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Capítulo X

Y ahí estaba, Peter confundido, encontró a su pareja siendo un mercenario ¿Cómo nunca se dio cuenta? Todo marcaba perfectamente, su cuerpo, sus músculos, su estatura, incluso la forma en al que besa, el sarcasmo que usa con todos. Pero, ¿Por qué hacer este trabajo tan malo? ¿Desde cuando lo hacía?

— ¿Cómo sabes mi nombre? —pregunta Wade sin su máscara tratando de agarrar a Peter y golpearlo.

— Para, Wade —esquivó los golpes—. Soy yo Peter

Se quitó la máscara roja de Spider-man y se mostró ante Wade. Wade colocó sus manos en sus pómulos y abrió demasiado la boca, ¿como era esto posible? También era una gran sorpresa para Wade, él si que estaba en shock.

— Okey, perdón por todos los golpes que te di —se disculpó Wade abrazándolo.

— Yo también me disculpo, no sabía y no tenía idea que ibas a ser tú —también por parte de Peter, pidió disculpas.

— Pero, hay una parte buena en esto, Parker —se colocó la máscara—. Podemos combatir a los malos juntos.

Se colocaron la máscara los dos, le lanzó una telaraña a la espalda de Wade y lo subió al aire con toda su fuerza en esos brazos pequeños de spaghetti. Y Peter lo siguió por los aires, se escuchó un estruendo muy fuerte a la lejanía de la ciudad, y algo había explotado.

Wade iba arriba de Peter agarrado como si su vida dependiese de ello y Peter solo trato de disparar sus telarañas lo más alto posible para lo que sea que esté atrancando la ciudad no se dieran de cuenta que estaban ahí. Se colocaron en lo más alto del edificio en donde a una cuadra estaba atacando un tipo casi volador con cuatro brazos de metal tipo robot, una bata verde oscura semi-rota y el cabello le colgaba por toda la cara, y traía unos lentes oscuros que no dejaban ver sus ojos.

— ¡Hey, cuatro patas! —gritó Peter desde la lejanía del edificio. El extraño ser con brazos mecánicas volteó.

Peter le lanzó una telaraña al brazo que estaba apunto de destruir un taxi amarillo típico de las calles de Nueva York. Peter saltó del edificio a enfrentar al tipo de cuatro brazos.

— Spidey, yo no tengo una red que se pega a las paredes por si no recuerdas —dijo Wade mirando lo alto que estaba ese edificio.

Peter recordó a Wade y le lanzó una telaraña justo en el pecho. Y lo uso como bola demoledora contra el cuadrúpedo.

— Lo siento rojito —sonrió detrás de la máscara y agarró a Wade en el aire colocándose en el suelo con él.

— Dinos, cuadrúpedo, ¿Cual es tu nombre de súper villano? —dijo en tono burlón en las últimas palabras.

— Yo —lanzó un brazo a Wade y este lo evitó— soy —le lanzó otro brazo a Peter y este lo evitó—. ¡Doctor octopus! —gritó en las últimas palabras y le lanzó una bomba a los dos al mismo tiempo.

— Sabias que para ser un pulpo, traducido al español —agarró la bomba con la telaraña y se la devolvió—. Debes de tener ocho tentáculos, ¿Cierto?

— Spidey, vas a hacer enojar al doctor cuadrúpedo —los dos se comenzaron a reír por el tonto chiste de Wade.

— Tengo cuatro adheridas y las otras cuatro por naturaleza, idiotas —dijo el villano enojado.

Un brazo salió disparado hacia Wade tomándolo del cuello y de las piernas. Estaba atrapado. Al otro brazo le comenzó a salir una filosa cuchilla hacia la cara de Wade.

— Hey, cuadrúpedo —Peter le lanzó un carro directo a la cara. Este la esquivó con el otro brazo que le quedaba—. Deja al rojito.

— Spidey, deberías llamar a los demás —hizo una acentuación en "los demás".

— ¿Estas seguro? —la cuchilla estaba más cerca todavía.

— Más seguro que la vez que me comí una chimichanga con siete salsas distintas —ni a punto de morir deja de hacer chistes. Peter le lanzó una telaraña a la cara del tipo para detenerlo mientras tanto.

— ¡Vengadores unidos! —gritó por comunicador de los vengadores.

— Niño, son las tres de la mañana ¿Que haces despierto? —preguntó Tony semi-dormido apareciendo en la pantalla interna de la máscara del chico. Se escuchaban ruidos atrás.

— ¿Steve está durmiendo contigo? —Tony abrió los ojos gigantescos y pateó algo que se cayó al suelo—. Bueno, necesito que vengan ayudarme, estoy en graves problemas —puso su cámara viendo hacia afuera y no hacia su cara. Ahí estaba un Deadpool sufriendo.

— Vamos para allá.

Tony llamó a su asistente JARVIS y su traje apareció por arte de magia, un traje de color rojo y gris por debajo del pecho haciendo una "V" entre los colores. Steve tomó su traje que usó hace un año, año y medio; y su escudo. Steve corrió hacia el helicóptero más cercano, pero Tony lo detuvo.

— ¿Crees que vas a llegar en un helicóptero? —dijo Tony volando sobre él—. Toma mi mano, soy más rápido.

Steve le hizo caso al millonario y lo tomó de la mano para irse directo a la escena que estaba apunto de ser un crimen.

Mientras tanto Peter se colocó arriba del doctor y le trató de arrancar un brazo.

— Es imposible, están muy bien adheridos —dijo Peter haciendo lo posible—. Wade, necesito tus katanas.

— Tómalas, estoy un poco ocupado aquí —dijo Wade evitando el pico que atravesaba las paredes mientras se movía para que no le atravesara la cara a él.

Peter lanzó una telaraña directo a las katanas de Wade, e hizo un corte limpio al brazo robótico del Doctor Octopus.

— ¡Ah! —gritó del dolor dejando caer a Wade y a su brazo que fue recién cortado hace tres segundos.

Wade empezó a toser y Peter lo subió a otro edificio.

— Llegó la caballería —dijo Tony lanzándole un rayo proveniente de su mano. El cual soltó a Steve directo a la espalda del doctor Octopus —. JARVIS, registro de datos del tipo tétrico que atacó a la araña.

— Sí, señor —la inteligencia artificial en el traje de Tony. Comenzó a buscar toda clase de información sobre el doctor, si es que era doctor.

Los datos comenzaron a aparecer en su pantalla del casco. Mucha información clasificada de S.H.I.E.L.D. que rápidamente JARVIS hackeo.

— Oye, Peter ¿Que hace ese tipo de rojo contigo? —preguntó Steve lanzándole el escudo a la cara del doctor octopus. Este la detuvo en el aire y se lo lanzó de nuevo a la cara de Steve.

— Es un amigo con el que combato al crimen —dijo Peter desde el techo del edificio donde estaba con Wade. Tony le lanzó varios disparos en zonas frágiles para el cuadrúpedo.

— ¡Volveré por ustedes, y los lastimaré por donde más les duele! —dijo el doctor octopus lanzando varias bombas de humo al suelo y haciendo un escape como los villanos de las películas.

— Vaya que tipo más loco, ahora niño, dinos quien es tu amigo en pijama roja con unas katanas muy filosas —dijo Tony aterrizando en el techo del edificio con Steve tomado de la mano.

— Si te digo, por favor, no te enojes —dijo Peter poniéndose adelante de Wade quitándose la máscara.

Tony asintió y Wade se quitó la máscara roja con negro para mostrar su cara.

— ¿Wade? —dijeron Steve y Tony con caras de confusión.