Retorno Uchiha

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Sangre goteaba, creando un charco oscuro sobre la hierba seca. Tres cuerpos inertes, estaban en el suelo, con sendas heridas por sus cuerpos. Una figura oscura, estaba frente a los cadáveres ANBU, con las máscaras blancas puestas, con el kanji de Raíz en ellas.

Con un movimiento, dejó caer un cuarto cuerpo, junto a los que debían de ser sus compañeros. Gotas rojas caían de su mano derecha. Estaba extendida hacia a bajo, con las puntas de los dedos apuntando con la uña al suelo y estos, ligeramente separados. Ojos rojos como la sangre, se dejaron ver tras unos mechones negros como la noche.

Un ligero viento, movió la capa que cubría al extraño, dejando a la vista​ el símbolo Uchiha que había en la espalda del joven. Movió la mano izquierda, apuntando a los cadáveres que tenía frente a él. Llamas negras, envolvieron los cuerpos, calzinandolos y dejando solo unas cenizas en su lugar. Nada más quedaba.

Giró el rostro, mirando a otro escuadrón que llegó a su posición. Estos eran ANBUS de élite, liderados por el Hokage.

¿?:Uchiha Naruto...

Uchiha termino enfrentando al que parecía el líder. Se deshizo de la capa con un movimiento veloz, dejando a la vista la camiseta de tirantes que cubría su torso, de color negra. En la espalda, relucía el símbolo Uchiha que el viento habia dejado​ a la vista.

Naruto:hmp-resopló, cruzándose de brazos. Había matado a un escuadrón de ANBUS leales a Shimura Danzō, el líder oficial de Raíz. Ahora, tenía frente a su persona, a un escuadrón leal al Yondaime Hokage. Para alguien bueno, las dudas habrían empezado a florecer. No era el caso.

Sin pestañear, desenvainó la chokuto que llevaba atrás, bloqueando a centímetros la hoja del tantō del líder ANBU, una mujer de cabello morado que ondeaba al aire, con cada movimiento que hacía. Uchiha no hizo fuerza. Dejó que​ su rival la aplicará, en un claro intento por partir su arma y cortarlo en dos. Grave error.

Neko, siguiendo el envite, aplicó más y más fuerza con la intención de que el arma del moreno se quebrara. Ambas hoja de besaban, una más larga que la otra. En un segundo, la capitana ANBU perdió pie, cayendo al frente. Su rival, había retirado el arma para dejar seguir el curso del ataque, lo que implicó que el cuerpo se fuera hacia delante. Era tarde para rectificar la dirección.

Posó ambos brazos frente así, como toda protección en el poco tiempo que tenía. Apretó la mandíbula tras la máscara de gato al sentir como su piel ardía. Los brazaletes de la armadura, cayeron al suelo, formando cuatro trozos.

Saltó hacia atrás, jadeando. Con una sola mirada, se fijó en las graves heridas que tenía. Le costaría formar sellos para los jutsus o usar su tantō.

Dos sombras cayeron frente a la capitana. Oso y Comadreja, se posicionaron, optando por poses de batalla clásicas de ANBU, con los tantō desenfundados y las piernas ligeramente separadas, en línea con los hombros.

Naruto se irguio con lentitud, dando más interés a la situación. Cabellos negros caían sobre su rostro, molestando ligeramente a su dueño, que los apartó con el dorso de su mano, colocándolos tras su oreja derecha.

Chasqueo la lengua, molesto.

Naruto:no querría matar a alguien leal a su señor; pero mi deber es destruir la putrida aldea de la hoja.

Neko:Naruto....no podrás tu solo contra una aldea shinobi-refutó, jadeando ligeramente. Gotas caían sobre la hierba verde-. Careces de la voluntad de fuego.

Afiló la mirada, haciendo girar ligeramente su Sharingan de tres tomoes.

Naruto:no hables de lo que no sabes, escoria-gruñó, aferrando los dedos al rededor del mango de su arma-. Si sigues por ese camino, tu sangre bañara está hoja.

El nieto de  LeyendasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora