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Solange, al igual que yo, estaba muy confundida, aunque también estaba colorada.

— ¡Que guapo! — exclamo

—¿¡Estas loca!? — pregunte exaltada

— ¿Que? Jack es guapísimo, su amigo igual, lastima que...

—Son delincuentes. —termine por ella, esta sonrió triste —Vamos o nos perderemos la película. — dije y eso hicimos.

Mientras comprábamos las palomitas no podía dejar de pensar en Finn, ese maldito casi me mata esta mañana. Reí al recordar eso.

Sol tenia razón, si, son guapos, pero como dije antes son criminales, delincuentes, o eso creo, de otra forma ¿Por que los perseguía la policía? ¿Para saludarlos? no creo.

Entramos a la sala de cine, nos sentamos en los asientos y me concentré en la película con la esperanza olvidarme de Finn y todo lo ocurrido.

Metí mi mano en el bolsillo solo porque si y sentí un plástico era como una bolsita, la saco y me sorprendo al ver lo que tenia en mi mano.

marihuana.

Maldito seas, Finn.

— ¿Fumas? — preguntó mi mejor amiga observando la bolsita con marihuana que traía en la mano.
Inmediatamente volví a meterla en mi bolsillo y la golpeé en el hombro.

— Es de ese Idiota. — dije recordando a Finn.

— ¿Que harás? — preguntó, la mire mal.

— Obviamente la fumare — dije con sarcasmo. — ¿Que crees que haré?

— Luego nos ocupamos de eso, ahora la película. — me ordenó y seguimos mirando la película.

ஐ ஐ ஐ

Una vez que termino la película y salimos de la sala, note como todos me miraban, me sentía rara, ¿habían visto la marihuana? Demonios.

Juro que matare a Finn. Ni siquiera lo conozco y ya lo odio.

— Sol ¿Soy yo o todos nos miran? — le hablé a mi mejor amiga.

— Definitivamente, todos nos miran. — dijo observando a los alrededores — Mejor salgamos. — dijo y caminamos hacia la salida.

Una vez que salimos, vi en la vereda de enfrente a Finn con Jack en sus motocicletas.

Inmediatamente apure el paso hacia a el y su amigo con rabia.
Llegue hasta donde esté estaba y me limite a golpearlo.

— Tienes algo que es mío. — dijo mirándome de arriba a bajo.

— Déjame adivinar que será. — dije con sarcasmo.

— Deja el sarcasmo, girasolcito — dijo, se levantó de su moto y se paró enfrente mío.

— ¿"Girasolcito"? — pregunte, metí la mano en mi bolsillo y saqué la bolsita de marihuana. — Ten tu mierda. — se la tire. — Me largo — Dije y me di media vuelta.

— Adiós guapa — le hablo Jack a Sol, está se sonrojó.

— ¿No quieren que las llevemos? — preguntó Jack.

— ¡Si! — exclamó Sol y se acercó a ellos.

— ¡No! — me opuse. Me di media vuelta y me quede viendo cómo mi amiga se subía a la moto de Jack, definitivamente esta loca.

— Vamos, todas quieren subirse a la parte trasera de la moto de Wolfhard — comentó Jack Y camine hacia estos.

— No me incluyas en "Todas" porque yo no soy como todas. — le hablé a Jack.

— ¡Girasolcito! — exclamó Finn con una risita

— ¿Como me llamaste? — pregunte desafiante.

— Girasolcito — repitió el de cabello enrulado. Entonces la sirena de la policía volvió a hacerse presente. Este subió a su moto y encendió el motor.

— ¿Por qué demonios me llamas así? — pregunte.

— Eres linda por fuera y por dentro, todos quieren lo que tienes, se de las chicas como tu. Se creen la gran cosa porque las demás chicas las envidian, son como un Girasol. Brillante y hermoso, pero no deja de ser otra flor. Te llamaría fresa, pero no eres así. Por lo visto eres ruda, pero no dejas de ser una princesita.

— Eso es... — no me dejó terminar.

— Súbete, antes de que la policía te vea con la marihuana en la mano. — dijo Finn desafiante. Entonces puso la bolsita de marihuana rápidamente en mi mano. La sirena de la policía cada vez estaba más cerca, entonces su patrulla se hizo visible, venían hacia nosotros. Me subí rápidamente a la parte trasera de la moto de Finn.

— ¡Arranca! — exclame

— ¡Como lo ordene! — dijo este y comenzó a andar, iba a todo motor, podía sentir como mis pulmones se quedaban sin oxígeno. La adrenalina recorría mi cuerpo. Nunca había sentido tanta.

Finn y Jack lograron perder a la policía, entonces pararon donde parecía ser una casa abandonada. Esta se encontraba "escondida" por unos árboles, cerca de un campo.

— ¡Woo! — exclamó Sol bajándose de la moto de Jack

— Ni te conozco y ya me encantas. — confesó Jack.

— Digo lo mismo. — dijo esta, esperen un segundo ¿están coqueteando? Sol definitivamente está más que loca.

— Sigues teniendo algo que es mío. — comentó Finn mirándome. Tomé la marihuana que había guardado en mi bolsillo y se la di con mala gana.

— Llévame a casa. — le ordene.

— ¿Por qué haría eso? — preguntó serio.

— Porque tu fuiste el que me trajo hasta aquí. — dije con furia.

— ¿Quien se subió a mi motocicleta? — preguntó con una sonrisita.

— ¿Quien me puso la marihuana en la mano? — pregunte y me acerque desafiante. — llévame a casa. — le ordene.

— A mi no me manda nadie, ni mucho menos una chica.

— O me llevas o te denuncio.

— No harás eso. — dijo este.

— ¿Que te hace creer que no lo haré? — pregunte.

— Porque en una semana estarás tan loca por mi, que harás lo que sea para mantenerme a salvo.

My drug | Finn Wolfhard y tu [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora