𝓔𝓵 𝓬𝓱𝓲𝓬𝓸 𝓭𝓮 𝓵𝓸𝓼 𝓵𝓲𝓫𝓻𝓸𝓼; 𝓙𝔂𝓪𝓽𝓽

📖 C a p í t u l o 11

Cuando la lluvia cedió y el cielo comenzaba a obscurecer, ambos chicos estaban cansados, Jaeden tomo su mochila y se despidió de Wyatt.

—Nos vemos luego— se acercó y le dejó un beso en la mejilla, para después marcharse dejando a Wyatt totalmente sonrojado.

Por el lado de Jaeden caminaba tranquilo hasta su casa, pero algo le olía mal, sentía una mirada, no sabía si era el cansancio y empezaba a imaginar cosas, pero era una mirada y estaba seguro que algo lo estaba mirado desde atrás. Escucho un "Jaeden" pero fue más un susurro. Acelero el paso echando miradas por encima del hombro, hasta que chocó con alguien, estaba más nervioso que nunca.

—Jaeden, Jaeden, Jaeden— hizo un sonido chasqueado la lengua, era Lilia y por un momento se sintió aliviado, pero después todo el alivio se volvió nervios, estaba con ella el chico del otro día, Theo —Así qué, ¿vuelves de la casa de tu noviecito?— Jaeden miraba a ambos chicos con miedo, sabía que Lilia estaba completamente loca y a su amigo o nuevo novio, quien sabía, no lo conocía lo suficiente como para decir algo sobre él, pero si era amigo de Lilia, nada podría esperarse.

—N-no es mi novio— la voz de Jaeden en su mente sonó tan fuerte, pero realmente casi apenas y lo escucharon —Solo es mi amigo— hablo un poco más alto

—Ajá, "amigo"— río Lilia sarcástica —¿Crees que soy idiota?— Jaeden se limitó a guardar silencio mirándola con temor, paseando su mirada de ella a Theo —Vamos, ¡di algo!— grito Lilia, Theo río y Jaeden los miro pasando saliva —Vale, no digas nada, yo lo diré todo— se aclaró la garganta —Haz terminado conmigo por ese imbécil, ¿no es así?— Jaeden negó rápidamente a punto de decir algo —Ah Ah ah, callate. Ahora solo vamos a darte una pequeña lección de porque no debes terminar conmigo, tú eres mío y si no eres mío no vas a ser de nadie más, ¿entendiste?— Jaeden quedó completamente estupefacto iba a protestar, hasta que sintió como dos manos lo tomaban por los hombros

—¡Sueltame!— fue lo primero que se le escapó de la boca, forcejeo y le pego un codazo en el pómulo al otro chico, Theo se acercó y le pego un golpe en la mandíbula con el puño cerrado

—¡Callate! Tendremos que enseñarte una pequeña lección— el otro chico que a lo que Jaeden pudo escuchar se llamaba Andy lo sostenía aún por los hombros

Jaeden forcejeaba con un dolor insoportable en la mandíbula, Theo había sacado de su bolsillo una navaja mientras Lilia miraba todo con malicia, estaba feliz de que le hicieran daño a Jaeden.

Theo abrió paso a la hoja de la navaja presionando un pequeño botón que había en ella, haciéndose escuchar un "click" dejando ver la hoja de la navaja bastante afilada reflejándose la luz de una de las farolas que contra penas los alumbraba. Jaeden con el pulso descontrolado miraba a Theo con miedo, lanzaba una mirada de vez en cuando a Lilia pidiéndole que se detuvieran, pero Lilia se limitaba a reír admirando con descaro como maltrataban al de ojos azules.

Andy deteniendo aún a Jaeden con fuerza, lastimándole los hombros reía como un maníaco, Theo por su parte se acercaba cada vez más al ojiazul hasta que estuvo lo suficientemente cerca como para poder poner la navaja en su mejilla izquierda.

—¿Q-qué haces?— su voz tenía un toque de miedo, Theo río con malicia y deslizó la navaja por su mejilla haciendo un corte profundo. Andy lo tiro al suelo y le pego una patada en el estómago —Eso es por el golpe de hace un rato— todos rieron y Lilia se arrodillo a su lado —Esto es sólo el inicio, si no vuelves conmigo y te olvidas de ese niño idiota— río de nuevo, esa risa lo estresaba tanto —Tendrás otra lección— le dejó un beso en la mejilla izquierda, justo donde estaba el corte, Jaeden hizo una mueca de dolor y se retorció haciendo una mueca dejando algunas lágrimas caer. Theo, Andy y Lilia se marcharon riendo, dejándolo en el suelo. Cuando estuvo completamente seguro de que Se habían ido y no volverían, tomo su celular y llamó a Wyatt.

Unos minutos después Wyatt llegó corriendo, la mejilla de Jaeden chorreaba sangre, Jaeden estaba llorando recargando en un árbol. Wyatt se arrodillo delante de él y lo observó con la poca luz que había, si así se veía fatal no quería imaginar como se vería con más luz.

—¿Qué ha pasado? ¿quien te ha hecho esto?— Bastante angustiado lo abrazo acariciando su cabello ligeramente, Jaeden seguía sollozando

—No se siquiera porque te llame a ti— hablo entre sollozos el ojiazul —Van a lastimarte a ti también, estoy seguro— lloriqueo tocándose la mejilla lastimada —Wyatt, lo siento muchísimo, no me importa, no quiero que me dejes sólo, por favor y si hace falta que golpeen a alguno de los dos es a mi, no quiero que te hagan daño por mi culpa— Jaeden llorando lo abrazo y gimoteo llorando, el dolor era insoportable, no quería imaginar lo que pasaría si los chicos que lo habían golpeado anteriormente volvían y los veían juntos

—No digas tonterías, Jae, yo estaré cuidando de ti siempre, no me importa si me golpean o si están a punto de matarme— Wyatt le tomó los hombros cosa que hizo que Jaeden soltara un pequeño jadeo— mirame, mirame bien— Jaeden lo miro algo asustado, con los ojos rojos e hinchados de tanto llorar, no podía sacar de su mente las palabras “tendremos que darte otra lección” —No voy a dejar que nadie, nadie nunca más vuelva a ponerte una mano encima, ¿escuchaste bien? ¡Nadie!— Wyatt le tomó las mejillas, tratando con cuidado la que estaba lastimada y beso su frente, aquel beso que le decía "Voy a protegerte eternamente".

∆∆∆
Esto huele ah.. Ah.. *inhala* A maldad, a tragedias, okno... Ah no ser...

×Soph ♥