Capítulo 15

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NATASHA ROMANOFF
Me pongo el nuevo vestido negro que enseña mi barriguita y luego los zapatos, que son unas Converse negras normales y corrientes. No es una cena formal ni mucho menos pero tampoco es plan de ir con la enorme camiseta de Steve y los vaqueros...

Voy hacia el lavabo encontrándome con mi sexy novio frente al espejo.

-Te ves preciosa con ese vestido.-me dice él creando que una sonrisa aparezca en mis labios.

-Gracias, pero es el vestido que has escogido tú, sino te gusta tenemos un problema...-respondo creando que ambos soltemos una carcajada.

-Ya sabía que te iba a quedar bien...-dice él con ego.

-Cariño, sabes que me encanta verte sin camiseta ni pantalones pero... ¿Cuándo empezarás a vestirte? Quedan 10 minutos y tendremos que estar arriba.-digo acariciando su pecho desnudo y tan musculoso desde detrás de él.

-Entonces, ¿te gusta verme así?-pregunta un poco sonrojado y tímido bajando la cabeza.

-Claro que me gusta, eres sexy...-digo creando que nada más salga de mi boca la palabra "sexy" me pongo nerviosa.

Jamás le había dicho eso a Steve, quien levanta la cabeza con rapidez mirándome sorprendido pero con una sonrisa en sus labios. Ahora soy yo quien agacha la cabeza nerviosa. Mis hormonas hacen efecto con rapidez; entre el embarazo y tener a Steve solo en bóxers delante de mí, no ayuda a que mis mejillas bajen del tono rojo tomate.

-Tú sí que eres realmente sexy...-susurra Steve en mi oído mientras va acariciando mi espalda lentamente.
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Llegamos a casa de Stark a la hora en la que habíamos quedado. Al llegar, como siempre, ya están todos ahí, incluidos Sam y Rhodey.

Steve lleva el papeleo del embarazo y yo meto rápidamente la ecografía en la cartilla del embarazo para enseñársela luego a ellos 2.

Al vernos, nos saludan todos y puedo notar que los 2 invitados de la sorpresa se quedan mirando mi barriguita por unos segundos pero pasan del tema y no abren la boca.

Pasamos a la cena, que como siempre que está Stark, es de lujo. Cenamos todos los vengadores y ellos 2 en una mesa enorme y hablamos de tonterías que acaban creando las risas de todos. Mi carne está muy hecha comparada con la de los demás, cosa que hace que Sam y Rhodey me miren un poco confusos.

Entonces Rhodey empieza a poner vino en las copas y cuando me va a poner a mi niego con la cabeza y tapo la copa con mi mano.

-¿Natasha Romanoff se niega a beber vino?-pregunta sorprendido.-Creía que los rusos erais los que más alcohol bebíais...-añade creando que niegue con una sonrisa.

-Bueno, es lo que tiene estar embarazada, no se puede beber alcohol...-digo encogiéndome de hombros con una gran sonrisa.

Sam y Rhodey abren sus bocas sorprendidos y me miran sin entender.

-Pe-pero... Yo creía que tú no...-empieza Sam sin entender.

-Bueno, Stark hizo que fuera posible...-empiezo pero me interrumpen.

-¡¿STARK ES EL PADRE?!-pregunta Rhodey con los ojos abiertos como platos.

-¡NO! ¡EL PADRE SOY YO!-grita alterado Steve.

-Es lo que intentaba explicaros, Stark desactivó el dispositivo y luego Steve y yo... Bueno, ya se sabe que pasó y pues... ¡Vamos a ser padres!-digo feliz. Steve acaricia mi barriguita con una sonrisa.

-Así que la agente buenorra Romanoff, ¿eh?-dice Sam sorprendido cruzándose de brazos con una sonrisa mirando a Steve.-¡Felicidades!-añade acercándose a mí feliz y abrazándome.

-¡Lo mismo digo!-dice Rhodey abrazándome también.

-¡Podríais haberlo dicho antes!-se queja Sam acariciando mi barriguita.-¡Al menos lo de que estáis juntos!-añade mirando a Steve.

-¿Agente buenorra Romanoff?-pregunto confusa.

-Sí, es así como te llamamos Steve y yo.-responde Sam susurrándome creando mis risas.

-¿Y de cuánto estás?-pregunta Rhodey.

-De 10 semanas, bueno, 2 meses.-respondo sonriente.-Una cosa más, esto no puede salir de aquí...-digo nerviosa.-Si la prensa se entera de que va a haber un bebé en unos meses lo difundirán, vendrán mis padres y seguramente me maten de un solo disparo.-explico creando que abran los ojos como platos.

-Creía que tus padres habían muerto cuando eras pequeña...-dice Sam confuso.

-Yo también lo creía, hasta que Fury los encontró vivos y con ganas de matarme al saber que aún seguía viva.-respondo con normalidad.

-¿Y estás bien?-pregunta Rhodey preocupado.

-Sí, l fin y al cabo ellos me mandaron a un internado en el que no fueron precisamente los mejores años e mi vida así que, que quieran matarme, no me sorprende.-respondo con indiferencia.

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-¡¿En serio?! ¡Cuarenta hojas de cosas que no puedo comer y solo 5 de cosas que sí puedo!-me quejo mirando el montón de hojas enorme de las cosas que no puedo comer y el pequeño montoncito (si es que se le puede llamar así) de cosas que no puedo.

-Bueno, piensa que solo te quedan 7 meses comiendo esto...-dice Wanda encogiéndose de hombros.

-¡¿Es que te parece poco?!-pregunto sorprendida.

Definitivamente, estar embarazada es muy duro...

El error perfecto (Romanogers) #TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora