Enamórate sólo de mi. [YAOI BNHA]

Moriremos calcinados

[10:30 p.m.]

Después de aquella bochornosa escena, Todoroki tenía claro que quería morirse en esos momentos, aun sentía sus mejillas calientes y el silencio que preservaba en la sala solo hacia que todo empeorase. Tomo la botella y la giro con toda la fuerza que sus nervios le permitían, la atención de todos esta vez fue a parar al objeto que giraba cada vez mas lento, deteniéndose finalmente Monoma, quien por alguna razón lo miro con odio,  ignoro eso y decidió terminar con eso de una vez.

—¿Verdad o Reto?—

—Reto.–

¿Qué clase de reto le daría? Algo dentro de él le decía que evitara a toda costa que preguntara acerca de la persona que le gusta a ese chico, pero, ¿por qué? Miro a su primo, y este le negó con la cabeza mientras bebía un poco del ponche alcoholizado, tal vez le haría caso a sus instintos por esa noche.

—Te reto a que beses a Reiji.–

¿Quién dijo que no podía aprovechar y vengarse de su hermano? Observando con una sonrisa como su primo se ahogaba con la bebida y Monoma simplemente suspiraba resignado. ¿A quien engañaba? El chico de la clase B tenía tambien tentación por besar a ese mercenario que ahora parecía querer huir de ahí.

El de quirk copiador se levantó de su lugar y avanzo hasta donde el pelirrojo, quien por simple orgullo se quedo impasible en su lugar, esperando lo inevitable.

Una vez ambos estuvieron de frente, Monoma suspiro una vez mas, y, colocando sus manos en los hombros del heterocromatico, lo beso, de manera torpe y nerviosa pero lo hizo, ya el otro le correspondió solo para tomar el control y hacer el beso mas demandante, sorprendiendo al rubio quien abrió un poco su boca por la sorpresa, dejando pase libre a la lengua del pelirrojo que recorría toda la cavidad bucal del menor con violencia, separándose segundos después dejando al rubio con la respiración agitada y un fuerte sonrojo en sus mejillas, el mayor sonrió con malicia al ver eso, acomodándose de nuevo en su lugar mientras Monoma regresaba al suyo propio.

Una vez terminado el espectáculo, discretamente las miradas fueron hacia el peli-morado, que desde que se dijo el reto mantuvo la cabeza abajo intentando evitar a toda costa observar la escena.

Monoma tratando de evitar otro silencio innecesario, giro la botella y todos esperaron pacientes a que está se detuviera para poder tener una próxima víctima.

Sorpresa, esta vez se detuvo en Uraraka quien se colocó nerviosa.

—¿Verdad o Reto?–

La castaña pensó un momento en que sería lo mejor para ella.

—Verdad.–

¿Porqué no aprovecharse de la aparente inocencia de la chica?

—¿Te has masturbado alguna vez?–

Ante tan descarada pregunta, todas las chicas ahí presentes chillaron indignadas, Kendo le dio un fuerte golpe en la cabeza a su amigo y los hombres ahí se habían quedado mudos ante la pregunta. Menos Reiji, ver el alma de las personas tenía su ventaja, y él solo se lamentaba por la pobre chica que parecía querer morirse en ese momento.

Pasaron unos sofocantes minutos para todos, y finalmente Uraraka asintió totalmente roja, deseando que la tierra se la tragase. La chica tomo la botella y la giro, pudiendo respirar con normalidad al ver que todas las miradas que recibía fueran retiradas de su persona.

La botella se detuvo en Kendo.

—¿V-Verdad o Reto?–

Hablo nerviosa la castaña, mientras la otra pensaba bien en que elegir.