Amigo de que?

Acepto

POV Precia

Mi nombre es Precia Testarossa soy una científica de alto nivel, tengo mi propio imperio como me gusta llamarlo dos hija a las cuales amo con todo mi corazón y un idiota que no me deja en paz desde hace seis meses.

-ya te lo eh dicho no, ese no es mi problema-

-no te atrevas-

-bien hazlo, ya eh tenido suficiente de ti Jail y pagaras caro el querer meter a mis hija en toda tu mierda-termine la llamada para lanzar con furia el teléfono celular al sofá de mi oficina.

Y ustedes se preguntaran qué diablos está ocurriendo así que lo voy a resumir para que me entienda, hace aproximadamente dos años mi vida se podría considerar perfecta tenía un esposo que me amaba según yo y una maravillosa hija, el padre de mi hija es un gran ingeniero para que negarlo pero también es un gran idiota, me fue infiel me imagino yo desde el inicio de nuestra relación, tuvo una hija fuera del matrimonio, me divorcie de él, le quite a las niñas, le deje su empresa y nos fuimos lejos de él y de mi país natal para comenzar de nuevo y todo iba de maravillas hasta que no sé cómo el llamo a mi numero pidiendo ayuda como sabría que lo aria, pues él puede ser un gran ingeniero pero no tiene cabeza para los negocios sin mi ayuda sabía que fracasaría, no quise ayudarle y cuál fue el resultado a pesar de su insistencia y de que yo cambiara de numero celular, amenazarme con lo más preciado para mí, mis hijas y sé que es capaz de todo con tal de salvar su empresa, así que no me puedo arriesgar debo crear un buen plan para salir bien librada de esto sin que afecte a mis tesoros.

-Mis precia hay una detective que quiere verle con urgencia-

-Hazla pasar para ver que quiere y tráenos algo de tomar por favor-

-Con gusta

-Gracias linith- le respondí a mi secretaria quien salió y a los pocos minutos entro una mujer de cabellos celeste porte firme y elegante, mirar verde azulada bastante bella a mi parecer.

-mucho gusto, mi nombre es Lindy Harlaown detective del gobierno global- me dijo mientras me ofrecía la mano para hacer las respectivas presentaciones espera dijo gobierno global.

-un gusto detective mi nombre es Precia Testarossa en que puedo ayudarle- dije con formalismo y señalándole el asiento frente al de mi escritorio.

L-vera hace tres meses una nave alienígena se estrelló cerca del sector uminari, el gobierno japonés lo tomo en custodia apenas se dieron cuenta de su existencia para examinar y tal vez descubrir el lugar al que pertenece, la cosa es que hace un mes esa nave soltó una especie de esporas que cuando son inaladas por el ser humano este muta y se convierte en un peligro pues se alimenta de carne humana, el gobierno me mando a buscarla específicamente a usted para que por favor nos colabore pues ninguno de nuestro agentes en el área de salud puede con este problema-me informo con expectación esperando que mi respuesta sea afirmativa pero...

P-lamento infórmale que no puedo aceptar detective, vera en este mismo momento tengo un gran problema el cual debo solucionar sin fallas-dije serie, ella suspira y yo arqueo una ceja pues ese suspiro es de una persona que se rinde con facilidad.

L- bien cuanto quiere por aceptar el caso-pero que..

P- que insolente-dije con voz calmada mientras tomaba de mi cajón una botella de vino y lo serbia en una copa que lleve a mis labios.

L-ok eso estuvo mal que quiere a cambio de aceptar el caso-oooh

P-nada que el gobierno pueda darme-dije tranquila volviendo a probar del exquisito vino.

L-nada en serio-me dijo con desespero, pasaron minutos de silencio hasta que escucho el timbre de mi celular, me levanto despacio ante la atenta mirada de ella recojo el celular del sofá y contesto sin mirar.

-testarossa-

-te dije que si no me ayudabas te arrepentirías-pero es que nunca se rendirá a menos que.

-QUE DEMONIOS HICISTE-grite llamando la atención de Harlaown, por primera vez grite y es que esto paso más rápido de lo que me imaginaba

-valla es la primera vez que te oigo perder los estribos-rio el muy sínico

-tu pedazo de-dije mientras me sentaba de nuevo detrás del escritorio agarrando la copa de vino, dándole un sorbo y mirando levemente a la persona enfrente mío mientras pensaba en un plan.

-tranquilízate quieres ellas están bien.. por ahora-suspire con un poco de alivio.

-está bien que quieres dinero para salvar tu empresa, lo tienes-ofrecí lo más lógico, mientras la detective me miraba con sorpresa.

-oh no eso es poco sabes muy bien que eso me ayudar esta vez pero no servirá de nada-valla lo noto.

-muy cierto ya que no sirves para las cosas difíciles-sonreí esperando herirle un poco.

-bien dicho por eso quiero que nos casemos de nuevo tienes dos horas para pensarlo o no vuelves a ver a tus hijas-dijo para después terminar la llamada ocasionando que yo me pusiera pálida en dos hora no puedo hacer nada y él lo sabe.

-AAAAAAAAAAHHHHHH-grite lanzando el teléfono contra la pared más cercana, mire a miss Harlaown quien me veía sorprendida carraspee y retome la compostura.

L-se encuentra bien-

P-si disculpe por mi anterior comportamiento como vera no puedo por más que quiera colaborarle a menos que-

L-pídame lo que quiera de verdad necesito que acepte el caso mi hijo fue una de las víctimas y el tiempo no está a mi favor-

p-que arias por tu hijo-

L- lo impensable-

P-está usted casada-

L-eh. Soy viuda-

p-bien aquí está mi oferta aceptare solo si se casa con migo y antes de que me diga loca es para salvar a mis hija vera mi ex esposo y padre biológico de mis hija las tiene secuestradas, las liberara solo si acepto volver a casarme con él para ayudarle a que su empresa florezca lo cual aria sin problemas pero eso afectaría a mis hija ya que al aceptar estaré esta de acuerdo a que el las utilice como moneda de cambie con cualquier idiota hijo de un millonario lo cual me llevara a matarlo y no quiero eso, si usted acepta prometo tratar a su hijo como mío a cambio de que trate a mis hija como suyas tiene diez minutos para aceptar.

L-acepto- sin dudar eh.

hola a todo primero que todo perdón la tardanza espero y hayan disfrutado el fic si les gusto voten o comenten espero y tengan un gran día tarde y noche nos leemos luego.