Mina POV
El muelle.
Llegué al rededor de las siete de la noche y aún así ya estaban las estrellas resplandeciendo en el cielo a pesar de la contaminación.
Había una rueda de la fortuna, juegos de destreza, comida, dulces. Parecía una pequeña feria.
Buscaba a Chae pero no la veía por ninguna parte hasta que levantó su mano.
Estaba a un lado de un juego de peluches, formada para ser la siguiente en jugar.
-¡Mina!
Gritó.
Caminé hacia ella.
-¿Vas a jugar?
-¡Claro que sí! Me enamoré de ese pingüino.
Señaló a un peluche gordito y suave, era un pingüino.
-¡Es bellísimo!
-Lo sé.
Chae llegó al frente de la fila y comenzó a lanzar unas pelotas de baseball. Tiró unos pequeños obstáculos y ganó el premio final.
-¡Quiero al pingüino!
Dijo con emoción.
Se lo entregaron y lo abrazó con fuerza.
Después me miró.
-Ten Mina, por alguna razón me recuerda a ti.
Comenzamos a reír y me entregó el hermoso peluche.
-¿Estás diciendo que soy un pingüino?
-Eso eres.
Reímos.
-Gracias Chae.
La chica solamente sonrió.
-Ven, caminemos. Tengo hambre.
Dijo la chica, tomándome de la mano.
El sentir su tacto alborotó todas mis hormonas. Su piel era suave como mi peluche y se sentía... diferente.
-Dios, cuánta gente.
Dije.
-Lo sé, no te pierdas pequeña.
Reí.
Compramos algodones de azúcar de color rosa.
-Mira, este es mi lugar favorito.
Seguí a Chae.
Nos acercamos al final del muelle, no había absolutamente nadie y la vista era genial. La belleza de la ciudad se reflejaba en el agua y la feria se admiraba de lejos.
No había ruido.
Solo éramos ella y yo.
Nos recargamos en un poste para observar el paisaje.
-Este lugar es precioso, nunca había venido.
-¿Nunca? Te perdías de mucho, Mina.
-Lo sé...
Nos quedamos en silencio mientras comíamos.
-¿Qué dijo tu círculo social de qué pasaste la materia?
-Mis amigas no lo creían.
-¿Tu novio?
Me quedé en silencio.
-Él y yo... terminamos.
Miré al suelo.
-Lo siento mucho.
-No te preocupes, era un idiota.
Chae rió un poco.
-¿Podemos hablar de algo?
Pregunté con un nudo en la garganta.
-¿Qué pasa?
-Recuerdas en la fiesta...
-¿Ajá?
-Ya sabes...
Chae me miró con extrañeza.
-El-
-¿El beso?
La chica interrumpió.
Me sonrojé.
-Sí, nuestro beso.
-Dijiste que lo olvidara.
Noté que Chaeyoung se tornó triste.
-No, Chae, estaba en muy mal estado.
-¿Por eso me besaste?
-¡No!
-No te entiendo.
Chae comenzó a alejarse de mí. Caminaba de regreso a la feria.
-¡Chaeyoung!
-Deja de jugar con los sentimientos de las personas. No por ser lesbiana significa que me gusta cualquiera.
Al escuchar sus palabras de la única manera en la que reaccioné fue en tomarle la mano y jalarla hacia mí.
Tenía su rostro a centímetros del mío.
Sentí su respiración.
-No estoy jugando contigo. Ese beso sí significó algo para mí.
Miré sus ojos miel.
-Eres heterosexual, Mina.
-¿Y si no?
Dije para después acercarme a sus labios lentamente. Los observé.
Pasé un dedo sobre ellos, sintiendo su humedad.
-Bésame.
Dijo Chae.
Atrapé sus labios de nuevo, como aquella vez. Probé ese sabor que tanto extrañé. Sus labios eran mi perdición. La besé con pasión bajo el brillo de la luna. Comenzamos a besarnos apasionadamente, como si fuera lo único que necesitábamos para sobrevivir.
-Ah.
Gemí entre besos.
-Mina...
-¿Qué pasa hermosa?
Dije mientras nos detuvimos.
La chica comenzó a acariciar mi cabello.
-Me gustas.
Mi corazón se detuvo.
-Tú también me gustas, Chaeyoung.
Ambas sonreímos.
Volví a besarla tiernamente, haciendo una melodía que solo nosotras pudiéramos escuchar.
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PRIDE (Michaeng)
Romance"Ella es el oro al final de mi arcoíris pero tal vez a ella no le gustan los arcoíris." •TERMINADA.