Cruel World

IX

~Ayúdame...~

Rayos de sol se colaban por un gran ventanal, abrí mis ojos con pesar esperando que esto fuera una inmunda pesadilla, pero no... me encontraba en la misma maldita habitación, desnuda con solo una sabana cubriendome, mi cuerpo empapado de semen y otros asquerosos fluidos, no pude evitar soltar una lagrima solitaria, esta descendió por mi cara hasta desaparecer en la blanca almohada, mientras por dentro me repetía una y otra vez - ¿Porque a mi? - observe mis muñecas mi piel era pálida lo que dejaba ver marcas rojas casi moradas en esa zona, emiti un quejido al tratar de ponerme de pie, pues mi cadera dolía horrores, como pude me arrastre al baño que se ubicaba a unos metros de la cama, abrí la regadera y agua helada salió de ella, quite la sabana que cubría mi cuerpo observando aún más moretones y chupetones, aventé la sabana lo más lejos que pude y me introduje en la ducha dejando que el agua fría me cubriera por completo.

Después de unos minutos salí de allí con mi ropa interior puesta, me dirigí a un pequeño cajón y tomé un vestido blanco, suspire, solo poseía dos vestidos, dos pares de ropa interior y una bata para dormir muy provocativa, me cambié rápido, solo para verme en el espejo, encima del estante que estaba al lado de este se encontraba un diminuto estuche de maquillaje, ese hombre me lo dio argumentando que odiaba verme demacrada y con los moretes demasiado visibles, haciendo caso a lo que me dijo me puse el maquillaje de manera que cubriera casi por completo mis marcas, cuando termine, hize mi cabello una trenza, de inmediato me apresure al cajón, saque de allí una pildora y me la trague en seco, volví a suspirar- Ayer traía puesto un parche, pero más vale prevenir- sin más salí de allí hacia la cocina, al llegar estaba vacía así que solamente tome una manzana la lave y comí, no tenía mucha hambre, al votarla a la basura, sentí una presencia tras de mi y por desgracia la conocía muy bien, era el... Voltee esperando algún golpe o reclamo pero no fue así, solo me miró fijamente de pies a cabeza.

-Luces bien para solo ser una mocosa- dijo

-Si...-Repondi con la cabeza gacha.

-Solo vine a buscarte porque un socio quiere conocer a mi nueva adquisición- sonrió de lado, para luego tomarme del brazo.

-Yo no... Por favor- estaba muy nerviosa ¿Y si quería que me acostara con ese tipo?

-Deja de resistirte y sígueme joder! - grito- además estas loca si piensas que dejare que alguien más te toque.

Solo asenti y lo seguí como había ordenado, caminamos por los pasillos de esa gran mansión hasta llegar a la sala, a lo lejos pude observar a un hombre con traje y barba, a su lado estaba una mujer de muy buen cuerpo fumando, al acercarnos más, pude notar una cabellera roja, crei que mi mente me estaba jugando una mala pasada, pero en cuanto esa mujer se volteo me di cuenta que era... Mía, al verla me quedé sorprendida, pero ella ni se inmutó solo me vio con indiferencia mientras, nuestros dueños hablaban.

-Leonardo! Cuanto tiempo hombre- dijo el hombre de barba estrechando la mano del contrario.

-Lo mismo digo Brian- respondió el saludo- Veo que has traído a Mia, sigue igual de buena que la última vez- sonrió, Mia solo le guiño el ojo.

-Cuando quieras te la presto, créeme que es una gran adquisición-

-No lo dudo, hablando de eso- me tomo de los hombros y me puso delante de él- ¿Que te parece mi nuevo juguete? -

-Wow, no esta nada mal, no cabe duda que Katy tiene la mejor mercancía- me sujeto de la cara viendome fijamente- ¿Y que paso con la chica que tenias antes? -