¿Qᴜɪéɴ ᴇs ᴇsᴇ ᴄʜɪᴄᴏ?

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-Avy , despierta hija. Hemos llegado a Green Gables.

Desperté y lo primero que pude notar fue el hermoso paisaje que había, árboles y flores con colores tan vivos. Era un sueño el por fin estar en un lugar tan hermoso, yo vivía en un pueblo descolorido , las personas eran mayores y no muy agradables. Los pocos niños que habían eran de una clase muy alta, por lo cual iban a escuelas privadas y no creían digno el convivir con personas de clase media, como yo.

[...]

-Ayúdame a bajar las cosas, toma la maleta y tu abrigo, guardalos y luego vuelve aquí.

-Muy bien madre- hice una seña algo graciosa y bajé del carruaje. Salude a Adellan, nuestra yegua, y me dirigí hacia la casa.

Me dirigo a la casa y sin entrar noto la figura de una persona dentro de la casa[..]

-M..mad.. madre..- dije algo extrañada.

-¿Qué pasa, Avy?-dijo mientras se acercó hacia donde estaba parada.

-Hay alguien en la casa..- Me miró con una expresión de no creerme y entró.

-Oh, eres tú,buenos días Gilbert- al decirlo se volvió hacia mí e hizo una seña para que entrara.

Al entrar vi un chico castaño con ojos claros, estaba hablando con un hombre, creería yo que es su padre.

-Hija, él es el Sr. Blythe- El hombre hizo un gesto de saludo algo formal.- Y él su hijo Gilbert- Sonrió amigable y lo imité en el gesto.-Ellos serán nuestros vecinos, estaban aquí porque nos trajeron unas manzanas de su cosecha.

-¿Quieres una? Son muy dulces.- dijo el castaño miestras extendió su brazo para darmela.

-Sí, gracias.. - lo dije algo tímida y me devolvio el agradecimiento con una sonrisa algo tierna.

-Y..¿Cuál es el nombre de la señorita?- Dijo el Sr. Blythe con un gesto gracioso.

Mi madre me miró, esperando que me presentara sola.

-Mi nombre es Avery..- Gilbert me miró.
-Que nombre extraño.. me gusta- dijo el castaño sin dejar de mirarme, lo escuché pero no saqué mí mirada del suelo, estaba algo avergonzada.

(..)

-Bueno señoritas- dijo el Sr. Blythe para romper el silencio- Creo que es hora de retirarnos, a menos que necesiten de nuestra ayuda.

-Solo nos quedan algunas cosas por bajar, pero podremos solas. Muchas gracias.- Mi madre los despidió con un saludo formal y la imité.

-Nos vemos luego, señorita Avery- dijo Gilbert bromeando con un gesto tierno.

-Igualmente Sr. Gilbert- dije divertida, me sonrió y se fué con su padre.

[...]

Luego de bajar las pocas cosas que trajímos me dirigí a mi habitación. Al entrar por primera vez me pareció hermosa, era blanca y tenía una especie de escritorio de madera fina, una cama con un respaldar tallado de una forma exquisita y una ventana que estaba cercana a un cerezo colorido y grande, esta también daba vista hacia una habitación de los vecinos Blythe, parecía la alcoba de Gilbert, pero no le dí importacia.

[..]

-Madre, podría ir a...- sin dejarme terminar la oración la siguió ella.

-Explorar. Sí mi niña, pero abrígate, ya está empezando a hacer frío en esta época.- dijo, señalando mi tapado.

-Gracias Mami.- dije algo íntima con ella.

-Pero vuelve antes de las 5, que a esa hora ya..- la interrumpo para terminar la oración.
-Empieza a anochecer. Lo sé.- Agarre mi abrigo y mi maleta, la cual tenía unas cosas un tanto personales mías.

[..]
Caminé por el bosque hasta poder encontrar el árbol perfecto para poder sentarme en él.
Era un roble, muy alto, se veía algo viejo. Lo nombre Lorel.
Hablé un rato con él, hasta que me decidí por sacar mis cosas de la maleta.
Saque mis lápices, pinturas y crayones. Pero cuando estaba por empezar a dibujar escuché una voz a lo lejos, una masculina.

-Señorita Avery, gusto encontrarla- me volteó al darme cuenta que era la voz de Gilbert.-¿Qué haces?¿Dibujas?.

-E..em, Hola Gilbert- Dije algo nerviosa sin responder su pregunta.

-¿Mañana vas a asistir a la escuela?- dijo cambiando de tema algo rápido y sentándose cerca de mí.

-No lo sé aún, me da algo de.. de miedo.- Podía sentir su mirada en mi fija, pero yo miraba el paisaje.

-¿Miedo?- me miró con el seño fruncido y una sonrisa tierna de
confusión.

-Sí, en mi anterior instituto no tenía amigas, no la pasé muy bien..-dije y esta vez mirandolo algo apenada.

- Bueno, ya tienes uno, ¿no?- me sonrió y me reí un poco avergonzada.

Luego de mirarnos un rato, me dí cuenta de que estaba anocheciendo y nevando, mi madre me iba a retar.
-¿Qué hora es? No puedo volver tarde a casa.-dije y volteo a mirar su reloj.

-Son las 5:40- dijo e hice un gesto de sorpresa y con rapidez junté mis cosas y salí corriendo. Él me siguió.

Al llegar a casa con Gilbert mi madre no estaba, supusimos que se encontraba en casa de él con su padre.

Entramos y escuché la voz de mi madre, que al nosotros llegar paró.

-¿Avery? ¿ Eres tú?-dijo con una voz preocupada y algo enojada.

-Madre..-dije algo angustiada por haberla preocupado.

-¿Dónde estabas? Te he dicho que llegaras a las cinco, ¡son las seis!.

-Es que..- sin dejarme terminar Gilbert interrumpió.

- Lo que pasó fue, Sra Kepner, yo me encontraba en el bosque y ví a Avy- me miró de reojo, me entusiasme un poco porque me llamó así..- y la distraje.Al ver la hora nos dimos cuenta que ya eran las 5:40 entonces vinimos lo más rápido posible, disculpe, fue mi culpa.

-Avery, vámonos. Gracias Gilbert por acompañarla hasta aquí, y a tí, Robert, por invitarme una taza de té.- dijo mi madre como despedida.

-Adiós Señoritas- dijo el padre de Gilbert
-Adiós Avy- dijo Gilbert y me besó una mejilla.
-Adiós- dije algo atontada por el beso.


Bueno, espero que les guste, si es así y quieren que continúe díganme.
XOXO gossip Anne ahre


Gilbert Blythe Y nadie másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora