VII

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"Pasado, Presente,¿Futuro?
(Parte I) "

Narra Mía

Hace días que no he visto ni escuchado nada de Skyler, lastimosamente se perfectamente lo que le paso, traté de advertirselo... Pero bueno, esas malditas tienen unas mascaras perfectas, en realidad no la culpo por caer en su trampa.

Solté un largo suspiro antes de levantarme de aquel asiento, las clases habían finalizado, sin mirar atrás, salí del aula, camine por el largo pasillo enfrentando como ya era costumbre susurros y miradas tanto de asco como de lujuria, cuando al fin sali de allí, mi mente se lleno de paz, pero eso no duró mucho ya que logré ver ese maldito auto negro haciéndome señas pata que me acercara, acomode mi cabello y rápidamente me acerque a aquel auto, poniéndome a la altura del conductor, mostrando una sonrisa burlona.

-Alan! ¿Que tal? hace tiempo que no nos veíamos cielo- dije mirándolo a la cara.

-Si claro señorita, he estado bien, ahora suba, ordenes del amo- señaló la puerta trasera.

-Veo que quiere a su puta personal- suspire y subí a la parte trasera del auto.

El camino a aquel lugar fue callado y silencioso, después de un largo tiempo habiamos llegado, salí de aquel auto encendiendo un cigarrillo y mirando a una sirvienta acercarse a mi, esta me extendió una caja, curiosa la tomé y me dirigí adentro de la gran mansión, me recargue en la pared, mientras le daba una calada a mi cigarrillo, abrí aquella caja encontrándome con un hermoso vestido de seda negro y unos tacones blancos, volví a sonreír de lado, apague mi cigarrillo y camine hacia el baño más cercano cambiándome de inmediato,al terminar me refleje en el espejo, tantee con una mano aquel tatuaje de serpiente, sin pensarlo me llegaron a la mente recuerdos de como llegué aquí, las violaciones, torturas, asesinatos y contrabandos que tuve que recibir y hacer para mantener a salvo a mi familia, golpee con fuerza el espejo quebrandolo en el acto, dejando mis nudillos completamente empapados en sangre, mi respiración se volvió agitada, me tomé unos minutos y después empeze inconscientemente a reír, para luego señalar a una parte de aquel cuarto de baño, diciendo.

-Creíste que me verías llorar! - grite a aquella cámara escondida perfectamente entre los mosaicos. - Pues creo que pasaran años para que vuelvas a ver esa faseta tan deprimente de mi!- dije para salir de aquel lugar dando un portazo.

No había dado más de tres pasos cuando un hombre me interceptó, tomándome de la muñeca bruscamente para guiarme a una de las tantas habitaciones que poseia esta mansión, sin cuidado alguno me aventó dentro de esta para retirarse de inmediato, chasque la lengua, y lo maldeci, me di la vuelta para fijar mi vista en aquel hombre que conocía muy bien, me hizo una seña para que me acercara, acomode mi escote para después acercarme y sentarme en sus piernas, este al instante apago su cigarrillo, y me miró detenidamente analizando cada parte de mi.

-Algun problema conmigo amo? - dije al notar que no dejaba de mirarme.

-Ninguno... Solo que te has puesto más bonita con el pasar de los años- sonrió- no cabe duda que eres una gran adquisición Mía.

-Si... Lo sé- baje la cabeza.

-Esa escena en el baño me hizo el día eh- rio- Bueno ahora que estamos al fin solos, espero y me complazcas... Porque si no sabes lo que te espera- su voz se torno amenazante.

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