Capitulo 1. La caída del señor tenebroso.

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Nota. En la multimedia puse lo que me imaginaba como la mansión de los Cumberbatch.

Era una tranquila noche de abril, el clima no era tan frío, ni tan caliente, era una noche bastante agradable, al contrario del ambiente que se vivía en la mansión de los Cumberbatch; el señor Timothy, y la señora Annabelle estaban preocupados, Timothy caminaba de un lado para otro en el gran salón, ensimismado en sus pensamientos, buscando opciones, soluciones; mientras Annabelle estaba en un sillón, intentando dormir a la pequeña Tiana de apenas un mes de nacida, a quien sus padres amaban más que a nada, y harían lo que sea por mantenerla a salvo, por esa razón tenían que tomar una decisión. Por fin Timothy se detuvo y levantó la mirada para ver a su esposa y su pequeña hija, y después de un rato por fin habló:

— Anna — dijo con la voz cansada, y su mujer volteó a verlo — Querida, tenemos que tomar una decisión, él vendrá por nosotros, y no estoy seguro de cuanto tiempo nos queda —

La señora Cumberbatch con una profunda tristeza respondió — Lo sé Tim lo sé, pero ¿que podemos hacer? Podríamos ¿mudarnos quizá?, irnos sin dejar rastro, ¿desaparecer?, ¿que se supone que debamos hacer? — dijo con lagrimas en los ojos.

A lo que Timothy respondió — No podemos escapar, y lo sabes, pero solo se me ocurre algo por el bien de nuestra hija; sabes que Derek y Agnes estarían dispuestos a hacernos cualquier favor, incluso — titubeó, Annabelle le miró con preocupación — incluso hacerse cargo de Tiana — terminó Timothy.

— Ohh Tim, ¡No por favor! — suplicó Annabelle con lágrimas en los ojos —¡No lo hagas! no quiero separarme de ella, no quiero dejarla ir — dijo abrazando a su pequeña.

— Entiende Anna — dijo Tim — es lo mejor, ¿Que otra opción tenemos?, él vendrá, y puede que nos mate o en el mejor de los casos hará que nos unamos a sus filas, y no quiero incluir a Tiana en esto, podría morir — dijo con la voz cortada.

— Pero, podría no ser así — dijo Anna con la cabeza hacia abajo, y se levantó para dejar a Tiana en una cuna — No, si nos unimos a el —concluyó en voz baja.

— ¡No! — exclamó Timothy — ¡Claro que no!, eso nunca, no quiero obligar a mi hija a vivir con esos asquerosos ideales de la pureza de la sangre, o cerca de personas como los mortifagos, como esos locos Lestrange, prefiero que viva con muggles, conoces a los Murphy, Derek y Agnes, cuidarían de ella, por favor Anna — dijo Timothy mirándola a los ojos.

— Lo sé Tim, pero es por ellos que nos busca, por ser amigos de los muggles, por ayudarlos — sollozó Anna.

— Tu sabes que esa no es la única razón — al escucharlo, la mujer solo agachó la cabeza, mientras el hombre la observó con seriedad unos instantes, apretó los labios y decidio cambiar de tema — Ademas, ayudar muggles no es ningún crimen, no tiene nada de malo, los Murphy son buenas personas, no actúes como él y sus seguidores, no culpes a los muggles — dijo negando con la cabeza.

— Lo sé cariño lo sé — dijo Anna secándose las lágrimas — es solo que no quiero dejarla ir, no quiero Tim — volvió a sollozar — Pero tampoco quiero que nada le pase — respiró profundamente, como si estuviera tomando fuerzas para hablar — está bien lo haremos, pero tengo unas condiciones — dijo con seriedad.

Tim suspiro — Y ¿que es lo que quieres? — dijo intentando imaginar que sería lo que Anna pediría.

— Quiero que sepa sobre nosotros, que sepa que es una bruja, pero que... no vaya a Hogwarts a los 11 como cualquier niño mago normal, quiero que esperen 2 años más.

Timothy frunció el ceño — ¿Y eso para que?

— Para que no puedan encontrarla, hablaré con Albus, el lo entenderá.

Severe Love. A Severe ProfessorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora