Honey, come back to me 《Byakuya Kuchiki》

Rukia ¿No te llaman Picasso?

"Le pedí que se quedara pero ella no iba a escuchar. Se fue antes de que tuviera la chance de decírselo. Palabras que van a curarlo, cosas que han roto.
Ahora es muy, muy tarde, ella ya se ha ido" 《Won't go home without you - Maroon 5》

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Desde que había escuchado lo que el segador decía, no dejaba de pensar en eso. Tenía planeado regresar mañana, pero por eso hoy mismo iría.

Cruzó el senkaimon corriendo, llegando en poco tiempo a la sociedad de almas. Tal vez Ichigo se moleste porque había salido sin avisarle, solo había dejado una nota como siempre lo hacía ella.

El primer lugar que visitó fue la oficina de su capitán, el cual no se encontraba en su oficina.

《¿Dónde está?》

Se preguntó corriendo por todos lados, pasando por la escuadra 12 sintió su energía espiritual. Corrió con todas sus fuerzas, abrió lo ojos como platos al ver una cabellera azul seguida de su hermano Byakuya, el capitán Ukitake y el capitán Kyoraku. Lentamente comenzó a caminar hacia ella, no lo podía creer.

Ella estaba aquí, una de las personas a quien más quería, en una que confiaba demasiado. La única persona que la comprendía o trataba de hacerlo, después de Kaien.

***

Se había paralizado. No sabía qué hacer ante su presencia. ¿Cuándo había llegado?

Giró lentamente a ver a la pelinegra, quién se encontraba a unos pasos de ella.

-¿A-Akira? - cuestionó con voz temblorosa.

Akira asintió. Comenzó a avanzar hacia ella, intentó sonreír pero le había sólo le había salido una mueca nostálgica.

Rukia no pudo contenerse, a pesar de que ella le había abandonado, comprendía el porqué se había ido. Durante semanas e incluso por meses anduvo sin dirigirle una palabra a su querido hermano, por lo que le había hecho. La abrazó con fuerza, temiendo a que tal vez volviera a irse.

Minamoto respondió a su abrazo, repitiendo en un susurro, la palabra 《perdóname》. Kurama observaba a curioso a su amiga, jamás la había visto relacionarse con otras personas, sin dudas, comenzaba a impresionarle. Más de lo que ya había hecho en estos tres años.

  Byakuya, quien solo observaba la escena con una mirada fría, por un momento pensó haber estado en los tiempos pasados, donde ambas jamás se separaban, algunas veces hasta llegan a pensar que tienen imanes. Por un lado se aliviaba por que Rukia se sentía feliz al estar cerca de ella, pero por otra, sabía que debía frecuentar más a Akira, siendo la mejor amiga de su pequeña hermana.

  Akira se despidió de los capitanes y se fue con Rukia, dejando abandonado a Kurama, este observaba con una gota en la frente por donde se iban ambas. Kyoraku colocó una mano en su hombro.

-Te invito a beber, y nos cuentas de como conociste a Aki-chan - dice con una sonrisa amigable.

《¿Bebida gratis? ¡Obvio que sí!》

  Pensó Kurama y asintió. Caminaron detrás del capitán Kuchiki, no se sentía bien andar tras él. Kurama se adelantó unos pasos, rozando su hombro con el del noble. Byakuya miró con frialdad a Kurama.

《¿Quién se cree esta basura?》

  Kurama le mandó una sonrisa victoriosa mientras se iba por otro camino con los dos capitanes.

《Estúpido ignorante》

***

  Ambas chicas nobles conversaban tranquilamente bajo la sombra de un árbol, algo típico de ambas. Rukia no evitaba derramar algunas lágrimas de felicidad al ver que Akira ya estaba de vuelta. Akira, se ponía a contarle todo a lo que había pasado en el mundo de los vivos durante estos tres años.

-¿Vivías con Kurama? - cuestionó la pelinegra impresionada.

-Sí, sé que da para malpensar, más de una persona había dicho que éramos pareja - admitió rascándose nerviosamente  la nuca - ni siquiera puedo imaginarme eso, me da escalofríos. Es como un hermano para mí.

Rukia sonrió.

-¿Él que piensa? - volvió a cuestionar.

Akira la miró confusa.

-¿Que piensa de qué? -

-Nada, nada - Rukia agitó las manos echándole importancia.

-Basta de mí, hablemos de ti ¿Que piensas de mí? - Amaba se echaron a reír - ¿Que pasó de ti?

-Perdí temporalmente mis poderes y casi fui ejecutada - decía normalmente a lo que Akira abrió los ojos como plato - Unos amigos del mundo de los vivos me salvaron.

  Akira pidió que le explicase mejor, detalladamente a lo que Rukia cedió. Con cada palabra que decía Rukia, Akira odiaba más a Byakuya ¿Cómo un ser podía ser tan despreciable? Claro, dejó de pensar eso al escuchar las últimas palabras que decía Rukia.

-Me salvó de un ataque de Ichimaru, lo hirieron gravemente. Me contó sobre quién realmente es Hisana y me pidió perdón - dijo bajando la mirada.
 
  Akira estaba algo sorprendida con todo lo que ella decía. No podía imaginarse a ese cubo de hielo pidiendo perdón

-Oe - dijo llamando la atención de la pelinegra. Esta la observó - ¿Ichigo es algo tuyo?

  Inmediatamente la noble Kuchiki se había sonrojado.

-¿Que dices? ¡Es mi amigo! - respondió rápidamente.

-Aja, claro y tu hermano es mi mejor amigo - decía Minamoto con ironía.

-Estamos saliendo o algo así - susurró Rukia  de manera inaudible, jugando con sus dedos.

-¿Disculpa? No te escucho, habla más fuerte - canturreó Akira viendo a la noble Kuchiki sonrojarse brutalmente.

-Que.... Supongo... que estamos... saliendo - volvió a decir.

-¿Alguien más lo sabe? -cuestionó la noble Minamoto.

  Rukia negó lentamente.

-Sólo tú y los amigos de Ichigo - contestó.

  Akira asintió, no necesitaba que Rukia le pidiera que no dijera nada, era obvio que era un secreto.

-¿Cómo pasó? - Interrogó Akira mirando con la ceja alzada.

  Akira se sorprendió al ver a Rukia sacar del interior de su shihakusho un cuaderno y unos lápices.

-¿Cómo entra eso ahí? - Rukia la miró.

-De la misma manera en la que tu solías meter una tonelada de dulces - contestó mientras dibujaba.

  Pasaron unos minutos hasta que Rukia había terminado con sus dibujos, dio vuelta al cuaderno, de modo que Akira pudiese ver.

-Sigues con tus dibujos raros - dice con una gota en la frente.

-¡No son raros! ¡Son conejos! - exclamó. -Bien, la historia comienza así.

Minamoto observaba y escuchaba atentamente a Rukia, intentando descifrar los dibujos. La historia de Rukia le había parecido muy chistosa, en como comenzó a salir con Ichigo.

  Al terminar, Rukia dibuja un conejo arrastrando hacia unos conejos huecos a otro conejo con el pelo naranja.

-Actualmente estamos así - dice refiriéndose al dibujo.

-¡Rukia! ¿No te habían llamado Picasso? - Rukia miró confusa a Akira - tú solo finge que me entiendes.

-¡Claro que sí! ¿Quién es Picasso ante mí? - ambas rieron.

  Rukia miró sonriente a Akira, le molestaría mucho que su hermano volviese a ser el mismo idiota de hace unos años. Aunque claramente presentía que habría mucho dolor de cabeza, demasiado.

  《Al menos has vuelto》