejó el acto tan violento de arrancar su aparato auditivo de un solo tirón.

-"Taehyung, ¿dónde esta tú aparato?"

-Jungkook yo... fué mi culpa, no pude defenderme, Minjun tiene razón, sin ti soy completamente inútil- el castaño agachó su cabeza viendo al suelo.

Ante las palabras de Taehyung, Jungkook no pudo evitar sentir tristeza y enojo, verlo de esa forma, con pensamientos tan negativos, hacian a su corazón estremecer, sin duda Minjun se arrepentiría por atreverse a tocar a Taehyung.

Acuno el rostro de Taehyung en sus manos haciendo que este lo mirara a los ojos, le dedico una de sus tienas sonrisas antes de depositar un beso en su naríz, sus ojos brillaron al notar el sonrojó que se apoder de forma violenta del rostro del castaño, sus mejillas teñidas de un intenso color carmesí.

-Te amo, aún si no puedes escucharme y corresponder a mis sentimientos- cerro sus ojos antes de unir sus frentes para compartir de un cálido momento.

「 ✧ 」
¿Problema resuelto? ¡Pues no!
Los problemas no se resuelven con un te amo y polvos de hada o por lo menos no en este fluff. 👀