Love Fool [Klaine]

Capítulo 24: "Deberes"

- ¡Hey, Blaine! – la voz de Finn nos hizo voltear, mientras íbamos andando de la mano por el pasillo – Vi el video que subieron ayer... Ustedes son increíbles, chicos.

- Gracias Finn – respondió mi novio, dándole una sonrisa genuina.

- Estaré esperando el siguiente – se sumó Sam, uniéndose al sentir de su amigo.

Blaine me lanzó una mirada de satisfacción, mientras besaba mi mejilla.

- Esto es tan genial – solté, siendo incapaz de contenerme – Me siento famoso, como una estrella del pop o algo así – mi moreno negó con la cabeza divertido – Te juro que cuando menos lo esperemos, nos estarán pidiendo nuestros autógrafos.

- Hmm... creo que a alguien le picó el bichito de la fama – él me hizo cosquillas en el costado y yo lo aparté porque no soporto sus ataques.

- ¡No, Blaine! – chillé riendo – No hagas eso... sabes que después no puedo para de reírme – añadí con un puchero.

- De acuerdo – alzó las manos inocentemente.

- Gracias – solté aliviado.

- Pero en casa no te salvas – me miró con perversidad y sonrió. Yo le enseñé la lengua de forma infantil.

- Vamos a clases – tomé su mano y lo tironeé al salón de francés.

Gracias al club glee, todo el mundo se había enterado de lo que planeábamos hacer en el futuro con Blaine. Ellos se encargaron de divulgar también lo de nuestra cuenta en YouTube y promocionar nuestros covers. Como publicistas, no lo hacían nada mal, pero más que nada se debía a que realmente deseaban que nos fuera bien. Y ambos lo agradecíamos.

Para las regionales, el señor Schue, también con intención de alzar nuestra pequeña fama, nos propuso interpretar el dueto principal de la presentación, a lo que ambos dijimos que sí. Yo no podía estar más feliz con todo eso.

Tal vez ya no tenía a las animadoras como antes, ni mi preciado uniforme que me daba un lugar en la escuela... Sin embargo, era el novio del presidente del consejo escolar de

McKinley, juntos nos convertimos en la pareja más popular del instituto, todos nos consideraban adorables juntos y estábamos a pasos de concretar una prometedora carrera musical.

No puedo decir que tenga algo de qué quejarme.

...

Fui recibido por los ansiosos labios de mi novio, cuando abrí la puerta de su cuarto al llegar a casa. Había salido con las chicas al centro comercial, para retomar nuestra antigua relación de amistad. Aun no era como antes, pues se me hace raro volver a estar entre ellas, pero como ya no hay rencores, ni secretos... supongo que será cosa de tiempo para que volvamos a ser lo que éramos y mejor.

- ¿Sabías que mamá fue a visitar a Burt al taller? – murmuró Blaine sobre la piel de mi cuello, antes de plantar un húmedo beso en él.

- ¿Ah, sí? – intenté sonar normal, pero salió más como un gemido que como una pregunta.

- Sí... Hmm... - acarició con su nariz mi mandíbula, ascendiendo hasta volver a mis labios - ¿Se te ocurre cómo matar el tiempo hasta que regresen? – su voz grave se me hizo profundamente sensual, susurrada en mi oído.

Me mordí el labio para no dejar que mi boca dijera lo que mi cabeza pensaba en ese momento.

- ¿Quieres oír mis sugerencias? – propuso, en lo que me besaba, pegándome a la puerta que ahora estaba cerrada tras de mí.