Éste capítulo es un recuerdo.
Las calles burbujeaban con la gran multitud de personas que a última hora buscaban sus regalos para el día de San Valentín. Estaban a sólo tres días de la celebración, y aunque la mayoría buscaban el regalo perfecto para su otra mitad, o chocolates y rosas para dar a sus amigos, Byun Baekhyun no caminaba de mal humor por las atestadas y ruidosas calles llenas de gente para comprar regalos de último minuto. No, sus razones eran muy diferentes a las de todas aquellas personas estresadas por tontos regalos. Él estaba buscando escapar de la mierda de su vida por un rato, y estaba por llegar a lugar perfecto para hacerlo. Algún bar o club no tan ruidoso, con un taburete solitario y suficiente alcohol para ahogarlo.
Estaba huyendo. Cinco minutos con Luhan hablando de cosas sin sentido y casi explota, necesitaba respirar aire limpio de tensión e incomodidad, porque ese día había estado muy lleno de eso. Entendía la preocupación de sus amigos, de sus hermanos, pero no quería hablar. Quería silencio, un trago y tiempo de soledad, lo que estaba por conseguir a sólo unos pasos de distancia.
Estaba tan harto de que, cuando él se encontraba en el mismo espacio que los demás, de repente todo era incómodo y la conversación se apagaba. Sus hermanos le trataran como si estuviese hecho de porcelana, siempre andando de puntitas a su alrededor, con miedo a que se rompa en mil pedazos por la más mínima molestia, y eso le enfureció a niveles que ni él comprendía. Por eso los ignoraba. Cuando entraban a su cuarto para recoger un poco o ver cómo estaba, simplemente no hablaba, no se movía, no hacía nada, hasta que ellos se marchaban o hasta que huía hacia el baño para una larga ducha en espera de que captaran el mensaje y le dejaran en paz. Esa era su rutina, su día a día.
Primero, se perdía en un club, bar, o lo que fuese siempre y cuando vendieran alcohol. Se embriagaba hasta perder la consciencia y de alguna manera terminaba despertando en su cama con una jaqueca, desnudo, con claros rastros en las mantas y entre sus piernas de que alguien más pasó la noche en su cama. Limpiaba toda evidencia de lo que ocurrió, se limpiaba, se ponía el pijama y cuando alguien llegaba sólo se concentraba en tratar de recordar detalles de la noche anterior.
Entonces allí estaba, sentado en la barra con un Whiskey en la mano y un vaso con ron frente a él esperando pacientemente su turno de ser ingerido. Levantó su mano para llevar el vaso y su contenido hacia su boca, pero antes de que el frío cristal tan siquiera rozara su labio inferior, una mano detuvo el trayecto con poca delicadeza. Algo confundido por la interrupción, giró la cabeza para ver quién era el atrevido. Para su grata sorpresa, era una atrevida, una con un rostro angelical. Sus grandes ojos eran de un profundo chocolate, sus mejillas y labios estaban teñidos de un rosado ligero, como si hubiese estado ingiriendo mucho alcohol, pero ella se veía perfectamente bien. Su cabello era largo, lizo y muy oscuro, llegaba justo debajo de la cadera, y de alguna manera resaltaba las muchas curvas generosas de su cuerpo. No era una mujer delgada, era baja en estatura y tenía un rostro algo aniñado, pero él podía afirmar con seguridad que esa mujer era la más hermosa que había visto en su muy miserable, aburrida, casi detestable vida. Estaba perdido en su cuerpo cuando ella le tomó por sorpresa de nuevo, atrevidamente tomando el vaso de su mano y dejándolo en la barra, para luego regalarle una bonita sonrisa.
— Mi nombre es Yeosin, y te llevaré a casa.
La confianza en su voz le causó algo de gracia y ternura a Baekhyun. Ella era pequeña, pero tenía actitud, y le parecía algo chistoso.
— ¿Ajá? ¿Puedo saber por qué?
— Porque estás muy borracho. Y aquél sujeto de allá te lleva mirando desde hace rato, de una manera violadora. Así que, te llevaré a casa, para que no te violen.
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Hell | ChanBaek
Fanfiction| Segunda Temporada de Heaven. | Baekhyun decidió que el infierno no es tan malo, después de todo. No cuando se convierte en tu refugio y salvación.