Capítulo 26

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Abrí los ojos, me había quedado dormida en los brazos de Mau, esto era un tanto extraño pero reconfortante. Levanté la cabeza y efectivamente Mau dormía, busqué mi celular, Mierda, eran las cinco y tenia cuatro llamadas de Cameron y seis de... Mario ,¿Qué carajos quiere? ¿Y se aburrió con Rebecca? Esa maldita imagen de ellos en el gimnasio me está atormentado

Me decido a devolverle la llamada a Cam, respondió al segundo timbre.

-- ¿Hey, estás bien?

-- Si, si... estoy bien.

-- ¿Dónde estás? ¿Por qué ni respondias mis llamadas?

-- Mmm... estoy despejando mi mente. Miré a mi al rededor.

-- ¿Despejando que? ¿En dónde carajos estás? Se escuchaba exaltado.

-- Exactamente, no lo sé.

-- ¿Cómo no sabes? ¿Estás sola?
Sin duda estaba exaltado.

-- No, no... estoy bien, en un rato llego a casa.

Colgué, en verdad me estaba desesperando con tantas preguntas.

-- ¿Cameron? -escuché la voz de Mau a mis espaldas.

-- Si -me giré, estaba sentado con el pelo alborotado.

-- Te llevaré,  bajemos de aquí -se puso de pie, guardó todo y nos colocamos el equipo para bajar.

-- Creerás que tengo seis llamadas perdidas de Mario - Mau me miró bruscamente.

-- Es un imbécil -comenzó a bajar.

-- Si, lo es -sólo recordar lo ocurrido me provocaba un nudo en la garganta.

Bajar era mucho más fácil.

[...]

-- Fue genial, gracias -dije mientras estacionaba el auto frente a mi casa.

-- Es un honor llevarte a mi lugar favorito -sonrió.

-- Me divertí muchísimo -sonreí.

-- Cuando quieras -bajó del auto para abrirme la puerta.

-- ¿Podrías pasar por mi mañana? -bajé del auto.

-- Claro.

-- Gracias -le dí un beso en la mejilla.

Entre en la casa, estaba todo oscuro, parecía que no había nadie. Subí a mi habitación y me recosté, unas cuantas lágrimas brotaron de mis ojos hasta que me quedé perdidamente dormida.

De pronto mi celular comenzó a sonar, miré la pantalla y el nombre de 'Mario' retumbó en mi mente. Bolquee el celular,  pasaron tan sólo unos segundos y tocaron la puerta de la casa, bajé con cuidado deseando que no fuera él, pero para mi mala suerte ahí estaba él recargado en el marco de la puerta.

-- ¿Estás bien?, no contestabas mis llamadas y me preocupé - sus palabras sonaban tan frágiles.

-- Sí, bien -pasé saliva.

-- No te vi en la preparatoria y creí que te había sucedido algo - cada palabra que decía eran como navajas en el pecho.

-- Sólo, no me desperté - me estaba esforzando por no romper en llanto.

Me sentía tan indefensa, ahí prarada me sentía tan débil.

-- ¿Puedo pasar? -preguntó mirando al interior de la casa.

-- Estoy en ropa interior y mi madre llegará pronto -mentí, no quería tenerlo frente a frente.

-- Mmm... ropa interior -hizo un gesto y en su voz había picardia.

-- Podemos hablar mañana -me sorprendí con el gran esfuerzo que estaba logrando.

-- No quiero hablar - me miró con lujuria, empujó la puerta y se lanzó sobre mis labios.

Sus labios eran igual de irreales y me provocaban la misma sensación. Quería detenerlo, pero mi cerebro no coincidía con mis movimientos. Me revolvía el estómago con sólo recordar lo que sucedió en el gimnasio.

-- Basta -tomé el suficiente valor para alejarlo de mi.

-- ¿Qué pasa? -su cara de confusión me causaba gracia.

-- Quiero que te vayas -no entendía nada.

-- ¿Qué sucede? -su voz mostraba preocupación.

-- Por favor, sal de aquí -le indiqué la puerta, quería que se marchara.

-- Pe... -la puerta se abrió ¿Mau?

-- No escuchaste, dijo que te largues -Mau entró y se acercó.

-- ¡¿Tú que carajos haces aquí?! - Mario se separó de mi y se colocó frente a Mau.

-- Largate -Mau parecía estar serio.

-- Y tú quién eres para decirme que debo hacer -Nunca había visto a Mario tan molesto como ahora.

Por favor, no quería un problema más en mi vida.

-- ____ Puedes decirle tú que se largue de una vez -Mau acudió a mi, no pensó que lo volvería más difícil.

-- ¿Por qué deberías hacer lo que él te dice? -Mario cuestionó bastante molesto.

Bajé la mirada, dí un gran suspiro y lo dije:

-- Mario... -sus ojos me estaban suplicando - puedes irte, por favor.

Sus ojos se abrieron totalmente, la sangre le hervía y sus ojos me suplicaban aún más. Se giró sobre los talones miró unos segundos a Mau y se marchó azotando la puerta....

Hola babys, otra capítulo, se está poniendo interesantes...

Tuve este pequeño tiempo para escribir y publicar, espero que les guste.

Les debo una maratón, además quiero agradecerles que somos la novela #1 en el Ranking de MB.

Les debo una maratón, además quiero agradecerles que somos la novela #1 en el Ranking de MB

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Voten y comenten muchooo.

Adiós, besos💓














 Todo Fue un Juego ¥Mario Bautista¥ ||Hot||Where stories live. Discover now