That's me, i'm a Fanboy ; johnten

Capitulo 1

— ¡Waaaah! ¡Podrías ser un idol! —Exclamo fuertemente una chica a su lado dirigiéndose a él.

—Si... Tienes razón... —Le respondió con un tono cortante, una sonrisa demasiado fingida y volteando su cabeza al lado contrario.

Obviamente quería evitarla.

Desde que llego al aeropuerto esa chica no paraba de molestarlo y preguntarle cosas muy fuera de lugar, aunque no quiso ser desubicado varias veces le insinuó que no quería tenerla cerca pero ella se ponía el doble de cargosa.

No la aguantaba y la tenía como un chicle pegado a su espalda.

Dentro de aquel inmenso lugar, él estaba parado junto a la cinta de seguridad que los dividía del pasillo por el cual pasaría su grupo favorito, recién llegados de corea.

Casi cuatrocientas chicas lo aplastaban a el sobre la cinta cuando llevaban esperando ya una hora desde que se anunció el aterrizaje del vuelo.

Le temblaban las manos, Sus pies dolían muchísimo por el tiempo que había estado parado pero no eran más que los nervios que sentía. Ni siquiera todas las horas que llevaba ahí había podido comer algo debido a la mezcla de emoción y nerviosismo que sentía.
se le cerraba el estómago.

Vio como muchas chicas comenzaban a alterarse, a encimarse sobre la cinta y su pulso subió a mil.

Y ahí estaban ellos, caminando hacia la entrada del aeropuerto, siendo hermosos como siempre a pesar el exhausto viaje y rodeados por los hombres de seguridad.

Saco su celular y comenzó a grabar todo.

Lo primero que noto fue el hermoso tono rosa del cabello de Taeyong, caminando en el frente, mientras cubría parte de su rostro con un barbijo seguido por el resto de los integrantes. Y caminando al final de ellos, la única razón por la que había esperado doce horas dentro de ese lugar de tránsito, Johnny.

Como el resto, llevaba puesto un barbijo pero que ni de lejos opacaba la belleza de su rostro. Ni todas las cinco mil imágenes que tenía guardadas en su celular le hacían justicia a lo hermoso que era verlo en persona.

El a diferencia de todas las otras chicas, en apariencia estaba más relajado, pero dentro de si mismo estaba ocurriendo una revolución de sentimientos.

Solo pudo apreciar sus ojos cansados y admirar esas hermosas piernas por unos minutos porque un codo accidentalmente voló hacia su ojo, seguido por empujones y finalizando con el tirado en el piso, muy lejos de la multitud de chicas que perseguían al grupo de idols.

Estaba muy enojado con esas estúpidas que perdían la conciencia al ver a quien admiraban y consecutivamente le hicieron perderse la oportunidad de apreciar a quien adoraba un poco más de tiempo.
Pero eso no era el final.

Con un ojo morado y la dignidad intacta, se paró de su lugar y se acercó a la entrada del aeroparque.
Muy lejos del grupo de chicas jóvenes, estiro su mano y llamo a un taxi. Para posteriormente subirse a él.

—Siga a ese auto. —Pronuncio determinadamente al señor de sesenta años que manejaba el taxi.

—No estamos en una película de acción joven

—¿Y por 50 dólares más?

—¿Se refiere a la camioneta negra con vidrios polarizados?

Definitivamente esto no se terminaba ahí.

...

Perdónenme, sé que los aeropuertos de otros países son muy calmados. Pero soy Argentina y acá siempre todo es un re quilombo.