Sesos de Alga- Percabeth

La ciudad perdida.

Percy se despertó con los horribles crujidos del barco, noto que Annabeth ya no estaba a su lado y sintió pánico, intento levantarse pero el cuerpo aún le dolía demasiado como hacer cualquier tipo de esfuerzo, el sonido de la alarma y las luces rojas podían indicar dos cosas, estaban siendo atacados o Festus estaba convirtiéndose en submarino y cual quiera que fuera la opción ninguna le parecía buena, se sentía totalmente inútil y la desesperacion por saber que ocurría lo estaba inquietando, pero el dolor que sentía cada vez que intentaba hacer algo era más fuerte, al cabo de unos minutos la alarma dejó de sonar, se concentró y pudo sentir el mar al rededor del submarino, también podía sentir como la presión del agua iba aumentando, estaban yendo a gran velocidad hacia el fondo Del Mar y no entendía el por qué, escuchaba a lo lejos el sonido de los radios y de las voces que salían por estos, la puerta de su camarote se abrió y Luke apareció apresurado.

- Tenemos que darnos prisa.- dijo acercándose  a la cama de Percy.

- Darnos prisa? Para que ?

- Hay un problema con el barco.- dijo intentando incorporar a Percy.- están abordando las naves de exploración para salir de el.

- Naves de exploración? Donde está Annabeth.- Dijo mientras Luke lo ayudaba a ponerse de pie

- Está ayudando a leo.- dijo- se rehusa a abandonar a festus, piensan abordar la nave de escape del dragón.

- No me iré a ningún lado sin Annabeth.

- Ella me envío por ti, quiere que estés en la nave lo más pronto posible, estas débil y si seguimos descendiendo eso no te hará ningún bien.

Percy lo observó un momento, aunque no confiaba en Luke parecía sincero, y parecía algo que Annabeth sin duda haría, asintió y se apoyó en el, dejó que Luke lo llevará por los pasillos hasta llegar a lo que parecía una cámara como la de misiles, solo que en el fondo había una nave circular con tenazas, la nave de exploración supuso.

-  Solo hay una.- dijo Percy, cuando Luke lo dejo recostado en unas tuberías.- como saldrán los demás?

- las chicas- dijo mientras abría la nave- Hazel y piper ya abordaron la otra junto con Jason, Frank está con Annabeth y Leo, dijo que cuando salieran el se convertiría en algún animal marino y los alcanzaría.

Percy entro con ayuda de Luke a la cápsula, había espacio suficiente para dos personas, estaba llena de botones, y palancas las cuales Percy no tenía idea para que eran, una vez dentro Luke le colocó las correas de seguridad y subió colocándose en el asiento del conductor, cerró la nave por dentro y sintió como comenzaba a vibrar, comenzaron a descender, hasta que escuchó como la nave se sumergía, vio por los cristales el submarino que se quedaba quieto.

- hay alguna manera de que podamos comunicarnos con ellos?- preguntó Percy sin dejar de ver por el cristal. - Luke? -dijo girando para verlo.

Luke estaba concentrado en conducir la nave de exploración, que a diferencia del Argo II que había comenzado a subir iban hacia el fondo.

- Luke qué haces?- preguntó- el submarino va para arriba, tenemos que seguirlo.

-Veras Percy- dijo sin voltear a verlo- me temo que nosotros iremos a otro lugar, para cuando se den cuenta que no estamos, ya estaremos lo suficiente lejos de ellos.

- Fuiste tú cierto ?- dijo con la mirada clavada en la nuca de Luke.- Tu tomaste la llave y el mapa.

- A si es- respondió simplemente.

- Por que ?- dijo sin sorprenderse.

- por que EL quería que lo hiciera.

- El?

- Veras Percy- dijo como si estuviera explicándole algo a un niño pequeño.- hay seres en este mundo que son tan viejos como algunos de los dioses menores, y han reunido tanta fortuna, tanta información a lo largo de los siglos, que son capaz de destruir a los dioses.

- Sabia que no se podía confiar en ti- dijo molesto- sabía que le estabas mintiendo a Annabeth.

- Tu no tienes idea- dijo con amargura.- a lo que me destinaron cuando morí.

-Fuiste a los elíseos.-respondió

- Noo!!- dijo alzando la voz- los malditos  dioses me enviaron al peor lugar, me condenaron a la peor forma de sufrimiento, ellos me enviaron al tártaro.

- Tu... estuviste en el tártaro?

- Obligado a andar con monstruos- dijo con irritación.- si no los hubiera visto a ti y a Annabeth no hubiera podido salir.

- Un momento, como que si no nos hubieras visto?

- Veras... yo había escuchado hablar de que estaban saliendo, pero aún no había conseguido encontrar el camino a las puertas, estuve vagando por un tiempo hasta que los vi, cuando te vi pensé que al fin iba a tener mi oportunidad de vengarme- dijo con sorna- pero luego vi que Annabeth estaba contigo, aún no comprendo como fuiste capaz de llevarla a un lugar a si Jackson- dijo irritado- como fuiste capaz de meterla en esa situación, así que los seguí por la mayor parte de su travesía,  hasta que me encontré con Kelly y de ahí me llevo a las puertas.

Percy estaba procesando toda esa información, los dioses le habían mentido, Luke no había ido al inframundo, lo habían enviado al tártaro por haber llevado la guerra, y estaba intentado ayudar con otra, los Dioses lo habían vuelto a hacer, ellos habían ayudado a Luke a salir, esa situación era culpa de Percy.
Este abandonó sus pensamiento cuando escuchó la voz de Annabeth por la radio.

- Percy... Percy estás ahí?- parecía asustada.

- Annabeth- susurró

- me temo que no podrás comunicarte con Annie- dijo Luke apagando la radio.- hemos llegado.

Percy había estado Tan sumido en sus pensamientos que no se había percatado del camino que recorrían, se encontraban justo a la entrada de la cueva del kraken, noto como los enormes tentáculos, comenzaban a salir y sintió el pánico apoderarse de su cuerpo.

- Tranquiló- dijo Luke como si nada.- nos dejará entrar.

Percy dirigió su mirada al enorme animal, y noto que lo que decía Luke era cierto, el Kraken no se mostraba hostil como cuando bajaron en el submarino, estaba saliendo de la cueva y moviéndose a un lado para darle paso.

-Pero....- no pudo terminar por que sintió un enorme dolor dentro de la cabeza. De nuevo sentía que le exprimían el cerebro.

- te dije que la Atlántida sería tu fin hijo Del Mar. - la voz del Kraken le taladraba la cabeza- ahora cumplirás tu destino y tu sangre se derramará en  la Atlántida.