2. | ANARCHY ~ Lily Luna

|09. LORCAN

Antes hablé de la fiesta de los gemelos Scamander, ahora hablaré de lo que pasó en esa fiesta y de uno de los gemelos. Más precisamente de Lorcan Scamander. Soltaré la bomba de una: Lorcan fue mi novio.

¿Cómo pasó? Ni yo misma lo sé. Lo único importante fue que no duramos ni dos meses. Hermosa relación, ¿verdad? Y si no fuera porque no sentía nada por Lorcan hubiera sufrido mucho más esta separación que la de Scorpius, ya que fue terrible (según cuentan TODAS las personas que estaban en ese momento en el pasillo del tercer piso).

Más de medio Hogwarts estaba invitado a la fiesta (a excepción de los de primero, segundo y tercero, que eran demasiado pequeños) que se realizaba en la casa de los gritos. Como era Halloween, el aspecto antiguo, desvencijado y abandonado de la casa le daba el toque terrorífico que necesitaba. La fiesta no comenzó hasta después de que el banquete terminara y todos los maestros hubieran ido a dormir, eso sí, se necesitó una buena cantidad de hechizos desilusionadores para que cientos de alumnos pudieran escapar del castillo en medio de la noche y dirigirse a la casa de los gritos.

Yo fui con Samantha, ya que Kat tenía gripe y no podía ir. Emma, como buena amiga se ofreció a acompañarla, pero todas sabíamos que ni bien Katerina cerrara los ojos iba a ir corriendo a la fiesta. Llegamos una hora tarde porque Samantha no se terminaba de arreglar. Recuerdo que Katerina la provocaba diciendo que se arreglaba para Louis y Samantha lo negaba (aunque todos sabíamos que Louis y Sam estaban en una relación no oficial, pero relación al fin y al cabo).

Perdí a Sam una hora más tarde y me senté en un viejo sillón lleno de colillas de cigarrillo, al lado de una pareja que parecía a punto de tener relaciones. Simplemente asqueroso. Sentada allí, tomando un vaso de algo que parecía cerveza, vi a Valerie tratando de besar a Albus, mejor dicho, acorralando a mi hermano contra la pared y colgándose de su cuello cual garrapata para por fin poder presionar sus labios contra los de él. De más está decir que estallé en carcajadas cuando Albus la empujó y ella cayó al suelo.

—Vete a dormir —oí que le había gritado por encima de la música—, estás demasiado ebria.

Y después de eso se fue, dejando a Valerie en el suelo muy enojada.

Mientras yo reía, Lorcan Scamander se acercó a mí y, tras sonreirme, estuvo largo rato analizando dónde podía sentarse. Finalmente le gritó a la pareja que podían tener relaciones en una de las habitaciones del piso de arriba y les tiró un condón. La chica comenzó a reír, pero el chico lo miró de mala gana y arrastró a su novia escaleras arriba mientras Lorcan se sentaba a mi lado y pasaba una mano por sobre mis hombros.

—¿Cómo está la chica más linda de la fiesta? —preguntó. Y yo ni lerda ni perezosa respondí…

—No lo sé, ¿por qué no le preguntas a ella?

Lorcan rió y advertí que su risa no me desagradaba, es más, hasta me parecía contagiosa, por lo que solté una pequeña carcajada.

—¿Te está gustando la fiesta?

—No me puedo quejar —me encogí de hombros—. Aunque si supiera qué diablos estoy tomando sería mucho mejor.

Lorcan volvió a reír y tomó el vaso que sostenía en mis manos. Se lo llevó a los labios y probó un sorbo. Tras unos minutos me lo devolvió.

—Es cerveza muggle con un poco de whisky de malta, eso es lo que le da el sabor agridulce. Es bastante bueno si lo piensas —respondió. Yo asentí y de repente ya no tenía ningún tema de conversación con el rubio, pero él seguía teniendo el brazo alrededor de mis hombros y podía sentir su mirada clavada en mi.

De repente, diablos, otra pareja llegó y se arrojó sobre el sofá, haciendo que la mitad del cuerpo de Lorcan quedase encima mío. Nuestros labios estaban a punto de rozarse, lo miré a los ojos y sonrió, como advirtiéndome lo que iba a hacer. De un momento a otro sus labios estaban encima de los míos. Pensé en oponer resistencia, pero era una fiesta. Tenía el derecho a besar a quien quisiera en fiestas, ¿verdad? Y seguramente todo el asunto quedaría olvidado al día siguiente.

Pero eso no pasó. Dos semanas más tarde seguía teniendo encuentros con Lorcan dónde lo único que hacíamos era besarnos: en la biblioteca, los pasillos, aulas vacías… Hasta que al rubio se le ocurrió pedirme que fuera su novia. En el momento me pareció una locura, pero como Lily Potter se la pasaba haciendo cosas locas…

Los siguientes dos meses con Lorcan fueron… intensos, nos besabamos mucho más de lo que hablábamos, pero nunca llegamos a algo más ya que yo tenía miedo de que si eso pasaba, sucedería lo mismo que con Scorpius. Y por supuesto, Lorcan se enojaba por ello.

Al principio, Diario, dije que si me hubiese importado aunque sea un poco mi relación con Lorcan habría sufrido mucho más, pero como para mí Lorcan no era indispensable, transité nuestra ruptura como si fuera un examen que reprobé: lo guardé y pasé página.

¿Pero sabes que me molestó? Que me haya engañado. Que medio colegio lo haya visto metiéndole los dedos a una chica en medio del pasillo. Y que yo lo hubiese tenido que ver. Fue humillante. ¿Y quién era esa chica? Esa parte fue aún mejor.

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Capítulo que termina en suspensoo....

Hermosuras! Acabo de subir mi nueva historia "Wrong" de Albus Potter. Pásense a verla, si quieren.

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