Hermoso.

11.6K 808 201
                                    

Anthony Stark.

Hermoso.

¿Cómo puedo describir aquella alma que se nota a leguas que necesita cariño, atención, amor y compasión? Simplemente hermoso.

El menor tiene puesta una de mis camisas, un pantalón y unos zapatos. Todo le queda horriblemente grande pero hace ver hermosas las cosas puestas sobre esa blanca piel tan pálida como la nieve que empieza a bajar del cielo.

"¿Papi?" La melodiosa voz de un ángel resuena en la habitación, sonrío.

"Lo siento, vamos Bebé."

Lo tomo de los hombros, le planto un beso en la frente con cariño. Los delicados dedos de Peter toman mi rostro, me da un beso en mis labios, retrocedo un poco de la sorpresa, el chico se pone percibir algo erróneo disculpándose por su acción 'irrelevante.' Tal vez toda su vida fue tratado de forma ruda, cruel y desoladora.

"No te disculpes, bebé. Me gustó." Le devuelvo el beso de la misma forma. "Ahora vamos a comprarte cosas bonitas como mereces."

Los ojos del chico se desorbitan, se sonroja y yo sólo río de la ternura. El chico es un bebé, mi bebé. Bajamos las escaleras, el chico mira todo a su alrededor con gran admiración, es adorable como se emociona por todo.

Vamos al estacionamiento, le abro la puerta del auto a Peter y él feliz entra gustoso mirando el cuero del auto Mercedes. Rodeo el auto, entro por el lado del piloto y Peter ya tiene el cinturón puesto, poco a poco el ambiente se va a un silencio tranquilizador, es de esos silencios que no son incómodos y se vuelven íntimos.

"Peter. Cuéntame de ti."

Siento como Peter se vuelve tenso.

"No me gustaría hablar de ellos, papi."

Frunzo el ceño, ¿Ellos?

"¿Quiénes son ellos, Bebé?"

Una mano la tengo en el volante y otra en la pierna del chico dándole un poco de apoyo moral, debo saber que le pasó para saber que evitar.

"Ellos... Me tocan cuando no quiero, me tratan como si no sintiera, me hacen sentir como una... Chica."

La voz entrecortada del menor hace que mi corazón se estruje a niveles elevados, simplemente ¿Quién dañaría a un ser tan bueno como Peter?

"¿Abusaron de ti, Bebé? ¿No te gusta que te toquen así? Puedo evitarlo."

Mi mandíbula se pone dura, intento controlarme de no investigarlos, matarlos, torturarlos.

"Yo." Miro de reojo su rostro, está a punto de llorar. "No me gusta que me toquen, me hace sentir sucio." Las primeras lágrimas brotan. "Pero... Papi es dulce conmigo y me gusta que Papi me toque."

Esto no debe estarme excitando maldición. Estaciono el auto, me quito el cinturón, lo abrazo como si quisiera recibir todo su dolor para que él no lo pase.

"Bebé, te quiero." Beso su cachete. "¿No te molesta que te toque en verdad? ¿O solo lo dices para que no me enoje? Se honesto, Petit."

El menor se quita el cinturón, rodea mi cuello con sus brazos, se acomoda sobre mi regazo y se esconde en mi cuello.

"Papi, me gusta que me toques. Solo a ti pertenezco, mi collar me lo dice, mi corazón me lo dice, mi cuerpo me lo dice."

Mierda... Mi moral está luchando en éste momento.

Me dirán, ¿Cuál moral? Acabas de comprar a un chico por millones de dólares. He de aclarar que yo compro a los chicos para darles un lugar donde habitar, un hogar, una familia pero Peter es diferente, yo quiero darle su familia, ser parte de su vida, no solo salvarlo también mantenerlo en mi orbita.

"Cariño, ¿Quieres que te toque, Bebé?"

Anthony Edward Stark siendo un jodido cursi con un niño de dieciséis años de edad, no es legal, para nada lo es. Peter se frota sobre mí jadeando asintiendo.

"Si, Papi."

Tocan la ventana de mi auto, volteo y es un oficial de policía. Maldita sea, lo que me falta.

"Bebé compórtate un momento o alejaran a Papi de ti. No quieres eso, ¿Verdad?"

El castaño niega con un puchero cercano al llanto, se sienta adecuadamente, abro la ventana.

"¿Si?"

"Está estacionado en rojo." Suspiro.

"Por supuesto que sí."

Maldito color del demonio. Peter ríe como un niño pequeño y lo miro divertido moviendo la cabeza.

Simplemente hermoso.

✔ Oh, Papi.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora