2. Amiga

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— JaeBum Hyung me contó que ayudarás a YoungJae Hyung a pasar su examen de conducir — comentó YuGyeom mientras recorríamos el camino de vuelta a casa desde la universidad.

Oculté mis frías manos dentro de los bolsillos de mi chaqueta bomber color verde petróleo y asentí.

— Hum... Sí, decidí ayudarlo a conseguir su licencia — dije con la vista fija en el piso, concentrándome en no pisar las líneas de la acera.

Repentinamente, se detuvo y se dobló sobre sí mismo mientras una poderosa carcajada entrecortada —la cual, me recordó a un pájaro— salió desde lo más profundo de su garganta. Lo admiré por unos segundos, asombrada y desconcertada — ya que era la primera vez que lo oía reír de esa forma— y, antes de que me diera cuenta, me encontré a mí misma riendo junto a él como si no hubiera un mañana.

¡¿CÓMO ERA POSIBLE QUE SE RIERA DE ESA FORMA?! ¡¡ERA MUY GRACIOSO!!

— JA-JA-JA-JA... — limpió una lágrima de su mejilla y se reincorporó. — Buena suerte con YoungJae Hyung. Él realmente es un reto.

— ¡Yah! ¡Déjalo en paz! — lo empujé botándolo de la acera. — Al menos él consiguió pasar el examen escrito a la primera — le recordé con tono burlón.

Su sonrisa desapareció en cosa de segundos al recordar lo que le costó pasar el examen escrito y, alzando el mentón con la mirada fija al frente, volvió a hablar con expresión seria.

— Sólo camina, ¿quieres?

Me volví a reír y entrelace su delgado brazo con el mío.

— ¡Yah! ¡No te enfades! — le pedí, picando su mejilla. — No siempre puedes ser bueno en todo. Todo el mundo tiene debilidades y la tuya... Y la de la mayoría de los chicos en realidad...— agregué, recordando que sólo mi hermano, Mark y Jackson, lograron sacar su licencia al primer intento. Aunque Mark, falló en la segunda fase de la prueba para sacar su licencia clase A pero, de igual manera, merecía su crédito. —, es la conducción.

— Yah, pero la segunda vez lo logré.

— Lo sé.

— ¿Y cuando comienzan las clases con YoungJae Hyung? — interrogó.

Me encogí de hombros cayendo en la cuenta en que no habíamos fijado un día ni una hora.

— En realidad, no aclaramos un día. Sólo acepté ser su tutora, nada más — me quite la mochila y comencé a buscar en su interior mis llaves. — Supongo que tendré que preguntarle.

Abrí la puerta y entre con YuGyeom siguiéndome los pasos. Nos quitamos los zapatos en la entrada y, mientras los ordenábamos en el mueble junto a la puerta, nos percatamos de que no sólo mi hermano se encontraba en casa, sino que también los otros cinco locos que tiene como mejores amigos.

— ¿Ustedes acaso no tienen casa? — cuestioné ingresando a la cocina con Yugy.

Todos se voltearon a vernos, dejando de lado lo que hacían por unos segundos.

— ¿Tus padres no te contaron? Nos adoptaron, así que acostúmbrate a vernos aquí, enana— mintió Jackson con una sonrisa radiante.

— Sí, seguro que sí — solté sarcástica.

— ¿No me crees? — preguntó de forma dramática, abriendo los ojos lo más posible y posando su mano derecha sobre su fuerte pecho. — Me dueles, Yeiri.

— ¡Yah, Jackson! Concéntrate — ordenó JinYoung, golpeando la cabeza del rubio con unas guías enrolladas.

El rubio se quejó pero obedeció a Park en silencio y pronto Bambam, Jackson y YoungJae se encontraban observando nuevamente con atención, lo que JinYoung les explicaba. JaeBum y Mark continuaron cocinando lo que deduje, era una pizza y me acerque a mi hermano para robar un pedazo de queso que compartí con Wang, quien me agradeció en silencio.

— ¿Junta de estudios?

Asintió.

— Los chicos tienen examen la próxima semana y no entienden nada, por lo que JinYoung es su única salvación— rio. — ¿Cómo te fue en la universidad?

— Bien. Con YuGyeom tenemos casi todo listo para la presentación de la próxima semana. — choqué los puños con el susodicho. — Irán a vernos, ¿verdad?

— Por supuesto — respondieron a coro.

— Perfecto. Iré a cambiarme por algo más cómodo — avisé, saliendo del lugar tras robar otro poco más de queso, consiguiendo que Mark se quejara.

Me dirigí a las escaleras y, antes de poder subir, escuche la voz de YoungJae llamándome.

— ¡¡Yeiri!!

Me giré encontrándome con el castaño a menos de un metro de mí, luciendo increíblemente guapo con sólo una playera color blanco, una chaqueta negra con estampados sobre esta y unos jeans ajustados del mismo color.

Peinó con los dedos de su mano izquierda su suave y brilloso cabello color chocolate antes de hablar.

— ¿Podríamos comenzar mañana con las clases?

— Hum... Sí, está bien.

Las comisuras de sus labios se elevaron en una preciosa sonrisa y sus ojos se volvieron dos finas líneas. De forma sorpresiva, me tomó por los hombros y me acercó a su cuerpo para envolverme en un poderoso abrazo de oso mientras se movía de un lado al otro sin parar de repetir la palabra "gracias".

— Estás muy cariñoso últimamente — comenté risueña, correspondiendo su gesto el cual, a pesar de no ser muy usual, tampoco era algo muy raro.

Su anatomía se tensó y detuvo sus movimientos, como si lo que yo acababa de decir fuera algo malo. Se separó un poco de mí y quise pellizcarle las mejillas al ver cómo estas, adquirían un color rojizo, obtenido como resultado la imagen de un tierno YoungJae.

— Eso... ¿Te molesta?

— ¿El que me abraces? — pregunté, recibiendo un sonido afirmativo de su parte. — No, claro que no. Somos amigos y los amigos se abrazan, ¿no?

— Sí, tienes razón — rio entre dientes de una forma particularmente apagada mientras su mano derecha, rascaba la parte posterior de su cuello.

Por un momento, creí vislumbrar un brillo de tristeza en sus ojos pero fue algo tan fugaz, que de un segundo a otro ya había desaparecido, por lo que preferí pensar que sólo se trataba de mi cansada mente que me jugaba una mala pasada.

Porque, a pesar del flechazo casi superado que tengo por él, debía ser capaz de darme cuenta cuando mis sentimientos por YoungJae me hacían ver cosas que, en realidad, no estaban ahí y que sólo lograrían que mi pequeño corazón, sufriera por seguir haciéndome ilusiones con alguien que no me ve como algo más que una amiga.

Porque... Eso suponía que era para YoungJae, una simple amiga, ¿verdad? 

BAD DRIVER » CHOI YOUNGJAE ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora