EFÍMERO

La sonrisa

Se rascó la cara, nervioso, tras haber leído el artículo de internet. No sabía con certeza a que se debía ese cosquilleo que sentía alrededor de la boca ni por qué albergaba esa sensación tan extraña en su barriga. Las comisuras de sus labios comenzaron a torcerse, hacia arriba, según iba recordando lo leído. Sintió miedo en el momento en el que unas ganas locas de abrir la boca se apoderaron de él. Comenzó a temblarle la barbilla, casi no podía controlarlo. Se levantó de un salto y corrió a mirarse en el espejo del baño. Para cuando llegó una forma demasiado extraña y desconocida se había pintado en su rostro. Tenía la boca abierta, en forma de u, dejando al descubierto sus dientes, incluso se le había formado dos pequeños hoyuelos a cada lado de la boca. Pero eso no era lo peor, lo realmente aterrador era la sensación de paz, de felicidad, que le había inundado por completo. ¿Era lo que estaba pensando? ¿Sería verdad? Estaba... ¿estaba sonriendo?