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Capítulo IV

Peter salió disparado a las alturas de los edificios de Queens, no eran muy grandes, pero podías colocarte en lo alto para ver a los demás. Se pegó a la pared con una telaraña que colgaba de edifico a edificio y comenzó a observar el cielo, azul obscuro con millones de estrellas, y sabía que en una de ellas está el tío Ben cuidándolo de cualquier peligro.

Por un momento su sentido arácnido se activó, algo venía pero no sabía por donde.

Su telaraña se había roto, no porque la red no pegara bien en la pared del edifico contrario, si no porque algo la había roto.

— ¡Deadpool! —gritó alguien a la lejanía.

Y Peter iba en caída libre, buscando con su tecnología introducida por Stark de donde había provenido eso, y ahí estaba, un tipo con una gabardina larga negra y muy oscura, en el centro un logotipo en color rojo y un cinturón del mismo color, soltó su telaraña para irse aún poste de luz.

— Disculpe señor, está invadiendo mi ciudad, le pido por favo-

Agarró una tapa de la alcantarilla y se la lanzó a Peter.

— No sabías que es de mala educación interrumpir la gente con una tapa de alcantarilla —lanzó una telaraña directo a la tapa y se la regresó a toda la cara del villano.

— No te metas chico araña —grita un tipo desde la oscuridad.

El anterior mencionado se encontraba en un traje rojo con negro, sus ojos eran blancos; traía dos katanas en la espalda, y dos pistolas portadas, las dos en la cadera; su cinturón que sostenía las pistolas anteriormente mencionadas traía un símbolo extraño, al parecer era la máscara que este portaba.

— Oh, vaya los raritos con trajes negros y rojos se unen en la noche. ¿Por qué no me habían invitado? —dijo Peter cruzándose de brazos aún en el poste de luz.

— ¡Deadpool, cuanto tiempo! —gritó el tipo de negro con una marca en el centro.

— Oh, mi viejo amigo Thomas Cassidy, ah cierto, perdón, Black Thomas Cassidy —sonrió detrás de la máscara.

Sacó sus katanas de la espalda en donde traía una funda café, y salió corriendo hacia Cassidy a máxima velocidad, dió un giro en el aire y cayó detrás de él, clavándole las dos katanas en la espalda, lo elevó en el aire y lo restregó contra el piso rompiéndole la columna y los dos brazos. Segundos después agarró sus dos pistolas y le dio en la cabeza*

Después de dispararle, olió profundamente el humo que sus pistolas desprendían.

— Wow, señor en traje rojo con negro, estoy sorprendido —dijo Peter aún desde las alturas.

Deadpool se acercó a él debajo del poste y le hizo una seña con el dedo que bajara de ese poste.

Peter se dio la vuelta y bajó cabeza abajo, parecía una escena romántica, excepto que no se conocen.

— Largo de mi vista, araña —lo estiró y este salió disparado hacia las alturas.

— ¡Espere! —su grito se fue difuminando con la altura que iba tomando.

Se agarró del primer peldaño de una casa y persiguió al hombre de rojo por casi toda la ciudad, iba de casa en casa y Deadpool corriendo por lo bajo, hasta llegar a una casa.

Peter se quedó observándolo, subió por la ventana de una casa de poco sueldo, una casa que apenas se sostenía. Cerró la ventana y una cortina.

— Karen, ¿crees que deba indagar más o espero a otra noche?

— Peter, espera a que pase otra noche y las respuestas a tus preguntas saldrán por si solas.

— Te haré caso, gracias Karen —el chico se alejó del lugar y lanzó una telaraña a otro lugar. Regresándose a su casa ya tenía suficiente por esa noche.