Euphoria - Scorbus

Capítulo 18

Todo Hogwarts hablaba sobre la posible relación amorosa entre el par Potter-Malfoy, incluyendo a los maestros, sin embargo ninguno de los dos se atrevía a dar un primer paso con el otro, solo sutiles indirectas, como abrazos más apretados, dormir juntos, besos en la frente, y un montón de demostraciones de amor, que eran evidentes para todo el mundo, menos para ellos.

Ya faltaba poco para las vacaciones de Navidad, y Albus necesitaba saber que haría al respecto, necesitaba sentir a Scorp cerca, soñaba con él, deseaba besarlo en incluso más. Pero no pensaba dar el primer paso. Su amigo ya sabía que él tenía preferencia por los hombres, que otro chico lo había besado... si quisiera algo con él ya le habría dicho ¿no? Tal vez Scorp si se sentía del mismo modo, pero le preocupaba el qué dirán, o que su amistad se perdiera por siempre si es que su relación no funcionaba, de hecho a él también le inquietaba todo eso, aunque sabía que de todos modos siempre podía decepcionar a su familia y no sería ninguna sorpresa... En fin, eran muchas las dudas que lo asaltaban, y necesitaba de alguna ayuda para poder responderlas, ya que por si mismo jamás se atrevería, y por lo visto Scorpius tampoco.

Por su parte Scorpius sentía cada vez más la tensión sexual entre él y su amigo, no sabía en qué momento todo el cariño y amistad habían evolucionado en algo más. Se sentía totalmente atraído por Albus, pero no era capaz de ver las señales que éste le mandaba, o simplemente las veía y las ignoraba, porque era mucho lo que tenía que perder si las cosas no salían como esperaba.

Se fueron juntos a la clase de pociones, conversando alegremente como siempre. Cuando iban en el pasillo se les unió Adam y abrazó a ambos. 

—¡Hola chicos! Creo que tenemos la misma clase —le guiñó un ojo a Albus, lo que hizo que Scorpius se irritara y se zafara de Adam. Sin embargo no dijo nada para no hacer sentir mal a su amigo.

Los tres Slytherin llegaron a la clase. Había una guapa profesora con la que anteriormente Scorp había molestado a Albus, se sintió tonto al recordar cuando su amigo le dijo "a mí no me gustan las mujeres mayores", si tan solo hubiese omitido la palabra mayores en ese minuto...

La profesora de ojos de color azul-grisaceo comenzó a hablarle a la clase.

—Cuando yo era estudiante, el profesor Slughorn hacía siempre una actividad donde quien preparara la mejor poción de la clase recibiría un poco de suerte líquida.

A Albus y Scorpius se les iluminó la cara, ambos querían un poco de suerte para lo mismo: ver si su amor sería correspondido. 

—Supongo que usted sabe bien esa historia señor Potter —replicó la profesora al ver la cara de emoción del chico Potter.

Albus se sonrojó, en realidad su padre la había usado para algo mucho más noble... Pero bueno, él no era su padre, y eso lo tenía muy claro. Se esforzó como nunca esa clase, pero como podía esperarse su platinado amigo, que era el alumno estrella del salón, ganó la pequeña botellita contenedora de felix felicis. Albus le rogó que le diera un poco, ni siquiera la mitad, necesitaba solo un poco, pero Scorpius se negaba, solo por diversión. Le gustaba ver cómo esos ojos verdes le rogaban.

—Bien Albus, pero debes decirme para que la quieres tanto... —Scorpius de verdad estaba intrigado.

—Eso ya lo verás Scorp, pero no puedo decírtelo... es un secreto —le dijo mientras se acercaba. Scorp podría jurar que su amigo lo estaba seduciendo.