(Camila G!P)
Lauren's POV
Es un sábado por la noche. Mis amigas y yo decidimos salir de fiesta para celebrar mi 23 cumpleaños. Son las 3 de la mañana y todas han desaparecido por la pista de baile. Yo me quedo en la barra bebiéndome mi ron-manzana. Voy a pedir otra copa cuando una chica guapísima, morena de ojos marrones se me cuela.
-Oye, iba yo primero.
-Hay que ser más espabilados, guapa.
-¿Me estas llamando tonta?
-No, te estoy llamando guapa
Mientras hablamos se nos acerca el camarero.
-Buenas noches, ¿Que queréis?
-Yo quiero un gyntonic. ¿Tu, preciosa?
-Ponme otro de lo mismo.
Seguimos hablando mientras nos sirven y cuando nos dan las copas, la chica no me deja pagar. Cojo mi bebida y bebo un trago.
-Dios, que calor hace aquí dentro.-digo mientras me abanico con la mano.
-¿Te vienes a la terraza? Allí se está muy bien y casi no hay gente- dice en mi oído a causa del alto volumen de la música
-¿Para que quieres que haya poca gente?
-Tal vez para conocerte más, me has parecido interesante.
Salimos a la terraza, que está vacía. Nos sentamos en unos sofás que hay allí y posamos nuestras copas en la mesa que tenemos delante.
-¿Bueno y como te llamas?
- Yo te lo digo luego.- le digo guiñándole un ojo.-primero dime el tuyo
-Me llamo Camila, preciosa.
De pronto mi móvil vibra y lo saco del bolso para contestar. Es una de mis amigas, que me dice que ya se van a casa y sí me quedo o me esperan. Les digo que se vayan, que dentro de un rato voy yo. Camila al escuchar la conversación, sonrie poniendo la lengua entre los dientes. Estamos un rato más allí hasta las 4:30 am. Entramos de nuevo al local y al mirar hacia la puerta cruzo mi mirada con la última persona a la que quiero ver, mi ex. El baja la mirada hasta mi mano, lo que causa que yo haga lo mismo y veo que está entrelazada con la de Camila. De repente, una idea se me viene a la mente.. Me doy la vuelta y miro a Camila los ojos.
-Bésame
-¿Que?
-Sí, bésame, hazlo
Y dicho y hecho, me besa. Besa bien. Que digo bien, besa genial. Su lengua pide paso a mi boca y yo se lo permito, haciendo que nuestras lenguas se metan de lleno en una batalla en la que no pretenden ganar. Nos separamos a los pocos minutos sin oxígeno y veo como mi ex sigue mirándonos. Vuelvo a entrelazar nuestras manos y me acerco a su oído.
-Ahora vámonos como sí fuéramos a irnos a casa.
Se pone delante de mi y empieza a hacernos paso por el abarrotado local hasta llegar a la puerta donde me vuelve a dar un beso, esta vez más breve. Salimos a la calle y miro mi móvil. Mi amiga me ha mandado un mensaje que se quedaba en mi casa con su conquista nocturna ya que en la suya están sus padres.
-Oh, genial
-¿Que pasa?
-No, nada. ¿puedes acercarme a un hotel?
-¿Un hotel?¿No me habías dicho que eras de aquí?
-Sí, pero mi amiga se ha ido a mi casa con su conquista y no voy a dormir en el sofá en mi propia casa...
-Puedes quedarte en la mía sí quieres
Estoy a punto de decirle que no cuando vuelvo a ver a mi ex salir del local.
-Me parce una idea excelente. Vamos a tu casa- digo en voz más alta para que mi ex lo escuche. Camila me sonríe y me lleva hasta su coche. Al cabo de una media hora o así, llegamos a un bonito edificio de apartamentos.
-Siento decirte que o compartimos la cama o no hay más sitio.
-¿Y me lo dices cuando ya estoy aquí? Sí lo llego a saber no vengo.
-Anda, ya verás como no es tan malo
-Ya veremos. ¿Puedo darme una ducha?
-Si, claro.
Cojo la toalla y me voy al baño.Tardo unos minutos en darme una ducha pero cuando salgo de la ducha me doy cuenta de una cosa. ¡mierda! No he cogido ropa, ya que tenía en mente volver a casa. Salgo enroscada en la toalla hasta la habitación de Camila, la única que hay en el apartamento.
-Esto... Camila...
-¿Sí?
-No me tengo ropa limpia y me preguntaba sí me dejarías algo...
Camila se da la vuelta y abre los ojos como platos, pasando a ser de un color más oscuro. A pesar de llevar pantalones anchos, se puede ver como su amigo va creciendo. Camila se acerca a mi mientras yo doy pasos hacia atrás, hasta quedar encerrada entre la pared y su cuerpo.
-Para lo que tengo pensado no voy a tener que dejarte nada.
Y dicho esto, me besa. Es un beso salvaje, descontrolado. Baja sus labios a mi cuello mordiendo y chupando, lo que me causa gemidos casi silenciosos que yo intento reprimir.
Me coge por los muslos haciendo que enganche las piernas en su cintura y me lleva hasta la cama. Allí, busca un preservativo en el cajón de la mesita y tras quitarme la toalla, me penetra de una estocada. Sus movimientos son rápidos, duros y precisos. Llego al orgasmo y ella sigue moviéndose, causándome otro a la vez que ella llega.
-Mmmhhh, una chica multiorgasmica, vamos a ponerla a prueba.
Vuelve a entrar en mi mientras lleva su boca a uno de mis senos y su mano al otro. Con su lengua rodea mi pezón hasta metérselo en la boca y chupar como sí de un helado se tratase. Con la mano libre baja hasta mi clítoris, donde empieza a masajear para hacerme llegar antes al orgasmo.
Tengo otros dos orgasmos, sólo que esta vez, Camila me acompaña en ambos. Damos la vuelta en la cama y me siento encima de su miembro empalándome con el, y empiezo a dar saltos sobre el. Camila me impulsa con sus fuertes brazos mientras que levanta las caderas para penetrarme más y más. Caemos las dos tendidas en la cama después de tanto ejercicio físico.
-¿Ahora vas a compartir la cama conmigo?
-No veo por que no...
Poco a poco voy cerrando los ojos hasta quedarme dormida.
Cuando me levanto a la mañana siguiente, Camila sigue dormida. Dejo un beso en sus labios y busco mi ropa de anoche. Me la pongo y le dejo una nota a Camila en su mesita.
"Te dejo aquí mi número, llámame sí quieres repetir. _ xx XXX-XXX-XXX "
FIN
