F I F T E E N

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El castaño se tuvo que retirar ya que su madre le marco dos veces avisándole que tenía que regresar a casa, o sino se las pagaría muy caro.

—Noo ni se te ocurra dejarme con el..!— le susurró juntando sus dos cejas.

— Encerio Jimin tengo que irme, no me dará tiempo de irte a dejar a tu casa — negó con su cabeza — ¡Aprovecha!.

Hizo una cara pervertida.

— El quiere hablar contigo y tu ni siquiera se lo permites.

— El no quiere nada conmigo, tiene novia — mintió.

— No seas mentiroso, esas bromas me salen bien a mi, no a ti, me tengo que ir adiós — palmeo uno de sus brazos para después comenzar a correr y tomar el el taxi que estaba frente a él.

Jungkook se acercó ya que estaba en el otro extremo, a según el dándoles privacidad para que hablaran, fue dura su noche pues esperaba tan siquiera tener una conversación bagante, o que le regalara esa sonrisa que tanto esperaba, pero no, no lo había hecho en toda la noche.

El frío subió de intencidad pues a estas horas ya no era conveniente estar fuera de tu casa, se acercó al rubio para despedirse de el, tenía la mirada perdida al otro lado de la calle, miraba algo fijo que aún el pelinegro no identificaba.

— Tengo que irme, gracias, lo siento por no a verte dado el regalo en las manos tu madre me lo arrebato cuando lo vio — se levantó con sus talones esperando a que hablara.

Se helo por su cercanía a lo que solo asintió abriendo un poco su boca.

— A-hh si — no tomo importancia comenzando a caminar para regresar a su hogar.

Lo miro mientras se alejaba y no pudo evitar sentir algo adentro, no dejaría que se fuera solo y menos a estas horas, corrió para alcanzarlo colocando una de sus manos en el hombro de Jimin.

— Dejame que te lleve a casa —pidió.

— N-no, vendrán a recogerme — mordió su labio.

— No es cierto, ni siquiera traes celular para marcarle a alguien — señaló la bolsa de su pantalón en la cual solo llevaba su cartera. — Déjame que te lleve, va hacer esta vez y ya...

Se mantuvieron la mirada por largos minutos.

Asintió desconfiado subiendo en la parte de copiloto, los gritos internos aparecieron en la cabeza de Jungkook, festejando por qué había aceptado y no lo rechazo como bien sabe hacer. ¿O se equivocaba?.

— Y-y ¿Cómo vas en la escuela?— se le ocurrió preguntar, aparte de que se mantenía la tensión ahí dentro.

— No te importa. — evadió sus palabras.

— ¿Te hiciste difícil no? — sonrio ladino.

— Punto. — rodó los ojos.

—¿Sigues enojado por qué me fui? Trate de explicarte...

— No te quiero escuchar, cállate. — lo miro mal.

— Me vas a escuchar. -—freno el auto de golpe remarcando sus venas en el volante, el cuerpo de Jimin se estremeció y un poco de miedo lo recorrió ya que la mirada de Jungkook era penetrante y fría como la noche que sentían -—me fui por qué mi madre me lo pidió, hace unas semanas regrese.

—Me vale si te fuiste por qué tu madre te lo pidió, eso no soluciona lo que me hiciste sentir. — Dirigió su mirada hacia la ventana.

— Te pedí perdón, lo hize más de mil veces ¿Que quieres que yo haga!? ¿¡Por qué no quieres estár conmigo!?— jalo una de sus manos para que le prestará atención.

— Y-ya no te amo Jungkook.

Mintió, eso era lo que sabía hacer mentirle a las personas, era vulnerable ante el y no se iba a dejar llevar esta vez por su corazón, los dos sabían a la perfección que sentían algo. No importa si se dejaron de ver años pero esa pequeña luz sigue encendida en los corazones de ambos.

— ¿¡Que dijiste!? Habla más fuerte que no te escuché!— oyó muy bien, pero su mente no aceptaba esas palabras y nunca lo haría, hasta recibir un si de parte del otro.

— N-no me gustas.. Y-yo ya tengo a alguien — afirmó mordiendo sus labios para aguantarse las ganas de llorar.

La ceja de Jungkook se alzó al igual que esbozo una sonrisa un tanto siniestra.

— ¿Alguien!? ¿Quien es? ¿El tipo del bar a caso!? ¿¡Que tiene el que no tenga yo!?— amenazó con su barbilla apretando más su agarre.

— M-me arruinaste mi cumpleaños...

— Va!! No me cambies así de rápido el tema! — volvió a tirar de el.

Quería que lo mirará a los ojos pero si el rubio llegaba hacer eso, no iba a poder y caería ante sus brazos una vez mas llorando y pidiendo que no lo volviera a dejar, que permaneciera un lado suyo para entrelazar sus manos y ya nunca más soltarse.

— ¿Que te impide amarme? Mírame cuando te esté hablando..! — no lo hizo y no lo va hacer — ¿Es el!? ¿Por qué cambiaste así Jimin?.

— Por que ya no soy un niño, solo regresaste para acostarte conmigo ¡Por eso lo haces! Solo quieres satisfacerte ¡Ahora sí, como ya tengo dieciocho! — exagero el movimiento de sus manos quitando el agarre que le impedía salir del auto.

— ¿Crees que solo regrese a acostarme contigo!? Sí eso quería lo hubiese hecho contigo aquella vez! Y no no es por que tengas dieciocho.. — bajo su voz pensado si en contarle o no, tal vez se enojaría pero así lograría aclarar unas cosas — para ser verdad, ni me acordaba de la edad que tenías..

Jimin negó con su cabeza, quizo bajar del auto pero los ceguros estaban puestos cosa que se lo impedía, por más que jalo y jalo la puerta esta nunca se abrió.

Se quedaron en un silencio bastante incómodo, las lágrimas salieron de sus ojos por más que se resistió estás no desaparecieron, el dolor cada vez era más fuerte, el ardor llegaba pero después se iba y así estaba, en ocasiones ni se acordaba de el pero de pronto aparecía rompiendo paredes y todo lo que tenía a su paso para poder llegar y lastimarlo.

Solo debía aceptarlo, decir que lo seguía amando, pero lo detenían muchas cosas, no era Namjoon, claro que no, nunca firmó un contrato donde asegurará que era de el. No sabía cuál era la cosa que se lo impedía una y otra vez.

El gimoteo salió, tomando mucho aire con sus pulmones sintiendo que ya no podía respirar pero era a causa del llanto, despegó la mirada de la ventana y se agachó para limpiarse con su misma ropa, dijo que no lloraría y tenía que cumplir con eso.

— Perdóname.

Y no contesto, Jungkook pensó que no lo escucho ya que lo dijo muy bajo, como si fuera una especie de susurró, la calle había quedado desierta hace un par de minutos, pero no sabía que hacer, si arrancar o quedarse ahí estacionados en medio de la nada.

Los ojos de Jimin se cansaron al igual que su cuerpo, llevaba más de media hora llorando maldiciendo en su cabeza con el por qué se había enamorado de esa persona ¿Pero quien no lo haría? Solo un ciego y ni eso por qué si le diera el cuidado y los tratos adecuados tal vez y sentiría algo por esa persona.

Era un amor, un encanto lo es más bien dicho, lo tiene todo o eso cree Jimin por qué la última pieza para su rompecabezas, es el, es lo único que le falta para estar completó y no sentir ese vacío que lo atormenta todas las mañanas antes de salir a trabajar.

Era duro, si lo acepta en el aspecto en como le hablo y tuvo que contenerse para no arrojarse encima de él y pedir más explicaciones, más respuestas para aclarar todas esas preguntas que rondaban por su cabeza, estuvo mal, está conciente de todo eso, su vida se hace chiquita en tan solo recordar aquella vez que lo dejo sentado en el sillón de la sala, escucho sus sollozos por qué se quedo parado en la puerta cuando está se cerró, y no sé digno a regresar, por miedo, por miedo de llegar a lastimarlo, su cuerpo a esa edad era frágil como un  pétalo de rosa, no podía marchitarlo así de rápido, ni hacer lo que el quisiera.

Tenía que esperar y puede esperar el tiempo que sea necesario.

Old Love ➸ KookMin ❪✓❫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora