Fin de días casi tranquilos

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LIZ

-No mientas de esa manera, Liz- dice Mike dándome palmadas suaves en la cabeza 

¿¿Eh??

-¿Eh?- dije confundida

-Tú me conoces desde que eras pequeña y fuiste testigo de "eso", seria imposible que sientas algo por mí- dijo Mike

-¿"imposible que sienta algo por ti"?¿Por qué dices eso?- dije

-Las chicas se enamoran siempre de la persona más cercana a ellas pero solo termina en una ilusión- dijo -y ...como sabes toda mi vida en secundaria eso seria suficiente para que me detestes- dijo esto último en un tono triste

Es verdad, aunque no quiera admitirlo, estoy segura que al comienzo era así.

 Veía como él y mi hermano se divertían siempre y sin que me de cuenta sentí un cosquilleo al ver a Mike todos los días mientras jugaba con mi hermano y...su pasado en secundaria es complicado. Un oscuro agujero esta ahí y nadie de los chicos lo sabe excepto Alex y yo, nosotros somos unas de las pocas personas que saben esto.

-Eres un idiota, Mike- esa palabra salió de mis labios

Él se quedo sorprendido de lo que dije y yo entre a mi habitación.

-Espera, Liz, ¿Por qué soy idiota?- dijo  al otro lado de la puerta tocando la puerta -Liz, abre la puerta

Yo me quede sentada apoyada en la puerta.

-Hey Mike, dime, ¿por qué te enamoraste de mi hermana?¿por qué te enamoraste de tu mejor amigo?- dije

Mike dejo de tocar.

-simplemente paso, no es que lo planeara o algo así, yo...simplemente me enamore de ella

Dolor, eso sentí al escucharlo porque era lo mismo que me pasa con él.

Un sentimiento indescriptible.

-por eso eres idiota- dije y las lagrimas empezaron a caer en silencio

-Liz...- susurro mi nombre tan dulcemente que llore aun más aún en silencio -yo...lo siento

¿Lo siento? 

Dice eso...¿Por qué me rechaza? o ¿por qué?

-Liz, no sé que pasa pero estoy seguro que metí la pata

Idiota

Me levante secándome las lagrimas que resbalaban por mis mejillas.

-eres en verdad un tonto, Mike pero...

Igual te amo

 -pero no importa

Abrí la puerta y ahí estaba Mike apoyando en la pared de mi izquierda junto a mi puerta

Nuestro ojos se encontraron y yo....salí corriendo

-¡LIZ!

Mike me llamo pero no podía verlo...no ahora.

Seguí corriendo para perderlo y después de correr un rato y perderlo entre pasillos, lo vi.

La única persona que me apoyara en silencio y sabrá cuidadosamente que decir para mi bien, mi hermano.

Corrí y abrace por la espalda a Ale.

*Fin de Flashback*

-nada- dije -no es nada importante

Ale me miro dudosa pero asintió.

-¿que hacen aquí?- pregunte al ver a Gabriel con unas mantas

Cambio de SexoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora