Las Mellizas Prince [Harry Potter/Draco Malfoy]

12

—Voy a matar a ese maldito.

Blaise y Theo intercambiaron miradas preocupadas mientras sostenían a Vega para evitar que fuera y le arrancara la cabeza a Malfoy.

—¡Vega, detente!

—¡No dejaré que esa escoria siga jugando con los sentimientos de mi hermana, Theo!

—¡Y no decimos que lo hagas! —dijo Blaise sujetándola de los hombros— Pero piensa, ¿qué crees que pensará Lyra de tí si castras a su novio sin motivo?

—¡Pero claro que tengo un motivo! —exclamó la pelirroja indignada— ¡Ese estúpido pretende romperle el corazón a Lyra!

—Pero Lyra no lo sabe —intervino Theo poniéndole seguro a la puerta del aula en la que se hayaban.

—Entonces tengo que decírselo.

—Sería tu palabra contra la de Malfoy —siguió el castaño—, y lo siento, pero según el historial, no tienes ni la menor oportunidad de que Lyra te crea.

Vega bajó la mirada y se dejó caer sobre una de las sillas empolvadas.

—¿Entonces qué? —preguntó poniendo sus brazos sobre la mesa frente a ella— ¿Me quedo callada y dejo que Malfoy la humille y la haga pedazos?

—Pues se lo tendría merecido —murmuró Blaise, ganándose un golpe en el brazo—. ¿Qué? Después de lo perra que se ha portado contigo solo por tenerlo contento, es lo menos que se merece.

—Jamás pensé que diría esto, Zabini, pero creo que concuerdo contigo —murmuró Vega con una triste sonrisa—. Lyra tiene una venda en los ojos, y por más que traté, no me dejó quitársela. Pues ahora tendrá que estrellarse para que se le caiga.

—Bueno, nena, bien dice el dicho: de las pendejadas se aprende —suspiró Blaise sentándose junto a ella.

—Chicos, saben que amo cuando están en modo poeta sobreactuado —dijo Theo rodando los ojos—, pero no creo que sea buena idea dejar a Malfoy seguir con su plan.

—Todos son críticos —murmuró Blaise indignado—. ¿Podrías ampliar tu comentario, Nott?

—Por si no lo recuerdas, el plan de Malfoy incluye hacer que el guardián de Vega firme un contrato de compromiso con Lucius.

—Sí, pero Vega ya nos dijo que su guardián no le haría eso, ¿cierto, Veggs?

Ambos miraron a Vega, quien se había quedado congelada con una expresión de terror en su rostro. De repente, la pelirroja se puso de pie y empezó a caminar por el aula vacía.

—Pero eso fue antes de que me peleara con él —dijo Vega pasando sus manos por su cabello—. Además...

—¿Además?

—Además, mi guardián es padrino de Draco.

—P-pero eso es imposible —dijo Blaise confundido—. Mi madre me dijo que el padrino de Malfoy es...

—Severus Snape, el profesor de Pociones y cabeza de Slytherin.

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Pasaron un par de semanas luego de aquella plática, y ni a Vega, ni a Theo ni a Blaise se les ocurría un modo de evitar que Malfoy siguiera con su plan.

Afortunadamente para Vega, ninguno de los dos había hecho mayor drama al enterarse de que ella y su hermana eran sobrinas de Snape, y que además Lyra era su ahijada.

Pero para su mala suerte, aún tenía varios problemas que resolver, comenzando por cómo le haría entender a Lyra que Malfoy sólo la usaba, y terminando con que el vestido que la madre de Blaise le había enviado para el baile era demasiado revelador.